Por primera vez en la historia la Federación Española de Municipios y Provincias está en manos de tres mujeres: una presidenta y dos vicepresidentas.
Fue el pasado mes de septiembre cuando la alcaldesa de Jerez de la Frontera, María José García-Pelayo fue elegida presidenta de la FEMP, en el pleno celebrado en al Palacio Municipal de Congresos de Madrid.
En el mismo acto, Inés Rey García, alcaldesa de A Coruña pasó a ser vicepresidenta primera, y Gema Igual Ortiz, alcaldesa de Santander, vicepresidenta segunda.
Desde Magas hablamos con ellas sobre lo que supone el cargo y acerca de los retos a los que se enfrenta la Administración local.
"La FEMP surgió en 1981 como un movimiento de defensa de los gobiernos locales, de los ayuntamientos y las diputaciones, en un momento en el que prevalecía la construcción de un Estado autonómico, que parecía no tener en cuenta que los gobiernos locales eran reconocidos constitucionalmente como uno de los pilares de la arquitectura territorial española y que, además, eran depositarios de competencias y responsabilidades por su cercanía a los ciudadanos", asegura María José García Pelayo, presidenta de FEMP.
Y añade: "A lo largo de los años la FEMP se ha convertido en el referente, ha ganado capacidades y protagonismo, ha crecido como organización, representa al municipalismo español y es actor de consulta obligada por otras administraciones. Esto la convierte en adalid de los gobiernos locales y le otorga reconocimiento nacional e internacional. Es además, el organismo defensor de los ciudadanos y ciudadanas".
Para Inés Rey, vicepresidenta primera: "La forma de entender la política local ha cambiado y también la forma en la que la ciudadanía percibe a sus alcaldes y alcaldesas. Hoy tenemos una España diferente, de progreso, con grandes avances, y en parte se debe a la transformación impulsada desde las ciudades y municipios en los que la Federación ha tenido un papel cada vez más protagonista. El municipalismo es una de las mayores expresiones de la democracia, también la más próxima, y en ese sentido, creo que el mayor cambio de la Federación ha sido conseguir que los ayuntamientos se hayan sentido líderes de esa transformación".
En este sentido, Gema Igual, vicepresidenta segunda asegura que "nuestro país y nuestros municipios han cambiado por completo, y se enfrentan a retos que nada tienen que ver con los de 1981. Pero a pesar del tiempo, estoy convencida de que los alcaldes y responsables políticos de los municipios y provincias españoles sienten que la FEMP continúa fiel a sus principios, reivindicando lo que es justo para los entes locales desde una labor coordinadora y transmisora de información que se ha demostrado realmente necesaria y útil".
Y añade: "No puedo más que sentirme orgullosa de pertenecer a la Asociación y garantizar mi disposición para seguir reclamando los recursos que permitan a los pueblos y ciudades de España atender las necesidades de sus vecinos, con plena autonomía y capacidad".
Liderazgo femenino
Es la primera vez que tres mujeres se ponen al frente de la FEMP, pero están de acuerdo en buscar la normalización para que esto deje de ser una excepción. "Para mí es un gran honor representar a quienes, como yo, tienen la tarea de trabajar por sus vecinos y vecinas y no creo sentirme más honrada, más comprometida ni más depositaria de responsabilidades que cualquiera de mis predecesores varones por el hecho de ser mujer", opina la presidenta.
"Antes de este mandato y a lo largo de estos más de cuarenta años de vida, por la Federación han pasado 10 presidentes y una presidenta, Rita Barberá, alcaldesa de Valencia, que encabezó la Federación durante dos mandatos consecutivos. Sí es cierto que éste es el primer mandato de la FEMP en el que la presidencia y las vicepresidencias están ocupadas por mujeres y hacerlo visible es importante para la normalización de este tipo de situaciones para que la presencia femenina en altas responsabilidades deje de ser un acontecimiento, que ya estamos casi cerrando el primer cuarto del S XXI…", añade María José.
