Las provincias argentinas emiten sus propias monedas frente al efecto 'motosierra' de Milei

Por entonces, el billete de provincias más conocido era el 'Patacón' de la provincia de Buenos Aires, que recreaba a una moneda de plata del mismo nombre de la Argentina rica del siglo XIX, equivalente a noventa y seis céntimos de peso fuerte. Pesaba una onza y estaba cortada con tijeras.

'Patacón' (ver imagen) resonaba a Patagonia, la interminable meseta austral y meca del turismo internacional. Todos los bonaerenses lo adoptaron y, entre otras curiosidades, una cadena global de hamburgueserías ideó el 'Patacombo', menú de hamburguesa especial, patatas fritas, y refresco, todo pagable en patacones.

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Además, la provincia de Chaco emitió en aquellos años el 'Quebracho'; Entre Ríos, 'Federal'; Mendoza, 'Petrom'; Misiones, 'Cemis'; Formosa, 'Bocanfor'; San Juan, 'Huarpes'; Catamarca, 'Bono ley'; Corrientes, 'Cecacor'; Tierra del Fuego, 'Letras'; Chubut y Río Negro, 'Petrobono'; Tucumán y La Rioja, 'Bocade'.

Con la progresiva normalización de la economía argentina a partir de 2005, el Gobierno nacional, por entonces a cargo del presidente peronista Néstor Kirchner (2003-2007), fue rescatando aquellas 13 monedas de provincias y estas consiguieron volver a la moneda única del Estado, el peso nacional.

Ejemplo de patacón.

Dos décadas después de aquel despiporre económico, Argentina vuelve a girar sobre sí misma, como el país ‘tiovivo’ que es, y se topa de nuevo con las monedas de provincias en un juego de déjà vu inacabable. En vez de la dolarización que había prometido Milei en la campaña, reaparecen las submonedas.

El gobernador de la provincia de La Rioja, el peronista Ricardo Quintela, anunció el miércoles que su gobierno emitirá 'Bocade'. “El gobierno nacional (de Milei) nos obliga a esto por la crueldad y el salvajismo del ajuste que precipitó en 20 días. La gente fue a cobrar el salario, pero ya no llega a fin de mes", afirmó el mandatario.

El ‘plan motosierra’ de ajuste y desguace del Estado social por parte del presidente, Javier Milei, provocó que La Rioja, según su gobernador, deje de percibir transferencias del Tesoro nacional 13.000 millones de pesos (14 millones de euros) y ello le impide honrar sus deudas y hasta pagar salarios a empleados públicos.

Para rellenar ese ‘rojo’ en las cuentas públicas, La Rioja emitirá el 'Bocade' (Bono de Cancelación de Deuda) por un total equivalente a 24 millones de euros y esa masa monetaria funcionará como reemplazo y/o complemento del peso, en principio, a la par nominal. Todavía no se decidió si ese bono será impreso en papel o digital.  

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La Rioja, ubicada 1.170 kilómetros al noroeste, sobre la cordillera de los Andes, es una de las provincias más atrasadas de Argentina con casi un 50% de pobres. Y ante la escasez de inversiones y empresas privadas, más del 80% de los trabajadores son empleados públicos, sean del Estado, la provincia o el municipio.

Lejos de contrariarse por la aparición de este nuevo síntoma de descomposición de la economía, Milei celebró la idea riojana: “¡Bienvenidas las monedas provinciales a la competencia!”, se alegró. La Rioja encabeza el pelotón, pero se da por descontado que más provincias, Buenos Aires y Formosa, entre otras, sigan el mismo camino de encender la máquina e imprimir “papeles de colores”, según el apodo que le han puesto muchos argentinos.

La noticia de la reaparición de las monedas de provincias se conoció a la misma hora en que Milei pronunciaba una verdadera ‘oda al anarcocapitalismo’ en el Foro Económico de Davos, Suiza. “Ustedes son benefactores y héroes”, lisonjeó a los principales empresarios del mundo. Y a la vez condenó duramente a cualquier Estado, al feminismo, la lucha ambiental y el aborto.

Luego de la conferencia, sin acordar reuniones con ninguno de los otros presidentes invitados a Davos, Milei dedicó la trasnoche a publicar los likes y views recibidos en su cuenta de X (antes Twitter) y compararlos con los que tenían las cuentas de Pedro Sánchez, Emmanuel Macron, Volodomir Zelensky y otros mandatarios de países de Europa.

Al anfitrión y presidente del Foro Económico de Davos, el alemán Klaus Schwab, el presidente argentino le dedicó dos reposteos singulares: "Javier Milei dejando Davos después de decirle a Klaus Schwab que se vaya a la mierda" y “Klaus Schwab está siendo atendido por un equipo médico, empezó a convulsionar y escupir espuma por la boca mientras escuchaba el discurso del presidente Milei".