Los principales eventos deportivos o la adquisición de una consola de última generación sirven a muchos de pretexto para cambiar de televisor, con el objetivo de ver la imagen en la mejor calidad. En ese escenario entra en juego el LG G1 (1.999 euros), el nuevo modelo de la firma coreana que incluye tecnología OLED evo para ver los partidos de España en la Eurocopa de fútbol, los Juegos Olímpicos o la PlayStation 5 como nunca.
LG anunció su nueva gama de televisores el pasado mes de abril, entre los que se encontraba el G1, una serie que incluye los paneles exclusivos OLED evo del fabricante. Se trata del siguiente paso en la evolución de la tecnología OLED que ofrece una mayor luminosidad, realismo, nivel de detalle y una alta calidad.
En OMICRONO hemos probado durante casi un mes el nuevo televisor LG G1 de 55 pulgadas, un modelo que ofrece una calidad de imagen extrema y un audio inmersivo para sentir que las películas, los partidos de fútbol o los juegos están teniendo lugar en tu propio salón.
Más realismo
El panel OLED evo es la principal característica de este televisor, y añade una serie de elementos que mejoran el rendimiento para obtener mayor brillo y color. Gracias a sus píxeles autoiluminiscentes se consigue una calidad de imagen más realista, algo que se nota rápidamente.
Con el G1 la compañía también ha modificado los materiales OLED para conseguir una mayor eficiencia energética, es decir, se pueden alcanzar niveles de brillo más altos sin aumentar el consumo de energía o la posibilidad de que la pantalla sufra algún tipo de retención de imagen. Un brillo adicional que, por ejemplo, hace que el HDR se vea incluso mejor.
Por otro lado, LG también ha incorporado un nuevo diseño de panel OLED que incluye una capa adicional y un material emisor más potente para obtener una imagen más brillante y nítida. Además, son capaces de reproducir un negro más puro y un color preciso para ofrecer una de las mejores experiencias visuales.
El LG G1 ofrece en líneas generales una imagen nítida y colores muy vivos. Además, también permite disfrutar al máximo de los deportes, como un partido de fútbol, con más realismo y movimientos suaves y fluidos. En cuanto al gaming, también se ha incorporado una respuesta más rápida para una mejor experiencia.
Analiza escenas
Otra de las novedades es el procesador Alpha 9 Generación 4 que cuenta con algunas configuraciones de imagen interesantes, como ajustar la calidad en función de la luminosidad de la sala en la que está la TV. Con el análisis por escenas el televisor también es capaz de reconocer el género del contenido que se está reproduciendo para cambiar automáticamente de un modo de imagen a otro.
Por ejemplo, si se pasa de una serie a un partido de fútbol, la imagen cambia dando más detalles a los tonos verdes. En una película, si se reproduce una imagen muy oscura, ofrece más detalles en esas zonas de poca luz y resalta el objetivo principal del fondo.
Por su parte, el modo 'Filmmaker' desactiva la interpolación del movimiento y conserva las relaciones de aspecto, los colores y las tasas de fotogramas originales de las películas. De esta forma, se consigue ver una cinta tal y como su director la creó. Una experiencia que crece aún más gracias a la compatibilidad con Dolby Vision.
En cuanto al audio, el LG G1 incluye sonido inmersivo Dolby Atmos. En líneas generales suena bastante bien, a pesar de que no tiene altavoces orientados hacia adelante. El sonido es potente (40 W), de hecho, al ver películas no hemos pasado del nivel 15 de volumen durante las pruebas, y se expande perfectamente desde todos los bordes del televisor. Además, las voces tienden a sonar claras.
Perfecto para jugar
El LG G1 es un televisor que está bastante optimizado para jugar a las consolas de última generación, como PlayStation 5 o Xbox One Series X. Por ejemplo, ofrece una pantalla de 120 Hz para una experiencia de juego más fluida, una imagen más nítida, un tiempo de respuesta de 1 ms y cuenta con sincronización con tarjetas NVIDIA G-Sync y AMD FreeSync.
Una de las principales novedades es un nuevo menú exclusivo gaming que da acceso a todas las configuraciones de juego disponibles, como activar el 'True Motion' o reducir las emisiones de luz azul. Además, el televisor también permite elegir entre diferentes ajustes preestablecidos de imagen basados en diferentes tipos de juegos, como de estrategia o de disparos en primera persona para obtener mayor fluidez a la hora de jugar.
