No hay descanso para la nuera favorita del rey Carlos III, que va de acto en acto triunfando con su trepidante agenda de otoño. Los Príncipes de Gales están en Escocia, realizando diversas visitas a las localidades de Burghead, Moray e Inverness, en Escocia. Siempre sonrientes y entregados a su labor institucional, Guillermo y su esposa han tenido una actitud cercana y natural que es uno de los secretos de que su popularidad en Inglaterra sea tan alta.
Decir que Kate Middleton ha acertado con su estilismo es decir una obviedad, pero así es. Rara vez falla. Los distintos actos en los que ha participado en su último viaje exigían ropa cómoda y casual, lejos del protocolo y los artificios. Así ha sido: la Princesa ha estrenado una llamativa chaqueta con la que ha causado furor (aunque hay que reconocer que no ha sido del gusto de todos).
Se trata de un diseño de Burberry, de cuadros, que pertenece a la temporada pasada, pero que hasta ahora no había decidido lucirla en ningún evento oficial. En distintos tonos de verde, acolchada, con cuello negro y ligeramente entallada, ha puesto el tono de color en un look bastante discreto.
También lucía unos pantalones negros ligeramente acampanados, jersey del mismo tono y unas botas marrones de la firma Reiss, el modelo Thea, que tienen un precio de 200 euros y que ya había lucido el día anterior en otra aparición pública.
Prendido en su aclamada chaqueta de Burberry, el broche Poppy Remembrance, con forma de amapola roja. Sirve de anticipo a una de las fechas más señaladas para la Familia Real Británica, el Día del Recuerdo que se celebra cada 11 de noviembre en los países de Commonwealth para recordar los sacrificios de los miembros de las fuerzas armadas y los civiles en tiempos de guerra, específicamente desde la Primera Guerra Mundial. La citada flor roja es su símbolo y los Windsor lo lucen en sus solapas en destacadas ocasiones.
Además del outift que, por cierto, iba a juego con el de su marido, que lucía una parka verde y el mismo broche, la Princesa llevaba el pelo suelto dándole protagonismo a su flequillo mariposa que ha estrenado esta temporada y que ha sido todo un acierto. Tampoco faltaba su anillo de compromiso, que nunca se quita. Es su fetiche, como para Letizia lo es el de Karen Hallam que le regalaron sus hijas.
Cuestiones estilísticas aparte, en lo que se refiere a la parte institucional, Kate y Guillermo se han reunido con organizaciones que apoyan a las comunidades rurales y que trabajan brindando apoyo de salud mental a los jóvenes a través del acceso al aire libre y el aprendizaje práctico. Por eso, no han dudado en participan en algunas de las actividades montando en bicicleta por el campo en la localidad de Burghead.