El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, se ha pronunciado sobre la voladura de la presa de Nova Kajovka, en la provincia meridional de Jersón. En un comunicado en Telegram, ha asegurado que la explosión fue un acto deliberado de Rusia y no afectará a los esfuerzos de Ucrania por recuperar su propio territorio.
"La principal conclusión es que la rotura fue deliberada, pero el enemigo actuó de forma caótica y permitiendo que sus propios equipos se inundaran", dijo en la aplicación tras una reunión del mando militar. "Al mismo tiempo, la rotura de la presa no tendrá ningún efecto sobre la capacidad de Ucrania para recuperar su propio territorio".
Más tarde, el mandatario ucraniano ha publicado un mensaje en Twitter en el que informaba de haber hablado por teléfono con el Director General del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el argentino Rafael Grossi. La llamada ha abordado "las consecuencias a gran escala del acto terrorista ruso en la presa de la central hidroeléctrica de Nova Kajovka. Discutimos formas de minimizar los riesgos para la seguridad de la central nuclear de Zaporiyia. Acordamos la visita del Sr. Grossi a Ucrania", ha tuiteado Zelenski.
Esta declaración contrasta con la tranquilidad que el jefe de Estado ucraniano había demostrado anteriormente. En un vídeo publicado simultáneamente al tuit en Telegram, Zelenski ha asegurado que "las autoridades de todos los niveles están haciendo todo lo posible para salvar a la gente y suministrar agua potable a quienes la han estado recibiendo del embalse de Nova Kajovka. Kryvyi Rih y toda la región de Dnipropetrovs'k, ciudades y pueblos de las regiones de Jersón, Mikolaiv y Zaporiyia: por difícil que sea, tenemos que ayudar a la gente".
Pese a haber afirmado que la rotura de los episodios de este martes por la mañana no afectará a la capacidad de Ucrania de recuperar su territorio, los mensajes del mandatario de esta tarde muestran preocupación por los daños causados por la voladura de la presa de Nova Kajovka.
El mandatario ha calificado el ataque de "crimen de ecocidio": "Esta destrucción deliberada de la presa y otras instalaciones de centrales hidroeléctricas por parte de los ocupantes rusos es una bomba medioambiental de destrucción masiva. Por nuestra propia seguridad, el mundo debe demostrar ahora que Rusia no se saldrá con la suya con semejante terror. El Fiscal General ya ha hecho un llamamiento a la Fiscalía de la Corte Penal Internacional para que involucre a la justicia internacional en la investigación de la explosión de la presa", ha concluido su publicación.
En su conversación, Grossi y Zelenski han convenido que el estanque de refrigeración de la central nuclear de Zaporiyia está lleno y tiene agua suficiente para varios meses. La cercanía de estas instalaciones a la presa de Nova Kajovka asustaban, ya que el estanque de Zaporiyia suele abastecerse con agua del embalse. Esa agua se utiliza para la refrigeración esencial de los reactores y el combustible gastado en la mayor central nuclear de Europa.
La falta de peligro en Zaporiyia ha sido un alivio para el presidente ucraniano, que ha declarado que el resto de consecuencias de la rotura de la presa de Nova Kajovka no afectarán a la capacidad de Ucrania de recuperar su territorio.
Un tuit publicado durante la participación de Zelenski en una cumbre de los Nueve de Bucarest muestra al mandatario con aún más argumentos para avanzar su contraofensiva: "[Rusia] es el terrorista más peligroso del mundo. Y por eso la derrota de Rusia —una derrota que aseguraremos de todos modos— será la contribución más significativa a la seguridad de nuestra región, de nuestra Europa y del mundo entero".
[La inteligencia de EEUU señala que "Rusia está detrás del ataque a la presa de Nova Kajovka"]
Estados Unidos no se pronuncia
Mientras tanto, Moscú ha atribuido a Kiev la autoría de los mismos hechos. Rusia ha vinculado la destrucción de la presa con la contraofensiva lanzada por las fuerzas ucranianas. Desde Washington, los observadores del Gobierno estadounidense no se han pronunciado al respecto: el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, ha asegurado en la sala de prensa de la Casa Blanca que "no puede decir de manera concluyente" que Rusia sea la responsable.
Al contrario de la diplomacia estadounidense, la inteligencia del país sospecha que "Rusia está detrás del ataque a la presa de Nova Kajovka" en Ucrania, según han señalado varios funcionarios norteamericanos y otro occidental. Ante lo que parece ser un ataque del Kremlin, Kirby ha asegurado: "Estamos trabajando lo mejor que podemos y planteamos evaluarlo como crimen de guerra".