Hace semanas que Odesa tenía como paisaje fijo en el horizonte los barcos de Rusia. Rodeados por las fuerzas invasoras en el Mar Negro, los habitantes de Odesa se han dedicado a construir trincheras y a acudir a bases improvisadas para recibir entrenamiento para defender sus ciudades de la invasión rusa. Este lunes, después de semanas de cerco, Rusia pasó de la amenaza a la acción y las autoridades de Odesa han denunciado el primer ataque a la ciudad.
Los ucranianos acusan a las fuerzas rusas de llevar a cabo un ataque contra edificios residenciales en las afueras de la ciudad. Las imágenes publicadas en las redes sociales muestran edificios reducidos a escombros y, por lo pronto, no hay registro de víctimas.
"El ayuntamiento de Odesa señala que no hubo víctimas aunque el bombardeo provocó un incendio. "Estos son edificios residenciales donde vive gente pacífica", dijo el alcalde Gennadiy Trukhanov.
Además, otro vídeo publicado en Twitter muestra los disparos de los barcos en el mar. Una vez más, tal y como siempre ha ocurrido cada vez que Rusia ataca a civiles, el Kremlin ha negado los hechos.
Odesa está en la lista de objetivos de Rusia desde el inicio de la invasión. Este lunes un ex alto mando militar británico del Comando de Fuerzas Conjuntas del Reino Unido aseguraba que la ciudad portuaria ucraniana sería el siguiente "objetivo lógico" de las tropas rusas, tras Mariúpol.
En declaraciones a la emisora BBC Radio 4, el excomandante Richard Barrons opinó que si el ejército de Rusia se hace con el control de Mariúpol, al sureste del país, y objetivo de fuertes bombardeos de Rusia desde hace semanas, esto se percibirá como "un gran éxito estratégico" para Rusia. "Cuando los rusos sientan que han concluido con éxito esa batalla, habrán completado el puente por tierra entre Rusia y Crimea y lo verán como un gran éxito estratégico", dijo.
Barrons señaló además que cree que las tropas rusas "irán ahora a por Odesa porque lógicamente es el próximo lugar al que dirigirse en el sur (de Ucrania) y parece que hay más barcos en el Mar Negro apuntando en esa dirección". Según el exmando militar británico si los rusos llegan a tomar Odesa "aislarían a la economía ucraniana" del Mar Negro.
Mariúpol y Kiev
En el resto del país, Mariúpol sigue siendo la ciudad más castigada, mientras las fuerzas rusas aumentan la intensidad de la ofensiva en Kiev. Un ataque a un centro comercial en la capital del país ha dejado al menos a ocho muertos y un escenario de destrucción.
Por otra parte, Mariúpol, la ciudad más devastada de todo el país, se resiste a ceder al ultimátum ruso. Este domingo, las tropas rusas han pedido la rendición de la ciudad, pero Ucrania se negó a ceder. La viceprimera ministra y jefa del Ministerio de Transportes y Comunicaciones de Ucrania, Iryna Vereshchuk, ya avanzó de madrugada al diario Ukrayinska Pravda que la petición de Moscú, que llegó en una carta de ocho páginas, era "un delirio".
"Enviaron la misma carta a la ONU, al Comité Internacional de la Cruz Roja y esperaban que las organizaciones internacionales reaccionaran y comenzaran a presionar a Ucrania. Esto no sucederá. (...) Es una manipulación de Rusia", afirma Vereshchuk al medio. "No podemos hablar sobre la entrega de armas -añade la viceministra-. Ya hemos informado a la parte rusa al respecto".
Ucrania se ha limitado a responder al enemigo que "abra el corredor humanitario" para que los civiles puedan abandonar Mariúpol. Unas 400.000 personas han estado atrapadas en Mariúpol durante más de dos semanas en medio de intensos bombardeos que han cortado los suministros fundamentales.
Según el ministro ucraniano de Defensa, Oleksii Reznikov, la resistencia de Mariúpol está "salvando" a otras ciudades del recrudecimiento de una ofensiva. "Los heroicos defensores de Mariupol han jugado un papel muy importante en la destrucción de los planes del enemigo y en la mejora de nuestra defensa", dijo el ministro, para quien, gracias al "coraje" de los habitantes de esa ciudad, "se han salvado decenas de miles de vidas en toda Ucrania".
"Hoy Mariúpol está salvando Kiev, Dnipro y Odesa. Todo el mundo debe entender esto", dijo el ministro en un parte de guerra publicado en las redes sociales.
Según el ministro, desde que comenzó la invasión las tropas ucranianas han derribado cien aviones y 120 helicópteros, además de haber destruido 500 tanques y 1.500 vehículos blindados. En su mensaje, el ministro dijo que los rusos "ya no sueñan con capturar Kiev" y que están recibiendo "dolorosos golpes" en Chernígov, Sumy y Járkov.
Ataques a civiles en Jersón
En Jersón, las fuerzas rusas han disparado contra la población civil que se manifestaba contra la ocupación. El Ejército ruso controla la casi totalidad de la región de Jersón, en cuya capital viven cerca de 280.000 personas y fue tomada el pasado 2 de marzo. Desde entonces ha mantenido su ofensiva para intentar controlar la total de la provincia.
Las protestas de los ciudadanos han sido una constante y este domingo se han enfrentado de nuevo a los ocupantes, desarmados, intentando evitar el paso de varios vehículos militares. Las protestas han seguido este lunes y, según imágenes desveladas en las redes sociales, las tropas rusas habrían disparado a la población.
Los vídeos publicados muestran a los civiles huyendo de un intenso tiroteo y varios heridos transportados por los ciudadanos.