"Es hora de que Europa vuelva a pensar a lo grande y escribir su propio destino". En su cuarto y último discurso sobre el estado de la Unión de la legislatura, Ursula von der Leyen ha hecho balance de su gestión al frente del Ejecutivo comunitario (donde según sostiene ha cumplido el 90% de su programa) y ha trazado lo que a su juicio deben ser las prioridades de los próximos años. Eso sí, la alemana se hace de rogar y todavía no desvela si optará a repetir como presidenta de la Comisión un segundo mandato tras las elecciones europeas de junio de 2024, como esperan la mayoría de los observadores en Bruselas.
Para Von der Leyen, lo más importante ahora en plena guerra de agresión de Rusia contra Ucrania es "completar" la Unión Europea, con la entrada al club no sólo de ucranianos, moldavos o georgianos, sino también de los países de los Balcanes que llevan años en la sala de espera. Pasar de una Unión de 27 Estados miembros a otra muy diferente y más grande que tendrá más de 30.
"He empezado mi discurso hablando de que Europa debe responder al llamamiento de la historia. Y la historia nos llama ahora a trabajar para completar nuestra Unión. En un mundo en el que algunos están tratando de hacerse con países uno a uno, no podemos permitirnos el lujo de dejar atrás a nuestros conciudadanos europeos", ha dicho la presidenta de la Comisión.
[España y otros socios se inquietan por el impacto de la adhesión de Ucrania en los fondos europeos]
"En un mundo donde el tamaño y el peso importan, claramente redunda en el interés estratégico y de seguridad de Europa completar nuestra Unión. Pero más allá de la política y la geopolítica, necesitamos ser bien conscientes de lo que está en juego. Debemos definir una visión para que la ampliación tenga éxito. Una Unión completa, poblada por más de 500 millones de habitantes viviendo en una Unión libre, democrática y próspera", insiste Von der Leyen.
A diferencia del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, que ha hablado de 2030 como fecha en la que el club debe estar preparado para acoger a los nuevos miembros, la alemana no ha querido hablar de calendarios. "La adhesión es un proceso que se basa en los méritos, y la Comisión defenderá siempre este principio", ha insistido.
"Eso exige mucho trabajo y liderazgo. Pero ya se han realizado muchos progresos. Hemos visto los grandes avances realizados por Ucrania desde que le concedimos el estatus de país candidato. Y hemos visto la determinación de otros países candidatos para reformarse", sostiene la presidenta. Bruselas publicará su evaluación de todos los candidatos en octubre o noviembre y los líderes europeos deben decidir en diciembre si inician las negociaciones de adhesión con Kiev.
Al mismo tiempo, Von der Leyen ha enfatizado que la Unión debe reformarse internamente si quiere acoger a estos nuevos miembros, sin descartar siquiera una Convención Europea para iniciar el difícil proceso de reformar los Tratados, como pide la Eurocámara. "Pero no podemos -y no debemos- esperar a un cambio de Tratado para avanzar con la ampliación. Que la Unión esté preparada para la ampliación puede lograrse más rápidamente", ha dicho.
[El enfrentamiento entre Von der Leyen y Michel empaña el final de la legislatura europea]
A su juicio, la UE debe "dejar atrás los viejos debates binarios sobre la ampliación". "La cuestión no es o profundizar en la integración o ampliar la Unión. Podemos y debemos hacer ambas cosas para darnos mayor peso geopolítico y capacidad de actuar. Creo que la próxima ampliación también debe servir de catalizar pora avanzar", sostiene Von der Leyen.
En todo caso, la presidenta no ha dado muchos detalles sobre las reformas que necesita la Unión para acoger a Ucrania. Una cuestión que será objeto de debate en la cumbre de líderes europeos convocada el 6 de octubre en Granada. A su juicio, de lo que se trata es de "responder preguntas prácticas sobre cómo una Unión de más de 30 países funcionará en la práctica y en particular sobre nuestra capacidad de actuar".
Von der Leyen sostiene que la UE ya ha demostrado en los últimos años que es capaz de actuar rápido y estar a la altura de los desafíos, con iniciativas como los fondos Next Generation, la compra conjunta de vacunas, la aprobación de sanciones contra Rusia o la compra conjunta de gas.
Para prepararse para la ampliación, el Ejecutivo comunitario emprenderá ahora la revisión de todas las políticas con el fin de examinar cómo pueden adaptarse a una Unión más grande. "Debemos reflexionar sobre cómo funcionarán nuestras instituciones, sobre las nuevas configuraciones del Parlamento y de la Comisión. Debemos discutir el futuro de nuestro presupuesto: qué financia, cómo lo financia y cómo se financia. Y debemos determinar cómo garantizar compromisos creíbles en materia de seguridad en un mundo en el que la disuasión es más importante que nunca", ha dicho.
El Ejecutivo comunitario presentará sus primeras propuestas durante la presidencia belga de la UE, el primer semestre de 2024. "El futuro de nuestro continente depende de las decisiones que tomemos hoy. De los pasos que demos para completar nuestra Unión. Los ciudadanos de Europa quieren una Unión que les defienda en esta época de gran rivalidad entre potencias. Pero que también les proteja y esté cerca, como una socia y aliada en las batallas cotidianas", ha dicho.
En cuanto al final de la legislatura, Von der Leyen ha lanzado un llamamiento a la Eurocámara y a los Gobiernos para que aprueben las grandes normas pendientes, en particular la Ley de Inteligencia Artificial, el Pacto de Asilo y Migración y la reforma de las reglas de disciplina fiscal.
La presidenta asegura además que la UE no debe dar marcha atrás en el Pacto Verde Europeo. La mayoría de leyes para combatir el cambio climático ya se han aprobado y el reto ahora es aplicarlas en constante diálogo con la industria y los ciudadanos, ha defendido.