El 2020 ha sido un año importante de lanzamientos en España para Apple; no sólo han llegado los nuevos iPhone 12, sino que la compañía por fin ha iniciado su independencia de Intel con el lanzamiento de sus primeros MacBook con procesador propio.
Pero el 2021 puede ser incluso más decisivo para su futuro. No solo se espera el lanzamiento de más Mac con procesador Apple, sino que estaría preparando nuevos dispositivos como unas gafas de realidad aumentada.
Aún no está claro si este proyecto secreto verá la luz, pero las filtraciones indican que ya hay al menos varios prototipos de lo que sería posible. Y a eso hay que sumarle las patentes registradas por Apple.
Gafas de realidad aumentada
Unas gafas de realidad aumentada permitirían a Apple ofrecer apps y servicios sin necesidad de usar el iPhone o el Apple Watch; sería una manera más natural de seguir el camino marcado por la app de mapas, o de encontrar información sobre los objetos que miremos.
Las posibilidades son infinitas, pero estamos hablando de Apple; tiene que haber algo especial, algo que no hayamos visto ya en proyectos como las Google Glass.
La clave puede estar en la última patente de Apple que se ha hecho pública, en la que detalla una manera de crear lentes que se adaptan a la vista del usuario.
Adiós a la miopía
La patente, titulada "Dispositivo electrónico con lentes ajustables", detalla un método para hacer que el punto focal de las lentes cambie dependiendo del usuario, con un mecanismo de ajuste que permitirá personalizar la experiencia para cada persona.
El problema con el que se ha encontrado Apple es que tendría que ofrecer la opción de lentes graduadas; hay empresas que se asocian con ópticas para esto, mientras que en otros casos los usuarios son abandonados a su suerte.
La tecnología que Apple ha ideado evitaría esto, ofreciendo el mismo modelo de gafas para todo el mundo gracias a que estas podrían cambiar de graduación automáticamente. Este sistema estaría basado en una cámara central de líquido, entre las lentes, cuya presión podría cambiar; dependiendo de la cantidad de presión añadida, las lentes flexan, cambiando sus propiedades ópticas.
No es una idea tan rara; en realidad, ya existe un prototipo de gafas autofocales, presentado el año pasado por la Universidad de Standford que se parece, al menos en la teoría, a la patente de Apple.
Por lo tanto, las lentes podrían cambiar para ajustarse a nuestra vista, probablemente con algún tipo de aplicación que permitiese pasar por un proceso de personalización. También se podrían crear diferentes tipos de lentes, dando forma a esta sección líquida con pequeños motores, ajustando de forma más precisa la manera en la que la luz pasa por la lente.