Ha sido un día emocionante, pero también difícil para la Princesa de Gales, con todos los ojos puestos en su reaparición. Deslumbrante y más sonriente a medida que iba avanzando la jornada, Kate Middleton ha superado el 'Trooping the Colour' con sobresaliente.
Pese a estar convaleciente y aún en tratamiento de quimioterapia debido al cáncer que padece, ha cumplido con toda la hoja de ruta prevista regalándonos momentos emotivos. La intensa lluvia que caía sobre Londres ha deslucido un poco el desfile y la salida al balcón de la Familia Real británica, pero no la ilusión de las personas que presenciaban el acto, felices de verla después de casi seis meses de ausencia pública.
Pese a que la esposa del príncipe Guillermo se mostraba muy seria en su salida hacia Buckingham en el coche oficial acompada de su su marido y sus hijos, la sonrisa ha ido iluminando su rostro en su trayecto hacia Buckingham en el carruaje, tranquilizando a todo el mundo. Elegantemente vestida con un diseño en blanco y negro de Jenny Packham, tacones de Jimmy Choo y tocado de Philip Treacy, Kate ha estado muy pendiente de su hija Charlotte dedicándole gestos de cariño antes de salir al balcón, tocándole amorosamente el pelo mientras posaba a las puertas de palacio.
No hay que olvidar que la Princesa de Gales no está totalmente recuperada, por lo que este intenso día resultaba agotador para ella. Por eso, no es de extrañar que una vez dentro de Buckigham, haya tenido que sentarse en una silla para descansar un poco. A su lado, Sophie de Edimburgo, cuidando de que estuviera bien y cómoda. Ha pedido que cerraran la ventana mientras se recuperaba, quizá para ocultarse de miradas indiscretas, y se ha encargado ella misma de cerrarla del todo. Había estado cerca de 40 minutos de pie y necesitaba un poco de relax antes de salir con el resto de la Familia Real a saludar tras el desfile.
A las dos en punto hora española al fin se producía el momento más esperado: Kate apareciendo junto a los Windsor entre aplausos y vítores. Era la gran protagonista del 'Trooping the Colour 2024' y eso se ha notado. La Princesa se ha mostrado especialmente cómplice con su suegro, Carlos III, charlando sin parar mientras tenía lugar el desfile aéreo. Menos comunicativa ha estado con Guillermo, aunque sí con George, Louis y Charlotte. En varios momentos se la ha visto reírse con ellos.
Tras cerca de ocho minutos en el balcón de Buckingham, Middleton ha saludado y ha vuelto al interior de palacio, dando así por terminada una reaparición menos emotiva de lo se esperanba. Ha llamado la atención la actitud excesivamente protocolaria del heredero al trono y los pocos gestos de cariño entre ambos.