¿Cómo entrenar de forma correcta? Este planteamiento no tiene una única respuesta: depende de las necesidades de cada cuerpo y perfil. Algunas prácticas, como el cardio, son muy recurrentes por su aparente accesibilidad. Otros sufren más prejuicios.
Es el caso del entrenamiento de fuerza. Sin embargo, resulta que "es el tipo de entrenamiento más efectivo para estimular nuestros músculos, que son el motor de nuestro cuerpo, ya que genera fuerza, movimiento y gestiona nuestra energía. Para quemar calorías debemos acelerar el metabolismo y esto se puede conseguir tanto con cardio como con fuerza", nos recuerdan los expertos de RETO48.
Entre los mitos más recurrentes que lo rodean, se encuentra la ganancia de volumen exagerada. Sara Álvarez, cofundadora y creadora del método RETO48, lo recuerda: "el mito más extendido es que si levantas pesas tendrás un cuerpo voluminoso, y las mujeres tienden a evitar la sala de pesas porque creen que el cardio es la única forma de perder peso y tonificar. Sin embargo, esta idea es producto del desconocimiento de los beneficios del entrenamiento de fuerza, especialmente de su capacidad de construir un físico saludable y en forma".
Otro falso mito es que solo hay que hacer cardio para perder peso. "El músculo quema más calorías que cualquier otro tejido corporal, lo que significa que cuanto más músculo tengas, más rápido será tu metabolismo. Cuando levantas pesas, en realidad estás rasgando las fibras musculares, y el cuerpo usa energía para repararlos. El entrenamiento de fuerza te ayuda a perder peso y puede transformar la composición de tu cuerpo, lo que lleva a una apariencia más firme", explica la experta.
También es habitual escuchar que los pesos ligeros y la realización de muchas repeticiones son la única forma de quemar grasa. Falso. Como indica Álvarez, "el entrenamiento con pesos ligeros es excelente alternativa para desarrollar resistencia muscular, pero no es la única forma de quemar grasa. Para lograr desarrollo y definición muscular, el cuerpo tiene que activar las fibras musculares y para eso necesita un peso que suponga esfuerzo muscular".
En definitiva, "hacer entrenamiento de fuerza te garantiza el desarrollo de los músculos, bajar de peso y una mayor flexibilidad".
¿La clave? Combinar
Carlos Bustos, CEO de KMT Studio y entrenador personal con más de 12 años de experiencia, reitera la importancia del entrenamiento de fuerza: "El entrenamiento de fuerza con cargas es el que realmente va a tener impacto en tu composición corporal. Aumentar la masa muscular eleva el metabolismo basal porque el músculo es un tejido muy activo, cosa que no logra el ejercicio aeróbico. Ese músculo ‘vivo’ necesita mucha energía para mantener su tono, por lo que el ejercicio con cargas ayuda a perder grasa corporal y visceral.
Pero ojo, esto, por sí solo, no marca la diferencia. Lo que catapulta los resultados a otro nivel es "combinar adecuadamente las dos estrategias: cardio y pesas. No hay que ‘polarizar’, hay que sumar porque lo cierto es que existen sinergias entre los dos tipos de entrenamiento. Lo ideal sería realizar 3-4 sesiones de fuerza semanales y 1-2 de cardio a la semana. O bien incluir 15-20 minutos de cardio después del entrenamiento de fuerza, aunque es preferible hacerlo por separado"