El terrible terremoto de Marruecos devastó el suroeste de Marrakech el pasado viernes. Más de 48 horas después de que el impresionante seísmo hiciera temblar Marruecos, el número de muertos supera los 2.000, mientras otras miles de personas han resaltado heridas.
Un terremoto de magnitud 6.8 ha dejado al país desolado, provocando una de las peores tragedias que se conocen en el territorio. Marruecos sigue buscando desaparecidos entre los escombros, por lo que la cifra de víctimas puede ascender en las próximas horas. Sin duda, las zonas más afectadas se encuentran en las provincias de Al Haouz.
El seísmo más grave que ha asolado Marruecos en su historia ha dejado a miles de vecinos sin casas, en una situación de colapso en los hospitales y pueblos totalmente devastados, a pocos kilómetros del epicentro. Concretamente, se concentra en las montañas del Alto Atlas, a unos 71 kilómetros de Marrakech.
Por el momento, el Ministerio de Exteriores de España no tiene conocimiento de que haya víctimas españolas en la catástrofe. Asimismo, se están evaluando los daños y se ha abierto un teléfono de emergencia para los españoles que se encuentren en la zona afectada por el seísmo.
Con este suceso, hay que destacar la cercanía de África con Europa. Un hecho que se conoce como 'beso geológico' y que es el lugar con más peligro para subir un terremoto.
¿Dónde está el 'beso geológico'?
El 'beso geológico' se sitúa en el sur de la Península. En este sitio se concentran los movimientos telúricos que se sufrieron en Granada desde el 23 de enero y de los movimientos sísmicos que se concentran en la franja meridional. La peligrosidad de esta zona se debe a las numerosas fallas que se añaden a las características del suelo. Por este motivo, en este punto se suelen concentrar los temblores que dan lugar a un terremoto.
Sin embargo, esta zona geológica se tiene en cuenta en un nivel de poca intensidad. En este sentido, más de 14 millones de españoles viven en zonas de riesgo alto o muy alto por la posibilidad de que se produzca un terremoto. Además, el registro de los seísmos en el último milenio ha dejado un mapa de peligrosidad al borde de las placas continentales, la costa Este y los Pirineos.
El movimiento de las placas y la deformación de la litosfera crean un campo de esfuerzos tectónicos que impactan en las fallas. El 'beso geológico' centra a España en una "zona caliente" que hace confluencia con la Dorsal Media del Atlántico. Este 'beso geológico' tiene su origen en el estremecimiento de la Península y desde diciembre de 2020 hasta el 27 de enero, la Red Sísmica Nacional tuvo constancia de más de 430 terremotos en Atarfe, junto a Granada.
Estos tenían una magnitud entre 3 y 4,5, como apunta el informe de los investigadores Julián García-Mayordomo y Raúl Pérez López para el Instituto Geológico y Minero de España (IGME). En este sentido, la Península cuenta con estas fracturas de tierra que se ubican desde Lisboa hasta Ourense, por el Mediterráneo y en la frontera francesa. En España, el 'beso geográfico' se concentra desde Huelva hasta Alicante, los Pirineos y en parte de Galicia.