La UE aprueba nuevas sanciones contra Minsk por su ataque migratorio en la frontera polaca

Los ministros de Exteriores de la Unión Europea han aprobado este lunes ampliar el marco de sanciones contra Bielorrusia para castigar también a los dirigentes, aerolíneas y agencias de viajes implicados en el ataque migratorio del régimen de Alexandr Lukashenko contra la frontera de Polonia y Lituania. La lista concreta de entidades y personas afectadas por estas medidas restrictivas se concluirá en los próximos días. 

"La decisión de hoy refleja la determinación de la UE de hacer frente a la instrumentalización de los migrantes con fines políticos. Rechazamos esta práctica inhumana e ilegal. Al mismo tiempo, continuamos denunciando la inaceptable represión en curso por parte del régimen contra su propia población, y responderemos en consecuencia", ha dicho el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell.

Se trata de la quinta ronda de sanciones contra Bielorrusia que aprueba la UE desde el fraude en las elecciones presidenciales de agosto de 2020. En la actualidad, un total de 166 dirigentes (entre ellas el propio Lukashenko y su hijo y Asesor de Seguridad Nacional, Viktor Lukashenko) y 15 entidades están sujetas a sanciones, que incluyen la congelación de cuentas y la prohibición de viajar a la UE. Además, la UE ha aprobado sanciones económicas selectivas que afectan al sector petrolífero, la lucrativa industria del potasio o el sistema financiero bielorruso.

Sin embargo, el conflicto ha vuelto a subir de temperatura con el ataque migratorio orquestado por Lukashenko contra la UE. Bruselas acusa al dictador de utilizar sus embajadas y otros canales oficiales en una treintena de países del mundo para "invitar" a sus ciudadanos a volar a Minsk -a cambio, eso sí, de "mucho dinero"- con la promesa de que se trata de una forma "fácil y segura" de entrar en la UE. Una vez allí, las fuerzas armadas bielorrusas los trasladan a la frontera con Polonia y ya no les dejan volver atrás.

"Las sanciones son siempre eficaces porque afectan a la gente, afectan a su riqueza y a su capacidad de movimiento", sostiene Borrell. El nuevo paquete se concentrará en "personas, aerolíneas, agencias de viaje y todo el mundo implicado en este lanzamiento ilegal de migrantes en nuestras fronteras", ha dicho el Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad Común. 

Por su parte, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, ha tachado de "inaceptable" utilizar a los migrantes "como instrumento político" y ha reclamado una "respuesta solidaria europea" frente a Bielorrusia que sea "firme y clara". 

Suspensión de vuelos

Durante el fin de semana, Borrell ha hablado con el ministro de Exteriores de Bielorrusia, Vladimir Makei, para trasladarse que la situación en la frontera es "totalmente inaceptable" y para solicitarle que facilite la llegada de ayudas humanitaria a los migrantes atrapados allí. El jefe de la diplomacia europea también ha conversado con sus homólogos de Polonia y Lituania.

El ministro de Exteriores lituano, Gabrielius Landsbergis, ha pedido a la UE que establezca una zona de "exclusión aérea" en el aeropuerto de Minsk. "Debemos garantizar que ningún avión que pueda traer gente con la intención de migrar, de cruzar la frontera de forma ilegal, pueda aterrizar en Minsk o en ningún otro aeropuerto bielorruso", sostiene Landsbergis. También ha reclamado establecer un "paso seguro" para que los migrantes que están en Bielorrusia puedan volver a su lugar de origen.

Precisamente este es uno de los objetivos de la gira que ha emprendido uno de los vicepresidentes de la Comisión, Margaritis Schinas, por los países de la región. Schinas se encuentra este lunes en Bagdad, donde las autoridades iraquíes le han garantizado que no habrá más vuelos a Minsk y han anunciado un vuelo de repatriación de nacionales para el próximo jueves.

Además, otras compañías aéreas han anunciado ya que suspenderán o restringirán los vuelos a la capital bielorrusa, entre ellas Turkish Airlines, o la compañía siria Cham Wings Airlines. Schinas ha obtenido también garantías similares de las autoridades de Emiratos Árabes y de Líbano.

"Desde el punto de vista de los flujos, las cosas empiezan a estar bajo control, pero tenemos que dar asistencia humantaria a esas personas y evitar cualquier tipo de ataque híbrido contra la frontera de la UE" ha dicho Borrell.