Incluso cuenta con una herramienta para ajustar las zonas oscuras. Aunque no lo hemos podido probar, cabe mencionar que próximamente habrá una función que podrá desplegar en el centro de la pantalla un vistazo rápido a las configuraciones que se están usando. Para la segunda mitad del año, la compañía también lanzará la aplicación de Google Stadia, la plataforma de juegos en la nube de la gran G, y se podrá jugar tanto con el mando de Stadia como con el de PlayStation o el de Xbox.
Es muy delgado
El LG G1 es un televisor ultra fino y delgado, ya que está pensado para colgarlo en la pared, incluso muestra obras de arte cuando está encendida y no se reproducen contenidos. De hecho, es importante señalar que en la caja no incluye patas y sí un soporte para colgarla. Eso sí, siempre se pueden adquirir las patas por separado, aunque cuentan con un diseño nada elegante, en forma de 'L' grande y en negro, que estropean un poco la estética de la TV.
El diseño del televisor es increíblemente delgado y plano, y cuenta con unos marcos extremadamente recortados. A pesar de su finura, el LG G1 está equipado con múltiples conexiones y con altavoces integrados en la propia carcasa. En total cuenta con cuatro salidas HDMI 2.1 para sacar el máximo partido a los videojuegos, tres salidas USB para reproducir contenido multimedia, una salida para la antena, otra para audio óptico y una última para conectar un cable Ethernet para internet; aunque incluye wifi y Bluetooth.
Por último, LG también ha renovado su mando a distancia, siendo más largo, delgado y ergonómico. En la zona posterior presenta un hueco algo pronunciado pero que permite que se pueda coger con más equilibrio y que resulte cómodo en mano. Además, conserva la opción de navegar por la interfaz apuntando con el mando y una rueda para moverse por los menús más rápidamente.
Entre los botones dedicados del mando, se incluyen los clásicos, como Netflix, Rakuten y Amazon Prime Video; además de uno nuevo que da acceso directo a Disney+, otro para el asistente de Google y uno para Alexa. Incluso viene con NFC que, tras instalar la aplicación Thin Q en el móvil, permite acercar el teléfono al mando a distancia para ver la pantalla en el televisor o escuchar el sonido de la TV en el smartphone.
Un lavado de cara
El televisor LG G1 incorpora WebOS 6.0 que ofrece un diseño diferente a la anterior versión y una mejor experiencia. Por ejemplo, en la zona inferior de su pantalla de inicio se muestran todas las aplicaciones disponibles que se pueden ordenar automáticamente en función de las que más se usen. Incluso se pueden gestionar de manera manual.
En la parte intermedia aparecen recomendaciones de contenido en función de lo que se está viendo, ý que sirve tanto para continuar una serie que se tiene a medias como empezar otras relacionadas que pueden gustar al usuario. En la parte superior hay un espacio reservado a publicidad, información sobre el tiempo y otras recomendaciones generales; además de un buscador.
Si con el mando a distancia se hace scroll hacia abajo en la interfaz aparecen las recomendaciones de cada plataforma, como Netflix, HBO o Amazon Prime Video. Entre ellas también aparecen las alertas deportivas. Es decir, el usuario puede elegir entre diferentes equipos y deportes, y cada vez que un partido vaya a comenzar salta una ventana emergente que avisa del inicio y del resultado final. Incluso hay una sección para ver todas las alertas deportivas.
¿Me lo compro?
El LG G1 (1.999 euros) es, posiblemente, uno de los mejores televisores OLED para ver tanto películas y eventos deportivos, como para jugar a las consolas de última generación. Una TV que ofrece una excelente tecnología que mejora el brillo y que da como resultado unos colores vivos, una mayor nitidez y realismo.
Para jugar, contiene todas las mejoras posibles para que no haya pérdidas de fotogramas ni latencia; y el sonido es envolvente y potente. El único pero es que debido a su diseño delgado es un televisor pensado para colgar en la pared, por lo que si se desea poner sobre una mesa hay que realizar un pago extra por las patas, que estropean un poco su elegante estética.
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