El pasado 29 de agosto, la infanta dejaba su vida palaciega en Zarzuela para poner rumbo a un castillo de cuento, muy parecido a la escuela de magia de Harry Potter. Allí ha comenzado una etapa apasionante, con más independencia y libertad, lejos de España y de la atención mediática que siempre despierta por ser miembro de la Familia Real. La estancia de Sofía de Borbón Ortiz en el UWC Atlantic College está absolutamente blindada por Felipe VI y Letizia, pero lo que pasa dentro de los muros del St Donat's Castle no es un secreto.
A pesar de que no hay ni una sola imagen de la hija menor de los Reyes en Gales, salvo las oficiales que se distribuyeron a su llegada, conocemos con detalle la vida intensa que lleva en el internado y que es radicalmente opuesta a la que llevaba en Madrid. No sólo por su rutina de estudios, también por el sinfín de actividades de las que ahora puede disfrutar, por su residencia, sus horarios e incluso el menú que ahora degusta.
En Magas analizamos cómo es el día a día de Sofía desde dentro. Lo primero que es radicalmente distinto a sus estancias familiares en el Pabellón del Rey es su habitación, que comparte con otras estudiantes en una de las casas que ocupa. Hace unos meses, algunas de las estancias de los diferentes edificios donde se alojan los alumnos fueron reformadas íntegramente para actualizarlas y hacerlas mñas sostenibles, revisando principalmente el aislamiento.
Su casa, al detalle
Los cuartos están separados por sexos, tienen capacidad para cuatro personas y disponen de camas sencillas con cajoneras debajo, una mesilla, un armario pequeño y varias estanterías para colocar los enseres personales y de estudio. Parece obvio que la Infanta no ha podido llevarse mucha ropa, porque no hay espacio para guardarla. Los habitantes se encargan de la limpieza y el orden.
Las duchas son compartidas, pero sí disponen de un retrete dentro. Además, cuentan con amplias salas de estar y de estudio (además de la biblioteca) y una cocina con todo lo necesario por si desean prepararse su propia comida. La convivencia y la interculturalidad son claves en el ideario del centro.
Fiestas, huerto y talleres
Las clases comienzan a las ocho de la mañana y terminan sobre la una de la tarde. Después han de cumplir con dos horas de servicio comunitario, dos horas de actividad física (allí puede practicar el fútbol, su deporte favorito) y dos horas más de actividad creativa cada semana, lo que hace que el ritmo en el UWV Atlantic College sea casi frenético. ¡Siempre hay un evento al que asistir!
Destacar que en el centro hay un gran huerto y tanto Sofía como sus compañeros son los encargados de hacer la recolección de las verduras y frutas que se cultivan y que luego se venden en el pueblo. Esto es algo que entusiasma a Letizia que también ha creado un huerto ecológico en los terrenos de Zarzuela. Los habitantes más especiales de este espacio en el campus galés son dos burros llamados Ava y Hugo. A esta actividad hay que unirle los cursos de primeros auxilios y un sinfín de talleres creativos para los alumnos. Uno de los últimos ha sido para diseñar sombreros dirigido por Sue Crowle, sombrerera teatral profesional durante más de 37 años que ha fabricado piezas para televisión, cine, ballet y ópera.
También hay una fiesta temática cada viernes de 19 a 22 horas en uno de los locales donde se pone música y los estudiantes pueden bailar y charlar en un ambiente distendido. Conferencias, encuentros gastronómicos y culturales, salidas a la naturaleza... ¡No hay tiempo de aburrirse! Una de las citas que más éxito tienen son las celebraciones de fiestas señaladas de los distintos país, como el Diwali de India que tuvo lugar el 12 de noviembre.
El menú del UWC Atlantic College
La alimentación es uno de los temas que más le preocupan a la Reina. De hecho, cambió el menú del colegio Santa María de los Rosales de Madrid al que asistían sus hijas para hacerlo mñas saludable eliminando los fritos y procesados. Su influencia no llega a Gales, donde la infanta Sofía puede degustar distintos platos en las propuestas diarias del comedor, que son comunicados por email a los alumnos cada día y los platos británicos tienen mucha presencia. Ensaladas de vegetales o quinoa, carne, pescado, guisos, pizzas, hamburguesas y platos internacionales como sushi, ramen o burritos mexicanos. No falta la fruta y la verdura fresca y también los domingos se sirve un brunch. Todo se sirve en un bufé colocado en el gran comedor, donde hay mucha variedad.
La comida está disponible entre las 12:00 y las 13:45 h, y la cena entre las 17:30 y hasta las 19:00. Los alumnos tienen la posibilidad de comer en el comedor o al aire libre en el campus siempre que el tiempo lo permita.