El Espacio de recursos para mujeres, innovación y economía feminista de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) fue bautizado con el nombre de La CIBA debido a la fábrica que anteriormente ocupaban sus instalaciones. Sin embargo, ahora es mucho más que una productora de medicamentos: es un espacio de libertad feminista que se ha coronado como el mejor de Europa. Pero, ¿a qué se debe tanto mérito?
La CIBA, que fue creado en 2020, es un espacio pionero orientado a fomentar la igualdad de las mujeres desde una perspectiva integral. Por ello, compromete a todos los agentes de la sociedad en prácticamente todos los ámbitos de actuación: la transversalidad de sus servicios es su gran cualidad.
En las instalaciones de la CIBA se pueden encontrar talleres dedicados al empleo y la formación de las mujeres, zonas residenciales para acoger a víctimas de violencia de género, información, recursos y protocolos para evitar y prevenir las agresiones sexuales, espacios de coworking para fomentar el emprendimiento, servicios de guardería para facilitar la conciliación… No cabe duda: por algo es el número uno.
La CIBA, única en Europa
"Es un proyecto pionero, ni siquiera en países como Suecia tienen algo así", comenta Núria Parlon, alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet. Y recalca: "Es verdad que hay iniciativas que abordan la violencia contra las mujeres de forma parecida, que tiene servicios específicos guiados a muchos ámbitos de la igualdad… Pero un centro que integre todos los aspectos necesarios para garantizar la plena igualdad es único en España".
La CIBA nació en el año 2020, gracias a una inversión de 2,6 millones de euros de fondos europeos que ayudaron a restaurar la antigua fábrica de tejidos. Alrededor de 6.000 metros cuadrados se habilitaron desde una lógica integral para albergar todo tipo de servicios. Es un poli equipamiento funcional con diferentes espacios y líneas estratégicas basadas en la innovación.
Entre estos 6.000 metros cuadrados, la CIBA posee zonas dedicadas al trabajo y el encuentro empresarial de mujeres, apoyo para las familias, atención a la violencia machista, creación cultural y artística femenina, programación estable, espacios para la formación, de ocio, zonas residenciales… Todo ello permite la transversalidad de todos los agentes en aras del progreso hacia la igualdad.
"Su objetivo es que pueda ser replicado en otros lugares de España como una política útil para remover los obstáculos que dificultan que las mujeres puedan vivir en plena igualdad", explica Núria Parlon. A continuación, la alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet detalla todos y cada uno de los espacios y servicios de la CIBA que hacen que este lugar sea una referencia internacional.
"¡Mujer, emprende!"
Para lograr la autonomía económica, ocupabilidad y el emprendimiento de las mujeres, trabajar en la búsqueda de empleo y de desarrollo profesional es fundamental. Por ello, la CIBA centra gran parte de sus esfuerzos en este ámbito. Esto se logra gracias al 'Campus CIBA', un espacio de coworking "para que las mujeres empresarias se reúnan y apuesten por proyectos comunes".
Como explica la alcaldesa de Santa Coloma: "Nos movemos en la línea de dar apoyo a proyectos de creación de empresas promovidos por mujeres. En la mayoría de los casos, observábamos que no se llevaban a cabo por el miedo a emprender, la preocupación de qué hacer con los hijos, las responsabilidades familiares…".
Por ello, la CIBA posee un espacio de trabajo y asesoramiento al emprendimiento, y una zona de guardería e infancia para favorecer la conciliación de la vida familiar y que esta no sea un obstáculo para llevar a cabo los proyectos empresariales de las mujeres.
"También estamos trabajando en un programa de innovación y digitalización. Ya se ha graduado la cuarta promoción de mujeres que están formándose en programación digital. Es un curso complejo, pero que permite crear empleo femenino en un sector en el que es necesario por una doble vertiente: para que las mujeres consigan empleo y para que sea un sector en el que las mujeres no queden al margen", explica Núria Parlon.
