El azafrán es una especia que se utiliza desde hace más de 3000 años. Muy popular en la cocina, pero también tiene beneficios para la salud, incluidos la regulación del estado de ánimo, el estrés o los trastornos del sueño. Pero ¿qué otros beneficios esconde el extracto de azafrán?
Isabel Viña Bas, con perfil @isabelvina en Instagram, donde cuenta con miles de seguidores, es médico residente de Endocrinología y Nutrición y aval científico de la firma IVB Wellness Lab, nos cuenta todo sobre este ingrediente tan desconocido, pero beneficioso, para la salud (y también para la piel).
¿Qué es el azafrán?
El azafrán es una especia de color rojo oscuro que se extrae de la planta Crocus sativus L. Una planta que no crece en estado salvaje, sino que se cultiva y se recolecta a mano.
Un dato: se necesitan 150.000 flores de azafrán para obtener sólo un kilo de azafrán seco. De ahí, que sea la especia más cara del mundo y se apode 'el oro rojo'.
La parte de la planta utilizada para el azafrán es el estigma seco de color rojo (interior de la flor), que tiene un olor aromático bastante fuerte y un sabor muy amargo.
Suplemento con propiedades
Ya sabemos que el azafrán es una especia que puede mejorar mucho nuestros platos, pero también es un suplemento con propiedades beneficiosas para nuestra salud.
Sus principios activos son los antocianósidos, unos pigmentos entre los que destacan la crocina y la picrocrocina. Sus propiedades afectan principalmente al sistema nervioso.
La experta Isabel Viña Bas asegura que, “en dosis como suplemento, que ya se pueden adquirir en el mercado, el azafrán está indicado, sobre todo, para controlar el apetito de manera natural y reducir el antojo de alimentos dulces. Además, para aliviar los síntomas de la peri/menopausia como sofocos, sudores nocturnos, irritabilidad nerviosismo, cambios de humor y sequedad en la piel y mucosas”, concluye.
Beneficios del extracto de azafrán
Son muchos los beneficios de esta aún desconocida especia, pero la experta destaca los siguientes:
Mejora de manera natural la producción de serotonina, neurotransmisor clave en el mantenimiento del adecuado estado de ánimo, relajación y bienestar
Alivia el dolor muscular.
Tiene una acción antidegenerativa y neuroprotectora, que protege especialmente el cerebro del envejecimiento.
También tiene propiedades afrodisíacas, es decir, mejora la líbido.
Puede reducir el apetito, especialmente útil en el control de los impulsos de comer alimentos dulces y altamente palatables.
Poder antioxidante, por tanto, mantiene a raya a los radicales libres para evitar la oxidación celular y, por tanto, un envejecimiento prematuro de la piel.
Promueve la mejora del sueño y del estrés.
Ayuda a drenar el hígado ya que provoca una secreción de bilis, favoreciendo una buena digestión, gracias a sus propiedades drenantes.