El tabú de la infertilidad: por qué las españolas no contarían en el trabajo que se realizan un tratamiento
Según la encuesta de la tecnológica Merck, siete de cada diez ven poco o nada probable compartir dicha información con su entorno laboral.
8 enero, 2023 02:35Ocho de cada diez españolas de entre 20 y 45 años considera que existen tabúes sobre la infertilidad, según los resultados de la 'Encuesta Merck: fertilidad en España. Deseos y realidad'.
El estudio fue promovido por la tecnológica Merck y realizado con el apoyo técnico de la consultora GAD3, en la que han participado 1.501 mujeres del mencionado rango de edad de toda España.
Si bien alrededor de 800.000 parejas en edad reproductiva (una de cada seis, según los datos de a Sociedad Española de Fertilidad, SEF) tienen problemas de fertilidad en España, la encuesta pone de manifiesto que se trata de un problema difícil de asumir y explicar por quienes lo sufren.
[Cómo y cuándo someterse a un tratamiento de fertilidad para quedarse embarazada]
De hecho, cuatro de cada diez cree que no se habla del asunto por vergüenza, el 26% por presión social y el 24% por el fracaso que supone a nivel personal.
"Aunque la infertilidad o esterilidad es una enfermedad como otra cualquiera, la estigmatización es un hecho. Muchas veces se confunde fertilidad con virilidad en el varón o las mujeres perciben la esterilidad como un fracaso personal y una pérdida de control. Todos estos sentimientos erróneos llevan a considerar la infertilidad un tema tabú que debe ocultarse y ese ocultamiento hace aún más dura la situación", explica la doctora Elisa Gil, ginecóloga y secretaria de la SEF.
Un tabú en el trabajo
El 47% de las encuestadas asegura no hablar en el trabajo sobre sus expectativas de maternidad, problemas de fertilidad o la posibilidad de recurrir a tratamientos de reproducción asistida.
Este silencio se incrementa entre las féminas que superan los cuarenta años (51%) o las que no tienen hijos (52%).
La encuesta Meck revela, además, que en caso de tener problemas de fertilidad o estar sometiéndose a un tratamiento, el 91% de las españolas lo hablaría con sus familias, el 81% también con sus amigos, pero no con su entorno laboral.
De hecho, alrededor del 70% de las españolas entre 20 y 45 años ven poco o nada probable comentarlo en su ámbito de trabajo. Y ello a pesar de que 8 de cada 10 en edad fértil sin hijos, pero con intención de tenerlos, tiene claro que se plantearía recurrir a un tratamiento de fertilidad si no pudiera concebir.
'En busca de la fertilidad'.
Como ya contamos en magasIN, Carmen Jonnes ha publicado el libro En busca de la fertilidad (2021) en el que comparte estrategia para vivir la búsqueda del embarazo con calma y felicidad.
Información. La autora de En busca de la fertilidad afirma que acudir informada a la consulta médica "empodera" y te permite "participar más a la hora de elegir tratamiento e incluso dar tú alternativas".
Fuera la culpa. Durante el proceso pueden surgir muchos sentimientos negativos hacia los demás pero, sobre todo, hacia una misma. Sin embargo, Jonnes insiste en que "no es obsesión, es ilusión".
El acompañamiento. La autora anima a las mujeres a hablar del tema abiertamente y no guardarse sus sentimientos.
La pareja. En el proceso de la concepción hay dos partes implicadas y la frustración por no lograr el embarazo puede desgastar a la pareja. Por esa razón, Jonnes recomienda tener una comunicación plena.
Los hábitos. Unos hábitos pueden marcar la diferencia en la fertilidad. Y, si bien no es la solución definitiva, puede servir de mucha ayuda.
Para y reflexiona. Por último, Jonnes recuerda a todas las mujeres que esto es una carrera de fondo y llega un punto en el que tardar unos meses más o menos no va a suponer una diferencia significativa. Por eso a veces lo mejor es parar para tomar impulso.
Por qué no lo contarían
De acuerdo con la explicación de Raquel Urteaga, responsable de la Unidad de Psicología de la Cínica Tambre, a Merck el principal motivo por el que las mujeres no compartirían que se realizan el tratamiento de reproducción asistida son las posibles consecuencias.
"Durante el proceso es necesario acudir a revisiones ginecológicas y hay que estar faltando al trabajo, pidiendo permisos… La mujer teme que, si se sabe, tal vez le pueda acarrear problemas laborales".
La doctora también menciona la importancia de empatizar con quienes necesiten recurrir a este proceso: "Lo primero que hay que hacer es escucharla. Cada persona es un mundo. El mejor consejo es escucha activa, un abrazo, un aquí estoy para cuando me necesites. Necesitan empatía y apoyo. Un proceso de reproducción asistida es una montaña rusa emocional, por lo que lo más beneficioso es el apoyo incondicional".
La edad como principal problema
Según la doctora Gil Arribas, la edad, con diferencia, es la principal limitación para la fertilidad en el mundo occidental en general y en España en particular.
"La edad materna es la causa fundamental de infertilidad, muy lejos de otros factores. Es imprescindible que seamos capaces de transmitir lo importante de promover una maternidad y paternidad temprana y responsable. La salud materna y fetal depende en muchas ocasiones de la edad de la madre", comenta.
Y continúa: "Los tratamientos consiguen embarazos en mujeres muy añosas, pero la salud obstétrica siempre hay que tenerla en cuenta. En cualquier caso, el reloj biológico, por diferentes causas, muchas veces suena tarde. Cuando suena, todo ha de ser muy ágil. Si una mujer va a retrasar su causa para ello debemos animarla a valorar seriamente para la preservación de su fertilidad".
En magasIN, ya explicamos con la doctora Juana Crespo que la edad es la principal limitación, seguida de la endometriosis. El tercer problema más habitual entre las pacientes de la doctora Crespo es lo que ella llama "el factor masculino", que es más fácil de solucionar. "Es básicamente el semen que en casa no llega y tenemos que hacerle llegar".
Otros factores que afectan, de acuerdo con la doctora Crespo, son: el tabaco, la obesidad, la polución y el estrés.
Quita el mute a la infertilidad
Merck, con el fin de romper tabúes, ha lanzado una campaña en redes sociales donde se comparten historias reales.
Esta consta de varios vídeos donde se representa una videollamada donde no se oye nada y en la que se invita a "quitar el mute" para escuchar el testimonio.
Bajo el hashtag #Quitaelmutealainfertilidad se anima a la sociedad a escuchar a quienes quieren compartir su historia y empatizar con ellas para reducir la carga emocional.