Un sabroso probiótico natural que ha pasado a convertirse en uno de los alimentos de moda más saludables, que podrás incluir en tus desayunos, meriendas y cenas ligeras y que además está repleto de calcio, magnesio, proteínas y vitaminas del grupo B y K.

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Los probióticos son unos aliados excelentes para fortalecer el sistema inmune y mejorar la salud, además también se encuentran muy ligados a la pérdida de peso.

En concreto, este probiótico y superalimento cada vez más común en los hogares españoles y que además es especialmente beneficioso para la salud de la mujer. Te contamos de cuál se trata y cómo podrás incluirlo en tus comidas.

Un probiótico natural

El kéfir, también es conocido como yogur búlgaro, es un tipo de leche fermentada rica en bacterias y levaduras probióticas capaces de mejorar la flora intestinal, tu sistema inmunológico y el tránsito intestinal, favoreciendo la salud del organismo y siendo un gran apoyo en aquellas dietas destinadas a conseguir un peso corporal saludable.

Este alimento cuenta en su composición con más de 400 millones de microorganismos entre los que destacan los Lactobacillus. Una opción perfecta también para evitar el estreñimiento, combatir la inflamación intestinal y que además es baja en calorías.

De hecho, el kéfir aporta unas 37 calorías por cada 100 gramos, por lo que es una opción perfecta para sustituir otros productos lácteos como leche o yogures. Te contamos todo sobre sus beneficios para la salud y las mejores formas de incluirlo en tu dieta diaria. 

Qué es el kéfir y cuál es su origen

El kéfir es un curioso hongo que ha revolucionado la mayoría de dietas saludables y del que en los últimos años no deja de hablarse. Un alimento que se ha globalizado en el S.XXI, pero cuyo origen se asocia con una historia milenaria concretamente en el norte del Cáucaso, donde era consumido por los campesinos para armarse de energía y enfrentar las duras jornadas en las montañas escarpadas de la región.

Un hongo que hoy puede 'cultivarse' en casa o por el contrario, disponer de él a través de las versiones comerciales que hay disponibles en todos los supermercados.

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Un superalimento un elevado contenido en probióticos

El kéfir no es más que un suplemento probiótico que puede prepararse en casa y cuya producción y resultado es muy parecida a la del yogur natural. 

Un alimento que sobre todo si se hace en casa, cuenta con un alto valor nutricional y con un elevado contenido en probióticos. Además de los microorganismos que aporta, es rico en minerales, vitamina K, aminoácidos esenciales y proteínas de fácil digestión. Todo ello unido a que también es rico en vitaminas del grupo B (B12, B9, B5 y B1).

Gracias a su fermentación, se reducen los niveles de lactosa y aumenta la concentración de la enzima β-galactosidasa, lo cual hace que se eviten intolerancias a la lactosa.

Las dos preparaciones de kéfir más comunes

Aunque existen muchas variedades de kéfir, incluida la de leche de coco, de soja, de agua o de leche de vaca, estas son las dos preparaciones más comunes:

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Kéfir de leche

Este es uno de los tipos de kéfir más populares y para realizarlo suele emplearse leche de vaca, ya que para fermentarlo se necesita lactosa.

Ingredientes: 1 litro de leche y 100 gramos de kéfir. Preparación: Coloca en un recipiente la leche fresca y el kéfir. Deja reposar el contenido a temperatura ambiente durante 24 horas. Pasado este tiempo cuela la leche para recuperar los granos de kéfir.

Después vuelve a colar el contenido para obtener el kéfir líquido fermentado y colado. Ahora ya podrás consumirlo o mantenerlo guardado en la nevera para consumir más tarde.

Kéfir de agua

El kéfir de agua a diferencia del kéfir de leche, no necesita lactosa para fermentar. A la fermentación se le suele añadir azúcar. En cuanto a su sabor y aspecto, este recuerda al de la limonada gaseosa.

Ingredientes: 1 litro de agua, 60 gramos de azúcar moreno y 100 gramos de kéfir.

Preparación: Para elaborarlo tendrás que añadir el agua a un recipiente junto con el azúcar y el kéfir. Si quieres darle sabor, puedes exprimir medio limón en la mezcla. Tapa el contenido con un paño y una goma o cinta elástica y déjalo reposar a temperatura ambiente entre 2 y 3 días. Después podrás colarlo y beberlo o guardarlo en la nevera para consumir posteriormente.

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Por qué el kéfir es muy beneficioso para las mujeres

Son muchas las investigaciones que ponen el foco en este alimento como uno de los más recomendados para mujeres, sobre todo para las mujeres mayores de 40 años. ¿La razón? El kéfir está vinculado a una mayor absorción de calcio en las células óseas por lo que es un excelente aliado para prevenir la osteoporosis.

Esta es una enfermedad que favorece el debilitamiento e incluso la posible fractura de los huesos y a la que podrás hacer frente con este alimento en tu dieta. Una enfermedad especialmente frecuente en las mujeres y cuya posibilidad de padecerla aumenta concretamente durante la menopausia y entre los 40 y 50 años.

Cómo puede ayudarte el kéfir a perder peso

¿Sabías que entre las numerosas propiedades del kéfir destaca su ayuda para conseguir un vientre más plano? La razón de ello, es que este hongo favorece las digestiones, a la vez que fortalece nuestro sistema inmunológico al mantener más sana la flora intestinal y ayuda a prevenir la gastritis y la osteoporosis por su alto contenido en calcio.

También es un alimento excelente para perder peso, ya que evita el estreñimiento, combate la inflamación intestinal y es un alimento bajo en calorías. Todo ello, lo convierte en uno de los mejores alimentos para incluir en tu dieta de adelgazamiento.

Otros beneficios conocidos del kéfir

Además de todos estos beneficios que ya te hemos destacado del kéfir. Este superalimento también podrá ayudar a tu salud de otras muchas formas. Te destacamos otros de sus beneficios conocidos:

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  • Fuente de probióticos: El kéfir es una gran fuente de probióticos y estas bacterias son beneficiosas para el sistema digestivo, por lo que podrán ayudar a tu salud intestinal, ayudar a una digestión saludable y fortalecer el sistema inmunológico.
  • Mejora la salud digestiva: Los probióticos presentes en el kéfir pueden ayudar a equilibrar la flora intestinal, por lo que son beneficiosos para las personas con trastornos digestivos como el síndrome del intestino irritable, las enfermedad inflamatoria intestinal y las intolerancias a la lactosa.
  • Aporta nutrientes: El kéfir es una buena fuente de nutrientes importantes como proteínas de alta calidad, calcio, vitamina D vitamina K2 vitamina B12, magnesio y fósforo. Unos nutrientes esenciales para conseguir unos huesos fuertes, para fortalecer el sistema inmunológico y para mantener un funcionamiento saludable del cuerpo.
  • Mejora la salud inmunológica: Los probióticos presentes en el kéfir pueden fortalecer el sistema inmunológico al equilibrar las bacterias beneficiosas para el intestino. Un sistema inmunológico saludable puede ayudar a prevenir enfermedades y proteger el cuerpo de infecciones.