El conflicto entre Ucrania y Rusia no solo ha dejado imágenes de armamento rudimentario para la posteridad. Ambos bandos están usando armamento militar muy avanzado, y los avances en este tipo de dispositivos podrían determinar la balanza de la guerra a favor del mejor equipado. Existen indicios de una nueva arma fabricada por una empresa holandesa que consiste en un dron equipado con un cargador de tambor repleto de proyectiles explosivos.

Según adelanta The Drive, en Internet se están viendo imágenes y vídeos no verificados sobre un dron cuadricóptero equipado con un cargador de tambor pero que en vez de sostener balas, integra proyectiles de mortero explosivos. Varios vídeos que muestran el supuesto funcionamiento de esta arma aérea, que permitiría dejar caer varios de estos proyectiles en sucesión sobre terreno enemigo.

Se estima que este dron habría sido desarrollado por fuerzas ucranianas y varios vídeos muestran cómo el cargador de tambor va girando para ir soltando la carga, que se va liberando proyectil a proyectil del dron. De hecho, existen incluso supuestos vídeos que estarían relacionados con este dron, que podría haber sido usado por el ejército de Ucrania.

Un extraño dron

Lo primero que hay que aclarar es que los vídeos sobre este dron no están completamente verificados, por lo que perfectamente podrían estar falseados. El dron consta de 4 hélices con sus respectivos motores montados en una estructura con el cargador de tambor en la parte inferior. El tanque del cargador va girando y uno a uno van cayendo los proyectiles de mortero.

Según los vídeos y fotos mostrados hasta ahora, se está considerando la idea de que las fuerzas ucranianas estén diseñando este sistema para montar estos cargadores en drones multirrotores, haciendo que estén listos para usar. El mecanismo desde luego es tremendamente simple, y lo cierto es que en estas últimas semanas ambos bandos ya han demostrado ser increíblemente ingeniosos confeccionando armamento rudimentario, fuera de los estándares de calidad habituales.

Existen varios vídeos de supuestos casos relacionados con estos drones. Por ejemplo, este muestra un ataque a un tanque ruso T-72B3, en el que se pueden ver hasta 4 proyectiles de mortero similares a los que se ven en los vídeos de demostración del dron con el cargador de tambor. Además, existen otros dos vídeos que hablan sobre escenarios de combate en los que se usaron drones para lanzar material explosivo sobre posiciones ucranianas, en este caso desde unidades rusas.

Hablamos de mecanismos tan rudimentarios como el almacenar en un vaso de plástico la granada y usar una cuchara que mantiene la espoleta de la granada en su sitio hasta el momento del impacto. Así, cuando cae, la cuchara deja de mantener la espoleta y se detona la granada. Incluso se han llegado a obtener indicios de que este sistema de tambor se habría iniciado como un sistema de reparto de cerveza para instalaciones de Heineken.

Sea como fuere, lo más relevante de la noticia sobre este dron es que si bien existen metrajes e indicios sobre el dron en sí, lo que más llama la atención es su mecanismo de munición. Ambos bandos han estado usando drones de consumo e invenciones que imitan a estos drones. Este mecanismo dotaría a estos drones de consumo de un gran potencia de fuego, obligando tanto a Rusia como a Ucrania (y otros países) a intervenir para interceptarlos. 

No obstante, no es la primera vez que vemos algo así. Ya en la guerra contra el ISIS en Siria se pudieron ver drones caseros y aeronaves de consumo, de gama baja, equipados con artefactos explosivos y artillería casera similar atacando al enemigo. Tal y como detalla The Drive, esto ha llegado a ser una preocupación para algunas agencias internacionales como el Departamento de Defensa de EE.UU, que considera los drones de consumo como un potencial peligro para estas situaciones bélicas.

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