Encontrar vida bajo toneladas de hierro, cemento y hormigón tras un terremoto de magnitud 7,8 grados era, de por sí, sorprendente. Hacerlo cinco días después, agotados por el frío y la falta de medios es un auténtico milagro.
Los equipos de rescate españoles que trabajan sobre el terreno han vuelto a encontrar, una noche más, supervivientes bajo las ruinas de la ciudad de Iskenderun. En una operación que ha transcurrido durante la madrugada de este sábado, el cuerpo de Infantería de Marina, en colaboración con el personal de la FADA y los equipos de rescate Turcos, han salvado la vida de una persona que llevaba más de 120 horas esperando a ser rescatada.
"La situación era un poco caótica ya que era el sexto día tras el terremoto y las posibilidades de encontrar a alguien con vida disminuían drásticamente. Sin embargo, esto cambió cuando, tras uno de los singulares silencios que se hacían en búsqueda de algún indicio de vida, se escuchó un sonido respondiendo a la pregunta que hacían los equipos de rescate turcos", matiza un infante de marina en declaraciones a EL ESPAÑOL.
Una vez pudieron despejar los elementos más voluminosos, y tras una espera cercana a los 20 minutos en la que los vecinos de la zona se agolpaban alrededor de los equipos de rescate, pudieron dar con la personas que se encontraba atrapada. "Decidimos apartarnos y dar paso al equipo de rescate por respeto a los familiares. Un aplauso rompió el silencio reafirmando lo que creíamos, habíamos encontrado a un superviviente", remarcó.
Este rescate se suma al conseguido esta semana de dos niños y su madre tras cinco días bajo los escombros en Turquía. Los tres salieron ilesos después de casi una semana sepultados bajo los restos de su casa
21.000 muertos
El número de fallecidos, sólo en Turquía, por los devastadores terremotos del lunes asciende ya a 20.937, mientras que los heridos superan los 102.000, según el último recuento oficial. Pese a que los rescatistas siguen trabajando, en las últimas 24 horas sólo se han hallado con vida a 67 personas, según explicó el vicepresidente turco Fuat Oktay.
En algunas zonas los trabajos de salvamento ya se han suspendido y las excavadoras han comenzado a quitar los cascotes para buscar cadáveres. En la zona afectada en suelo turco vivían más de 13 millones de personas en 10 provincias y se teme que miles de víctimas se encuentren bajo los escombros.
Masallah Çiçek, una mujer de 55 años, fue rescatada con vida la madrugada del sábado de entre las ruinas de su apartamento en Diyarbakir, cuando se cumplían 122 horas del terremoto que sacudió el lunes diez provincias del sureste del país. Las televisiones turcas también retransmitieron en directo otro rescate a primera hora de la mañana, cuando una mujer de 70 años fue liberada con vida de entre los escombros de un edificio derrumbado en Kahramanmaras, 121 horas después del terremoto.