Salir a caminar es una de las actividades que mayores beneficios aporta a nuestra salud, con la gran ventaja de que se trata de un ejercicio físico que puede realizar prácticamente cualquier persona, sin importar su edad. Se trata de una alternativa ideal para todos aquellos a los que no les gusta el gimnasio, pero quieren practicar deporte.

Caminar ayuda a adelgazar y si se acompaña de una dieta equilibrada enfocada a la pérdida de peso, se pueden llegar a obtener muy buenos resultados. La clave radica en conocer cuántos pasos hay que dar para conseguir el objetivo.

En este sentido, un nutricionista ha desvelado los pasos que hay que dar a la semana para adelgazar 1 kilo al mes, que se sitúa en los 10.000 pasos diarios. De esta manera, con el simple hecho de alcanzar los mismos cada día, se podrá ir perdiendo peso de forma progresiva y conseguir bajar hasta un kilo al mes sin esfuerzo.

Con más de 10.000 pasos diarios se consiguen quemar más de 350 calorías adicionales, por lo que, sumando las de toda la semana, se podrán llegar a gastar unas 2.000 calorías, lo que supone superar las 9.000 calorías mensuales, que equivalen a un kilo.

Consejos para adelgazar más rápido al caminar

Caminar es, sin lugar a dudas, una de las opciones más asequibles de hacer ejercicio físico, ya que puede ser realizado por personas de prácticamente cualquier edad. Para quemar calorías caminando es necesario seguir unas pautas en particular, pero también tener presentes una serie de consejos que pueden ayudar a adelgazar con mayor rapidez, y entre ellos debemos destacar los siguientes:

  • Tiempo: la cantidad de tiempo para caminar es fundamental para poder perder peso. En este sentido, los expertos recomiendan que se camine durante al menos 30 minutos cada día, ya que es a partir de la media hora cuando el organismo comienza a quemar calorías.
  • Velocidad: si se quiere perder peso caminando, es importante ser consciente de que es importante variar tanto el ritmo como la intensidad. Es más, los expertos recomiendan caminar durante los primeros 10 minutos a una velocidad de entre los 4 y los 6 km/h, para caminar durante el resto del tiempo a un ritmo que alcance los 7 km/h.
  • Regularidad: una de las claves para adelgazar con mayor rapidez mientras se camina es salir a esta actividad al menos cinco días por semana, una regularidad y constancia que es fundamental para poder mejorar los resultados.
  • Superficie: por otro lado, también hay que destacar la influencia que tiene la superficie sobre la que se camina de cara a perder una mayor o menor cantidad de calorías. Por ejemplo, caminar en la playa, por las propias características de la arena, ayuda a quemar más grasa.
  • Inclinación: Si durante la caminata se suben escaleras o cuestas, se favorece la pérdida de calorías, además de contribuir a la propia tonificación del tren inferior del cuerpo.
  • Agregar un lastre: añadir un peso al caminar, como una mochila pesada o algún chaleco que tenga peso, contribuirá a quemar una mayor cantidad de calorías y más rápido, ya que el organismo necesita de un esfuerzo adicional para moverse.
  • Dieta: además de tener en cuenta las recomendaciones anteriores, es importante seguir una dieta equilibrada, hipocalórica y saludable, puesto que de nada servirá salir a caminar a diario si luego no se come sano.

¿Cuál es el mejor momento del día para caminar?

A la hora de salir a caminar, hay que tener presente que, en función del objetivo que se persiga, es mejor practicar esta actividad en un momento u otro del día.

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De esta forma, salir a caminar por las mañanas ayuda a despertar el cuerpo y la mente, mejorando la concentración, pero también favoreciendo la quema de grasa, siendo recomendable para perder peso, sobre todo si se sale a caminar con el estómago vacío. Esto se debe a que el perfil hormonal en las primeras horas de la mañana, predispone a las personas a un mejor metabolismo de las grasas. Asimismo, el ejercicio matutino contribuye a tener menos apetito durante el día.

Por su parte, caminar a la hora del almuerzo ayuda a despejar la mente y dar un impulso de energía, haciendo que se pueda hacer frente al bajón de después de comer sin que sea necesario recurrir a la cafeína. En ese momento, caminar mejora el flujo sanguíneo y mejora la concentración.

Si se opta por llevar a cabo esta actividad al final de la tarde, las investigaciones han determinado que es el mejor momento para obtener un mayor rendimiento y desarrollar músculo. Además, esta actividad aeróbica ayuda a mejorar la calidad del sueño.

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Por otro lado, caminar tras una comida, sobre todo después de la cena, supone una mejora de todo tipo de marcadores de enfermedad cardiometabólica, y es que está demostrado que, con solo andar dos minutos tras la comida, se disfruta de un impacto positivo en los niveles de azúcar. Salir a andar tras la cena ayuda a reducir los picos de glucosa, por lo que es aconsejable para todos aquellos que padecen de diabetes tipo 2.

En conclusión, para adelgazar el mejor momento del día para caminar es por la mañana, especialmente en el caso de que se realice en ayunas, mientras que hacerlo en otros momentos del día puede ser beneficioso para quienes persigan otros objetivos.