Los rebeldes hutíes del Yemen, respaldados por Irán, han confiscado un buque que transitaba por el mar Rojo, desviándolo hacia un puerto yemení, después de amenazar con atacar barcos israelíes en represalia por los bombardeos y el asedio contra la Franja de Gaza.
Israel, por su parte, afirma que "no es un barco israelí" ni llevaba israelíes a bordo , aunque acusa directamente a Irán de la incautación: "El secuestro de un buque de carga por parte de los hutíes cerca de Yemen, en el sur del mar Rojo, es un incidente muy grave de consecuencias globales", ha declarado el Ejército israelí.
La oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha condenado "enérgicamente" lo que considera como "un ataque iraní contra un buque internacional", en este caso llamado 'Galaxy Leader', que se dirigía desde India rumbo a Turquía.
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Según ha detallado, "el barco es propiedad de una empresa británica y es operado por una empresa japonesa" y, a bordo, "se encuentran 25 miembros de la tripulación de diferentes nacionalidades, incluyendo Ucrania, Bulgaria, Filipinas y México".
"Este es otro acto de terrorismo iraní y constituye un paso más en su agresión contra los ciudadanos del mundo libre, con efectos internacionales en cuanto a la seguridad de las rutas marítimas", ha aseverado la oficina del primer ministro.
Según medios árabes, el navío tiene bandera de las Bahamas, y confirman que está registrado a nombre de una compañía británica que lo tenía arrendado a una compañía japonesa. Sin emabargo, sostienen que el buque pertenece parcialmente al magnate israelí Rami Abraham Unger, involucrado en el negocio de la marina mercante.
Esto se produce después de que, el pasado 14 de noviembre, el líder de los insurgentes, Abdelmalik al Huti, advirtiese de que el movimiento chií estaba planeando "operaciones adicionales para golpear objetivos sionistas en Palestina o en otros lugares", afirmando que lo harían "en el Mar Rojo, particularmente en Bab al Mandab y sus aguas adyacentes a las territoriales yemeníes": "No dudaremos en atacarlos. Nuestros ojos están abiertos, en constante vigilancia y búsqueda de cualquier barco israelí", insistió.
Desde el inicio de la guerra en Gaza el pasado 7 de octubre, los hutíes advirtieron que no se quedarían "de brazos cruzados" y desde entonces han atacado terriotrio israelí a través del misiles y drones.