Durante 2023, sólo los viajes de las 200 celebridades más importantes del mundo produjeron una estimación de 415.518 toneladas de dióxido de carbono en sus trayectos aéreos privado. Se trata del equivalente a las emisiones de unas 40.000 personas durante un año, según datos de The Guardian. Este método de transporte, con grandes nombres como Elon Musk o la cantante Taylor Swift como usuarios habituales, se ha convertido en el eje de sus vidas para llevar a cabo las actividades personales y laborales diarias.
En la actualidad, las alternativas no contaminantes a los jets privados tradicionales son nulas con algunos programas centrados en la aviación eléctrica con muy poca autonomía y capacidad. Sin embargo, compañías como Sirius Jet se encuentran desarrollando plataformas basadas en hidrógeno que proporcionan más rango de acción, repostajes rápidos y flexibilidad al permitir despegues y aterrizajes en la vertical.
Se trata de un concepto que combina lo mejor del mundo de los helicópteros en cuanto a operatividad y el de las aeronaves por capacidad de planeo y aerodinámica una ver en el aire. Sirius colabora con Desingworks, una compañía del grupo BMW, para el diseño de las nuevas aeronaves.
"Su experiencia en diseño e innovación nos ha ayudado a crear aviones que no sólo son tecnológicamente más avanzados sino también estéticamente impresionantes", aseguran desde Sirius Aviation en un comunicado. "Estamos cerrando la brecha para aquellos que aspiran a estar orgullosos de ser propietarios de un avión en un mundo con conciencia ecológica".
La compañía, con sede en Suiza, presentó hace sólo unos días sus dos nuevos modelos: Sirius CEO Jet y Adventure Jet. Dos diseños que parte den la misma base pero que se han desarrollado para aplicaciones muy dispares. El primero de ellos como avión de transporte de pasajeros y el segundo preparado para poder operar en los terrenos más variados.
Sirius CEO Jet
La plataforma común de ambos modelos integra un estabilizador horizontal avanzado —como el que se puede ver en el avión ejecutivo Piaggio P.180 Avanti— al que han integrado un juego de 4 motores a cada lado. La segunda superficie sustentadora se encuentra algo más atrasada respecto a la cabina de mandos, más o menos en la mitad del fuselaje, y es la que proporciona mayor empuje gracias a los 20 motores que se reparten entre ambas partes.
El diseño se remata con los estabilizadores verticales en la cola en forma de V, que aportan buena parte del control de guiñada de la aeronave. El complejo sistema de propulsión que acompaña al conjunto se encuentra en la actualidad en plena fase de desarrollo con un 70% completado, según comentó Alexy Popov, el CEO de la compañía a New Atlas.
El total de 28 motores que irán a bordo de las aeronaves de Sirius son realmente propulsores eléctricos. La compañía ha planteado un esquema de generación eléctrica a partir de hidrógeno y a través de un sistema propio que se encuentra en la parte trasera del avión. Se trata de un método similar al que grandes corporaciones aeronáuticas como Airbus ya plantean y prometen copar buena parte de la aviación comercial a medio plazo.
La electricidad generada a partir de ese hidrógeno pasa directamente hacia los 28 motores. Cada uno de ellos pesa 9,6 kilogramos y tienen un diámetro de 30 centímetros, con los que consiguen una velocidad de crucero de unos 500 km/h y hasta 6.400 metros de altitud de crucero.
Uno de los puntos más importantes es el bajo nivel de ruido que genera al no generar una combustión en sus motores. Según la compañía, la huella sonora sería similar al de un lavavajillas. Sirius también incorporará un paracaídas de emergencia a bordo, que se desplegará de forma automática en caso de que los motores se detengan.
El CEO Jet recién presentado cuenta con una capacidad máxima de 3 personas a bordo, contando con el piloto de la aeronave. Tiene una autonomía de vuelo de 1.850 kilómetros y un interior de lujo especialmente concebido para los vuelos de trabajo de corta y media distancia.
Con esa autonomía, la aeronave puede sustituir una parte esencial de los vuelos privados de corto alcance que se realizan hoy en día. A falta de contar con una plataforma mayor, todavía está muy por detrás de las capacidades que ofrecen los jets ejecutivos modernos con hasta 12.000 km de autonomía en los modelos más avanzados.
Sirius Aviation también confirmó al mismo medio que su objetivo es comenzar la fabricación en serie a partir de 2028. Sin embargo, por delante quedan todavía algunas trabas administrativas y licencias que las autoridades no han expedido ni parece que lo vayan a hacer a corto plazo.
Sirius Adventure Jet
El Adventure Jet promete ser el todoterreno de los aviones de despegue y aterrizaje vertical. Cuenta con espacio para hasta 5 personas dentro de la cabina, incluyendo el piloto, en la versión con pasajeros mientras que en la de carga la cifra puede alcanzar los 1.300 kilogramos a bordo.
Tiene un peso máximo al despegue de 3.500 kilogramos y un fuselaje y planta motriz calcada al CEO Jet mencionado antes. Los 28 motores que la componen le confieren una velocidad máxima de 520 km/h con una autonomía de 1050 kilómetros en su versión estándar. La compañía recoge la posibilidad de equipar tanques de hidrógeno extras para aumentar el rango hasta lo 1.850 km.
El papel principal que tendrá la aeronave será de el transporte —tanto pasajeros como carga— y podrá equipar una flotadores para convertirlo en un hidroavión. La compañía recoge que también podrá aplicarse en tareas de evacuación médica, búsqueda y rescate, apagafuegos, servicios para plataformas petrolíferas, vigilancia y operaciones especiales.
En su interior cuenta con todo tipo de sistemas modernos para la navegación con capacidad de vuelo instrumental para condiciones de baja visibilidad y operar en aeropuertos comerciales. También dispone de piloto automático avanzado compatible con la maniobra de aproximación y, como equipamiento opcional, sistema de comunicación por satélite.