El presidente ruso, Vladimir Putin, está "desesperado" porque Rusia se está quedando "sin armamento, sin tropas y sin aliados". Éste es el análisis de la inteligencia británica, transmitido este martes por su responsable, Jeremy Fleming. El largo conflicto con Ucrania está desgastando la maquinaria militar rusa aunque sigue siendo "muy capaz".
Las declaraciones de Fleming surgen un día después de que Putin ordenara un ataque masivo sobre varias ciudades ucranianas, entre ellas la capital, Kiev, que no era testigo de tal violencia desde el pasado mes de junio.
La lluvia de misiles rusos -83 explosiones, según el ejército ucraniano- ha caído sobre Kiev, Zaporiyia, Leópolis, Dnipro, Jarkov y Kremenchuk, entre otras. El ataque aéreo, el más grande desde el inicio de la guerra, ha dejado al menos 19 muertos y cerca de 64 heridos. Los servicios de emergencia del país siguen trabajando en las zonas afectadas, por lo que aún se desconoce le alcance total de los daños.
Los ataques de este lunes, como respuesta de Putin a la voladura del puente de Crimea, demuestran que Rusia todavía era "muy capaz" de causar daños. "La maquinaria militar de Rusia puede lanzar armas, tiene grandes reservas y experiencia está muy extendida en Ucrania".
Sin embargo, pese a la extensión de los ataques, y a la demostración de fuerza, Fleming señala las debilidades a las que se enfrenta en ejército ruso. "Creo que Rusia se está quedando sin municiones, está claramente quedándose sin amigos y hemos visto, por la declaración de movilización, que se está quedando corta de tropas", aseguró.
En declaraciones a la emisora británica Radio 4, Fleming señaló, con convicción, que la situación rusa en la guerra de Ucrania está lejos de ser la que desearía Putin. "Sabemos, y los comandantes rusos sobre el terreno saben, que sus suministros y municiones se están agotando. La palabra que he usado es desesperada. Y podemos ver esa desesperación en muchos niveles dentro de la sociedad rusa y la maquinaria militar de Rusia”.
División entre los militares
Horas antes de las declaraciones del jefe de inteligencia, el Ministerio de Defensa de Reino Unido ha considerado que el nombramiento del general Sergei Surovikin como comandante general de su Grupo Conjunto de Fuerzas que lleva a cabo la 'operación militar especial' en Ucrania, ha provocado cierta división en las Fuerzas Armadas.
"El nombramiento de Surovikin probablemente refleja un esfuerzo de la comunidad de seguridad nacional rusa para mejorar la ejecución de la operación. Sin embargo, es probable que tenga que competir con un Ministerio de Defensa ruso cada vez más fraccionado que cuenta con pocos recursos para lograr los objetivos políticos que se ha fijado en Ucrania", se puede leer en el informe del ministerio.
Surovikin se dio a conocer gracias a su campaña de terror en Alepo, durante la guerra civil de Siria. Junto al cesado Alexander Dvornikov, fue uno de los máximos responsables de los bombardeos continuos a la segunda ciudad más poblada de Siria y donde se refugiaban la mayoría de los enemigos del régimen de Bashar Al-Asad. Dichos bombardeos causaron la muerte de cientos de civiles, incluidos niños, y fueron la guinda de una operación salvaje que duró dos años y que incluyó el uso continuo de armas químicas.
El miedo a que sus métodos se implementen en Ucrania y la amenaza creciente de uso de armas nucleares de Putin han hecho aumentar la tensión dentro y fuera del campo de batalla.
Fleming alertó de que "cualquier charla sobre armas nucleares es muy peligrosa y hay que tener mucho cuidado con cómo se habla de eso" y destacó que Reino Unido espera ver "señales" de que se prepara un ataque nuclear antes de que este ocurra. "Espero que veamos indicadores si se empieza a dibujar ese camino. Pero seamos muy claros al respecto, si lo están considerando, sería una catástrofe", zanjó.