La aparición 'secreta' de Meghan Markle en Los Ángeles: una fecha clave y un look de Oscar de la Renta

La vida de los duques de Sussex en Estados Unidos, alejados desde hace cuatro años de los deberes reales, se traduce en familia y contadas exposiciones públicas. De cuando en cuando, la pareja, junta o por separado, sorprende asistiendo a algún acto casi siempre relacionado con causas sociales y que no suele ser comunicado previamente. La discreción impera.

Sin embargo, ahora salen a la luz unas imágenes de Meghan Markle visitando un hospital de Los Ángeles que fueron tomadas el pasado 21 de marzo, un día antes del comunicado de Kate Middleton anunciando que padecía cáncer. Ha sido el propio centro médico quien las ha publicado en sus redes sociales casi dos semanas después.

En ellas puede verse a la esposa del príncipe Harry, ajena completamente a lo que sucedería en tan solo unas horas; un hecho que causaría consternación en Inglaterra y que tuvo su reacción por parte de los Sussex. El matrimonio emitió este comunicado de apoyo a la Princesa de Gales: "Deseamos salud y curación para Kate y su familia y esperamos que puedan hacerlo en privado y en paz".

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Meghan Markle, muy volcada en actos de este tipo, visitaba a los pequeños ingresados en el Hospital Infantil de Los Ángeles en el marco de la campaña Make March Matter, dedicada a la recaudación de fondos. Su tarea fue ejercer de cuenta cuentos para ellos, algo que hizo con dulzura y cercanía.

Provista de la correspondiente mascarilla, eligió algunas de sus historias favoritas y las leyó con énfasis. Los responsables del centro médico han explicado: "Los niños se reían y cantaban mientras ella leía los libros favoritos de los pacientes, como Rosie la remachadora, Pete el gato y Vi un gato. Con la alfabetización, el desarrollo y la diversión en mente, Meghan también ayudó a los niños con actividades vinculadas a cada libro que les permitieron explorar los números, los colores, la resolución de problemas, etc".

Meghan eligió un look de grandes marcas, pero bucólico y dulce para la ocasión. Rescató de su armario un vestido estampado de tipo camisero de Oscar de la Renta, cuyo precio ronda los 3.500 euros, y lo combinó con unas bailarinas de pulsera de Aquazzura, de 700 euros, también repetidas. Una vez más, los accesorios subieron la suma total del estilismo, pues llevaba su habitual reloj de oro de Cartier y un brazalete de diamantes de Ariel Gordon Maffei, que supera los 5.000 euros.