Ocio y aprendizaje, de la mano
El espacio de la CIBA también ofrece actividades con una programación estable orientada a los diferentes colectivos de la ciudad que tienen interés en las cuestiones de igualdad. Entre ellos, están los institutos y las escuelas, incluso visitas de otros municipios. Además, la CIBA recibe gran cantidad de público familiar, que se muestra muy receptivo a actividades que tienen lugar el fin de semana.
"El espacio está abierto a la ciudad y nos interesa que la ciudadanía pueda hacer uso del mismo, que tanto hombres como mujeres puedan aprovechar sus instalaciones y las actividades que aquí se están promoviendo", comenta la alcaldesa.
Además, la CIBA ofrece tres líneas de talleres formativos. El primero de ellos se centra en la producción textil y confección con maquinaria industrial, y tiene una dimensión lúdica y formativa. El segundo, vinculado a la alimentación y la cocina. Y, el tercero de ellos, relacionado con el sector audiovisual, pues la CIBA también dispone de plató para desarrollar en él formaciones y actividades culturales.
Además, todos los cursos se acreditan de forma profesional. Según Nuria Parlon: "Hacemos acreditaciones de competencias como la de manipulación de alimentos o cursos específicos para trabajar en despiece y carnicería. Algunas empresas requieren estos perfiles profesionales y a veces, lamentablemente, no existe la formación adecuada".
A una contra la violencia
La atención a las cuestiones de violencia machista es una de las grandes prioridades de la CIBA. Por ello, se trabaja con un protocolo específico que facilita la toda atención necesaria a las víctimas, superando la visión de asistencia obligatoria: el modelo de la CIBA se basa en el buen trato a las mujeres.
"Ofrecemos un servicio de carácter intergeneracional, atendiendo a las cuestiones de jóvenes, adolescentes y mujeres adultas, así como a sus hijos e hijas. Además, ponemos mucho el foco en la violencia encubierta", explica la alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet.
Como novedad, la CIBA también ofrece acompañamiento en el eje policial y judicial para que, cuando las mujeres necesiten interponer una denuncia, la policía y sus servicios especializados estén en el espacio de la CIBA. Esto facilita la integración de todos los servicios en una situación de violencia "para que las mujeres no tengan que ir cada día a una oficina, teniendo en cuenta su situación de vulnerabilidad".
En este sentido, esta iniciativa cuenta con una línea de trabajo para abordar las violencias sexuales, el acceso a la pornografía y el impacto que tiene en las generaciones más jóvenes. Por último, y como afirma Núria Parlon: "también hay un programa dedicado a mujeres que están en la prostitución y quieren dejarla, creando itinerarios para que encuentren un trabajo digno".
Con todo, para todos
Por si todo lo anterior no fuera suficiente, la CIBA dispone de un espacio de documentación para promover la memoria histórica de las mujeres. "Hacemos estudios basados en las cuestiones que nos afectan como mujeres y disponemos de un fondo específico que puede ayudarnos a que los estudiantes aborden estas cuestiones desde la perspectiva de la igualdad".
Núria Parlon también destaca la zona residencial que posee el centro. Este espacio está dedicado a las mujeres que, por motivos de violencia mayoritariamente, han tenido que salir de su entorno familiar o domicilio. "Nos permite acoger de manera inmediata a aquellas mujeres que no tienen dónde ir porque los servicios de emergencia de la Generalitat no pueden ofrecerles una respuesta".
Sin embargo, la CIBA no es solo para mujeres, sino para toda la sociedad. Por ello, cuenta con un grupo de padres que trata temas como la conciliación o el cuidado de los hijos para "olvidar el estereotipo del hombre que trabaja y no ayuda en casa". Por último, también se trabaja con jóvenes y adolescentes la cuestión de la masculinidad: "Abordar sentimientos e identidades masculinas es algo muy innovador, pero está funcionando muy bien", aclara la alcaldesa.
Todo esto no sería posible sin el nutrido grupo de usuarios del que dispone la CIBA: "Hay un público muy transversal. A nivel intergeneracional siempre nos llama la atención y nos emociona porque hay mujeres de todas las edades: desde las más jóvenes que vienen a hacer actividades con sus centros de referencia, hasta las ancianas que quieren aprender sobre igualdad", explica Núria Parlon.