Los asistentes virtuales son cada vez más avanzados y están presentes en aspectos de nuestra vida que no nos podíamos imaginar hace muy poco tiempo. Alexa, Google Assistant y Siri ya se han convertido en miembros de nuestra familia y en ellos confiamos para llevar nuestra lista de la compra o despertarnos cada mañana.

La inteligencia artificial consigue facilitarnos la vida a través de la toma automática de decisiones gracias a que es capaz de aprender de nuestros gustos. La última de las tareas cotidianas que ha llegado a Google Assistant es laelección de nuestra próxima compra de ropa.

El proyecto ha sido llevado a cabo por la famosa marca textil Damart. Famosa por ser la creadora de la tecnología Thermolactyl, una fibra que consigue mantener el calor corporal y ser transpirable al mismo tiempo. Para la parte técnica han recurrido a Atos, una compañía tecnológica especializada en la transformación digital con presencia en 73 países.

Damart ha optado por incluirse en el catálogo de funciones de Google Assistant y ofrecerá al potencial comprador una guía paso a paso para elegir la mejor prenda. Para ello, preguntará sobre la climatología donde se usará, el estilo de vida del usuario, los gustos relacionados con la moda y la actividad física que vaya a realizar. Lo único que tenemos que hacer para iniciar el proceso es decir "Google quiero hablar con Damart".

La recomendación paso a paso se llevará totalmente mediante comandos de voz de forma natural para el usuario y tan solo será necesario alguno de los altavoces inteligentes que cuenten con Google Assistant o con cualquier smartphone Android actual.

Esto cubre la inmensa mayoría de la población objetivo de Damart y desembocará en una solución completa de comercio de voz. Cuando lleguemos al último paso y Damart ofrezca las recomendaciones de ropa recibiremos un mensaje de texto en nuestro móvil. En él encontraremos un enlace (o varios, si hay más de una recomendación) y procederemos a realizar el pedido en su página web. Este paso establece una medida importante de seguridad que impide a un extraño pedir ropa o comprarla por accidente.

En la actualidad, existen algunas empresas que han invertido recursos en proporcionar soporte para los diferentes asistente virtuales. Por ejemplo, Telepizza permite pedir cualquiera de sus productos mediante el asistente para Alexa. Pero no solo de pedir productos viven los asistentes.

Las cuentas de terceros vinculadas con la app Google Home o las skills que campan en la tienda de Alexa proporcionan un ecosistema muy completo de acciones que podemos realizar a golpe de voz. Iberia o Renfe permiten conocer el estado de los vuelos y trenes con tan solo una pregunta.