La guardia costera griega recurre a métodos cada vez más brutales para devolver ilegalmente a los refugiados que tratan de entrar en Europa por mar, hasta el punto de arrojarlos directamente al agua, una práctica que ya ha costado la vida a dos personas, según revela una investigación de distintos medios europeos.
El ministro griego de Migración, Notis Mitarakis, negó estas informaciones, atribuyendo este jueves a la "propaganda turca" la aparición de noticias "falsas" en los medios internacionales sobre devoluciones ilegales de migrantes por parte de los guardacostas helenos, como la más reciente información de que incluso arrojan a refugiados al mar.
"La propaganda turca sobre la inmigración ilegal a menudo da como resultado noticias falsas en los medios. Grecia protege las fronteras exteriores de la Unión Europea, en pleno cumplimiento del derecho internacional y con pleno respeto de la Carta de los Derechos Fundamentales", afirmó Mitarakis en un comunicado.
La investigación la han llevado a cabo durante varios meses periodistas de The Guardian (Reino Unido), Lighthouse Reports (Países Bajos), Mediapart (Francia) y Spiegel (Alemania), y han destapado los métodos cada vez más brutales de la guardia costera a la hora de devolver a migrantes a Turquía.
Según los citados medios, dos refugiados, Sidy Keita, de 36 años y originario de Costa de Marfil, y Didier Martial Kouamou Nana, de 33 años y procedente de Camerún, murieron al ser arrojados en mitad del mar por la guardia costera griega el 16 de septiembre, tras haberles detenido en Samos.
El primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, ha negado numerosas veces que haya devoluciones en caliente de migrantes sin darles la opción a solicitar asilo, una práctica ilegal que consiste habitualmente en dejar a los refugiados en botes a la deriva a merced de ser rescatados por las autoridades turcas.
Sin embargo, los medios en cuestión han podido recoger testimonios de guardacostas que sostienen que, a veces, se les lanza directamente al mar con el fin de evitar utilizar las costosas balsas salvavidas, porque cualquier licitación de nuevos suministros de balsas, argumentan, podría exponer a la luz estas devoluciones en caliente.
Mitarakis aseguró este jueves que las autoridades nacionales independientes investigan todas las denuncias, pero que hasta ahora "cuando las autoridades solicitan más información y pruebas a los autores de dichos informes, estos se niegan a proporcionarlas".
La Comisión Europea se mostró hoy "preocupada" por estas nuevas informaciones -es la primera vez que se habla de muertos- y aseguró que si estas se confirman, sería "intolerable".
El ministro heleno recalcó en su comunicado que entre 2015 y 2021 la Guardia Costera griega rescató en el mar a más de 230.000 nacionales de terceros países.
"Grecia no está en contra de la inmigración legal. Estamos en contra de los traficantes y de todos aquellos que explotan el sufrimiento humano, ya sea con fines económicos o políticos", añadió.