Las autoridades mexicanas han confirmado este sábado que son ya 43 los fallecidos por el paso del huracán 'Otis' por el estado de Guerrero, 33 hombres y 10 mujeres.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha sido informado además de que hay otras diez personas desaparecidas, según la ministra de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, informa el diario mexicano El Universal.
"Lamentablemente la Fiscalía estatal da un total de víctimas al momento de 43 fallecidos, 33 de ellos varones y 10 mujeres. La probable causa es asfixia por sumersión, aunque continúan aún las investigaciones", ha explicado Icela.
El gobernador de Guerrero, Evelyn Salgado, ha informado de que se había restablecido la electricidad en el 58% de Acapulco y que funcionarios habían visitado a 10.000 familias en Acapulco y la cercana ciudad de Coyuca de Benítez para realizar un censo y evaluar los daños.
"Han sido días intensos de trabajo ininterrumpido", dijo Salgado, señalando que los funcionarios estaban trabajando para distribuir la ayuda.
López Obrador, por su parte, ha ordenado el envío de militares para evitar robos y saqueos. "A eso hay que darle bastante atención. Hay que poner retenes en las calles para evitar los robos", ha explicado.
Además, el dirigente ha destacado que hay presupuesto suficiente para responder al desastre y ha reiterado su intención de no acudir a la zona. "No estoy porque creo que ayudo más coordinando desde aquí todas las acciones, todo lo que se requiera, y si es necesario voy a ir, pero no quiero hacer de esto un espectáculo. No quiero hacer lo mismo que se hacía antes. Lo más importante son los hechos, no palabras", ha argumentado.
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"No van a quedarse desamparados. Vamos a apoyar a todos los que perdieron sus viviendas, sus enseres domésticos, sus aparatos electrodomésticos", ha resaltado. También ha mantenido reuniones con miembros de su gabinete económico y con banqueros para que se otorguen créditos baratos a los damnificados y con las aseguradoras para facilitar las indemnizaciones.
Los residentes de zonas aún inundadas han criticado la falta de ayuda del gobierno, y muchas personas todavía están buscando a sus familiares después de perder el contacto cuando llegó la tormenta el miércoles.
Con vientos de 266 km/h, el huracán Otis inundó la ciudad, destruyó casas, tiendas y hoteles, y cortó las comunicaciones.