Mil Mi-28 en vuelo
Cazador Nocturno, el helicóptero que Rusia envía a la desesperada contra drones ucranianos
El Kremlin moviliza una serie de unidades especiales de helicópteros para intentar destruir a los drones de Kiev con un cañón automático.
12 septiembre, 2023 02:30El empleo masivo de drones en el campo de batalla es una de las señas de identidad del Ejército de Ucrania. Miles de estas plataformas voladoras se incorporan al servicio militar todos los meses y otras tantas perecen en la misión a manos de Rusia. Las tropas de Moscú, desde que comenzara la invasión, se han especializado en repeler misiones ejecutadas por drones y actualmente se encuentran desplegando varias unidades especiales de helicópteros para realizar este trabajo tan complejo.
Un escenario donde el escaso tamaño de los drones —en muchas ocasiones incluso de fabricación casera— y su elevada movilidad ponen en jaque el armamento antiaéreo ruso. De ahí la necesidad de llevar los mejores efectivos y emplearlos para derribar a las plataformas allá donde la guerra electrónica no surte efecto.
El arma encargada de este trabajo es el cañón automático Shipunov 2A42 de 30 milímetros de calibre integrado en el morro y originalmente diseñado para montarse en blindados sobre tierra firme. Según recoge Defence Blog, las tripulaciones están recibiendo entrenamiento para interceptar a estas pequeñas aeronaves tanto de día como de noche y en todo tipo de climatología.
Mil Mi-28N con el cañón antidrones en la parte inferior delantera
Este movimiento sigue la estela de otros intentos por parte de Rusia de utilizar a los Mi-28 como interceptores de drones. La Dirección de Inteligencia de Defensa de Ucrania informó hace sólo unos días que dos Mi-28 y una aeronave no desvelada de Moscú persiguieron a uno de los drones de vigilancia ucranianos que se encontraban sobre Crimea. Sin mucho éxito, según el mismo servicio de inteligencia.
Cazador Nocturno
El Mil Mi-28 es uno de los helicópteros de guerra más avanzados de cuantos Rusia tiene en su flota. La primera generación se gestó entre finales de los 80 y principios de los 90, pero por entonces el país pasaba por una gravísima crisis económica fruto de la caída de la Unión Soviética. Finalmente, el proyecto fue cancelado en 1993 sin que una sola unidad entrara en servicio y en pro del Ka-50, otro helicóptero similar.
Mil Mi-28N en vuelo
Sólo dos años después, se presentó en sociedad una segunda versión del helicóptero actualizada con nuevos sistemas y bajo el nombre de Mi-28N, apodado Cazador Nocturno. Esa línea de desarrollo finalmente cristalizó en 2006 cuando se entregó la primera unidad de producción de la aeronave y el ritmo de fabricación se fue incrementando de forma gradual hasta convertirse en una de las plataformas más avanzadas del ejército ruso.
Junto al Ka-52 Caimán, son los dos pilares fundamentales de Moscú en la rama de los helicópteros de ataque. Similar a lo que ocurre con los Apache en Estados Unidos o los Tigre en España. La elección del Mi-28 para este tipo de misión responde a su probada maniobrabilidad y la flexibilidad operativa que consigue integrando el nuevo cañón. Una combinación que tendrá que hacer frente a una amenaza tan compleja como son los drones, también los de pequeño tamaño.
La tripulación del Cazador Nocturno la componen el piloto y el oficial de sistemas de armamento situados uno detrás del otro. La longitud alcanza los 17 metros excluyendo los rotores y el peso máximo al despegue es de 11,5 toneladas que consigue levantar del suelo gracias a un par de turbinas de más de 2.000 caballos cada una y que alimentan a un único rotor principal.
En el apartado de rendimiento, además de la mencionada maniobrabilidad, consigue una velocidad máxima de 320 kilómetros por hora con un radio de combate de 200 kilómetros y una autonomía de unas 2 horas. La altitud máxima que puede alcanzar el aparato se sitúa en los 5.700 metros, aunque tan sólo puede mantenerse en estacionario a los 3.600 metros como tope.
Detalle del autocañón Shipunov 2A42
En cuanto al armamento, el autocañón Shipunov 2A42 se desarrolló en los años 70 y se puso en servicio en 1980 protagonizando varios tipos de vehículos de infantería soviéticos. Se trata de un sistema fiable que todavía hoy en encuentra operativo en los blindados de tierra firme y también en algunos helicópteros de combate como el Mi-28 —con 250 cartuchos— y el Ka-52 —con 460 cartuchos—.
El Cazador Nocturno también cuenta con dos pilones para acomodar todo tipo de armamento pesado. Principalmente misiles antitanque guiados Ataka-V y cohetes S-8 y S-13. Como helicóptero de guerra, también integra misiles aire-aire: el Igla-V —como adaptación de un misiles tierra-aire— y Vympel R-73.
Caimán decepcionante
El Ka-52 Caimán fue, al principio de la invasión a Ucrania, una de las grandes promesas del Ministerio de Defensa ruso. Un helicóptero que tiene como referencia y contrincante directo al Apache estadounidense y que no ha hecho sino dar disgustos a Putin en este año y medio. El último informe de inteligencia de fuente abierta señala que Rusia ha perdido un total de 43 Ka-52 Caimán, la mayoría de ellos destruidos.
Se tratan de unidades verificadas, por lo que realmente podrían ser más, y representan aproximadamente el 50% de la flota de Ka-52 que tenía Rusia en servicio. Pero más allá de las unidades derribadas por tropas ucranianas, el problema de los Caimán viene por un defecto muy grave que compromete la integridad del aparato.
Ka-52 Caimán
Tal y como se ha podido ver en algunos vídeos, algunas unidades están sufriendo la pérdida de partes del fuselaje debido a las vibraciones que producen los motores del helicóptero. El problema podría venir debido a una falta de mantenimiento o una fabricación de base deficiente. Es posible que se produzca debido fallo en el montaje del rotor de la aeronave; multiplicándose debido a la gran velocidad con la que gira, realizando un movimiento excéntrico que puede acarrear daños importantes.
Otra posibilidad es un problema en el montaje de alguna de las palas, que puede no estar correctamente colocada y alineada para compensar el resto de fuerzas a las que está sometido el helicóptero. Por el momento, los detalles sobre el origen de la gran vibración son escasos y teniendo en cuenta el hermetismo ruso es probable que nunca se llegue a saber. Más cuando no parece ser un problema que afecta todas las unidades.
