El férreo cerco que está aplicando Rusia y la amenaza de la contraofensiva de Ucrania se han saldado con una nueva e importante baja en las filas de Zelenski. Según acaban de anunciar las autoridades rusas, "el último buque de guerra" con el que contaba la Armada ucraniana ha sido destruido durante un ataque ejecutado el pasado lunes con el puerto de Odesa. Todo ello enmarcado en una guerra a la que España ha enviado material militar.
Este emplazamiento estratégico situado al sur del país es uno de los enclaves más importantes y, hasta hace un par de días, la base del buque Yuri Olefirenko. "El 29 de mayo, como resultado de un ataque con un arma de alta precisión de las Fuerzas Aeroespaciales de Rusia contra un punto de anclaje de buques de guerra en Odesa, el Yuri Olefirenko fue destruido", según el Ministerio de Defensa de Rusia.
Por su parte, las autoridades ucranianas no se han pronunciado por el momento sobre las afirmaciones del Kremlin. Si finalmente se confirma la destrucción total o parcial del buque, sería más una pérdida simbólica que operativa, dado que Ucrania se ha centrado en la guerra terrestre y aérea.
Único en Ucrania
Como casi todo el material militar propio de Ucrania, el Yuri Olefirenko tiene su origen en la época soviética dentro de la categoría de embarcaciones de guerra anfibia. Pertenece a la clase de barcos conocida en la OTAN como Polnocny-C y esta unidad comenzó a construirse a finales de la década de 1960.
El barco se botó el 31 de diciembre de 1970 y se entregó a la Armada Soviética tal día como hoy en 1971. Desde entonces se integró en el escuadrón del Mediterráneo donde permaneció con un grupo de infantería de marina a bordo hasta que pasó a manos ucranianas.
Eso ocurrió en 1994 y fue renombrado como Kirovohrad ese mismo año. Ya contaba con casi 30 años a sus espaldas cuando entró en los astilleros en 1998 para una profunda reparación que duró hasta 2002. Volvió a pasar por el taller solo 10 años después por un periodo de un año y en 2016 se rebautizó con el nombre de Yuri Olefirenko en honor a un marino ucraniano que luchó en la guerra del Dombás.
En cuanto a sus características, las embarcaciones de la misma clase tienen la capacidad de llevar hasta 12 vehículos de transporte blindados BMP-2 a bordo o 4 tanques pesados o 250 soldados de infantería con sus respectivas armas. La particularidad del buque es que cuenta con una gran rampa en la proa que conecta la bodega interna con el exterior y se usa para realizar desembarcos a pie de playa.
Dispone de 73 metros de eslora por 9,6 de manga y hasta 834 toneladas de desplazamiento a plena carga. En cuanto a la propulsión, los modelos salían de fábrica con un par de motores diésel de 4.400 caballos de potencia cada uno que mueven dos hélices.
Tienen una autonomía de 2.000 km a una velocidad de crucero de 33 km/h. Algunas unidades también disponen de armamento a bordo protagonizado por lanzadores de misiles superficie-aire, cañones antiaéreos y lanzacohetes.