El presidente estadounidense, Joe Biden, tiene "toda la intención" de buscar la reelección en los comicios de 2024, en medio de las informaciones que han surgido sobre el debate interno entre los demócratas acerca de si debería ser el candidato idóneo de cara a las próximas presidenciales, informó este lunes la Casa Blanca.
Así lo indicó de manera tajante la portavoz presidencial, Jen Psaki, en su rueda de prensa diaria ante las preguntas acerca de dudas en el seno del partido del mandatario.
Biden prometió sanar a Estados Unidos (EEUU) nada más lograr la victoria en las elecciones de noviembre de 2020 frente al candidato republicano, Donald Trump, al que desalojó de la Casa Blanca.
Sin embargo, lejos de "sanar las heridas" del país, las diferencias no han hecho sino acrecentarse poco más de un año después de su llegada al cargo. Y el país, como el resto del mundo, se enfrenta a una inflación galopante que está suponiendo una escalada de precios en casi todos los productos.
A todo esto hay que sumar la crisis sanitaria de la pandemia de la Covid-19, que con la aparición de la variante ómicron aún está lejos de desaparecer, o al menos, de estar controlada. Y eso pese a la aparición de las vacunas, que aunque son efectivas y han rebajado notablemente la mortalidad, han demostrado que su eficacia es limitada.
"El presidente tiene toda la intención de presentarse a la reelección", remarcó la portavoz.
En las últimas semanas han crecido los rumores acerca de discusiones dentro del Partido Demócrata sobre la posibilidad de que Biden se presente en 2024 debido a la caída de su popularidad y sus 79 años, que le convierten en el mandatario de mayor edad en la historia de EEUU.
Psaki rechazó estas informaciones y aseguró que Biden y su equipo están centrados en trabajar "ahora mismo" para "lo que el pueblo estadounidense le eligió hace poco más de un año", particularmente poner la pandemia bajo control y mejorar la situación económica.
La opción lógica para suceder a Biden sería Kamala Harris, ya que muchos vicepresidentes han sido luego candidatos presidenciales en la historia de EEUU, pero la primera mujer en llegar a la vicepresidencia ha visto menguado su perfil público y sufre también una caída en picado de su popularidad.
Antes, sin embargo, se encuentra la próxima gran batalla electoral de EEUU, las legislativas de medio mandato del próximo año.
En las elecciones de 2024 el Partido Demócrata se enfrenta a la posibilidad de perder la estrecha mayoría que detentan ahora tanto en la Cámara baja (221 escaños frente a los 213 republicanos) y en el Senado, donde los dos partidos tienen 50 representantes, aunque la vicepresidenta Harris tiene el voto de calidad que le permite desempatar.
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