La refrigeración líquida ya no es algo limitado sólo a los más "frikis" de la informática; durante años, fue una "técnica prohibida" con la que podías enfriar algo más tu procesador, pero con la que corrías el riesgo de destruir tu ordenador si había una fuga.
En cambio, hoy en día prácticamente cualquiera puede comprar un sistema de refrigeración ya premontado e instalarlo en su ordenador sin mucha más dificultad que un disipador normal y corriente. Gracias a esto es cada vez más común encontrarse ordenadores con este tipo de refrigeración, y hardware adaptado a ella. Desde cajas con agujeros para los tubos, a nuevos componentes compatibles.
Ya podemos refrigerar el procesador y la tarjeta gráfica de esta manera, y todo indica que la siguiente moda será la refrigeración líquida en la memoria RAM. En los últimos meses estamos viendo más fabricantes que apuestan por poner entradas de líquido en sus módulos.
Memoria RAM con refrigeración líquida, ¿la necesitas?
Es el caso de Thermaltake, uno de los gigantes en esto de la refrigeración, que ha presentado las nuevas WaterRam, unos módulos de memoria con todo lo necesario para conectar nuestro sistema de refrigeración líquida.
En concreto estamos ante cuatro módulos de 8 GB cada uno, por lo que en total son 32 GB de memoria RAM; son módulos DDR4-3600, por lo que son relativamente rápidos, aunque no son los mas veloces que hemos visto.
Estos módulos están unidos a bloques con puertos a los que podemos conectar los tubos de nuestro sistema de refrigeración líquida; por lo tanto, por si solos no sirven de mucho y necesitaremos una instalación propia. Como no podía ser de otra manera, el bloque también es una excusa para implementar más iluminación RGB personalizada y darle un toque incluso más extremo a nuestro ordenador.
Aunque Thermaltake se guarda algunos detalles, es de imaginar que estos módulos estarán diseñados para ser overclockeados, es decir, para aumentar su frecuencia más allá de cómo están configurados de fábrica. Normalmente los módulos de memoria RAM solo tienen un disipador pasivo, y por lo tanto dependen del flujo de aire de la caja para refrigerarse; eso limita mucho las opciones para sacarles el máximo partido.
No solo eso, sino que estamos viendo chips de memoria RAM cada vez más rápidos, y eso supone que necesitarán refrigeración activa; puede que en el futuro cercano ponerle refrigeración líquida a la memoria sea algo tan normal como ponérsela al procesador.
Por el momento, no tenemos precios para esta Thermaltake WaterRam, pero la compañía afirma que ya está siendo distribuida a las tiendas.