"Las tres estamos aquí porque las tres somos alcaldesas, y porque en el mapa municipal español, el número de alcaldesas crece y, en consecuencia, también lo hace la presencia de las mujeres en la Federación, tanto en sus órganos de gobierno como en las Comisiones de Trabajo y Redes. En este caso, además de la buena relación personal que me une con las alcaldesas de A Coruña y Santander, dos personas excepcionales con las que tengo la gran fortuna de trabajar, insisto en que deberíamos avanzar hacia la normalización. Representar a la ciudadanía de un municipio o a los municipios de un país no es una capacidad inherente a ningún género", concluye.
Inés Rey apostilla que este es uno de los cambios más visibles en los últimos tiempos. "Hoy tenemos una sociedad más igualitaria y aunque todavía somos menos alcaldesas que alcaldes, nuestra presencia debe tener su reflejo al frente de las instituciones. Como primera alcaldesa de la democracia en A Coruña me he referido en muchas ocasiones a la importancia de poder contar con mujeres referentes. Por justicia histórica hacia las que nos precedieron, pero también para que las que vengan no tengan ninguna duda de que este sitio también nos pertenece. Con gran orgullo, ahora también formo parte de la primera dirección de la FEMP liderada por tres mujeres como vicepresidenta primera. Y gracias a ello, también tengo la oportunidad de compartir retos con mis compañeras para que tanto la Federación como las alcaldías, sean cada vez más paritarias".
Gema Igual destaca que este momento "supone un nuevo orgullo como defensora convencida del municipalismo y para mi ciudad, Santander, que ya había ejercido la presidencia con Íñigo de la Serna entre los años 2012 y 2015. Lo he asumido junto a mis compañeras como un gran reto, desde la responsabilidad que supone ayudar a los más de ocho mil ayuntamientos, diputaciones, consejos y cabildos insulares".
"Coincido con magníficas mujeres que vienen demostrando su capacidad de trabajo y liderazgo en las ciudades donde gobiernan, como es el caso de María José García-Pelayo (Jerez), de María José Catalá (Valencia) o de Natalia Chueca (Zaragoza), a quienes me une la creencia firme en la unidad, el esfuerzo, la transparencia y la ilusión que nos lleve a ser capaces de articular medidas que mejoren la situación de nuestros pueblos y ciudades. Tenemos trabajo y lo haremos juntas, en equipo, para tender la mano a todos los grupos y a todas las instituciones”.
Retos a los que se enfrentan
Les preguntamos a las responsables de FEMP por los retos a los que se enfrenta la institución en este mandato. "Resumidos en dos palabras: competencias y financiación. A esos dos términos genéricos que, con diversos matices, han venido señalando los objetivos del trabajo de la Federación desde siempre, hemos sumado otro: el reconocimiento de los Gobiernos Locales como Administración del Estado, en el mismo plano que Comunidades Autónomas y Administración Central, donde nos sitúa desde 1978 el texto constitucional. Nuestra capacidad está más que demostrada, la gestión local durante la pandemia dejó pocas dudas sobre nuestra madurez y no es justo que se nos trate como si fuésemos ‘los pequeños de la casa’", asegura María José García Pelayo.
Y añade: “En este mandato, además, y de manera más específica, hemos apostado por reforzar el carácter social de la FEMP, ampliando el número de Comisiones de Trabajo e incluyendo entre sus cometidos el trabajo en materias como la lucha contra la violencia de género, la soledad no deseada, los derechos de los mayores o la atención a la dependencia. Son retos que afrontan los alcaldes y alcaldesas, en especial los de los municipios más pequeños. Colaborar desde aquí forma parte de nuestro compromiso".
El ciudadano llama
"Los ayuntamientos somos la primera puerta a la que llama un ciudadano cuando lo necesita, lo que hace que, a veces por ayudar, demos solución a un problema que no nos compete. Como ya se sabe, la costumbre hace ley, por lo que acabamos asumiendo competencias impropias o no definidas con la carga administrativa que eso supone. Pero también económica. El ejemplo más claro fue la pandemia, momento en el que a pesar de estar supeditados a otras administraciones con mayores recursos y capacidad acabamos gestionando una crisis con fondos propios. Es el caso más llamativo, pero los que somos alcaldes o alcaldesas sabemos que vamos a milagro por semana. No multiplicamos panes y peces, pero con los recursos que disponemos, hacemos verdaderos milagros", asegura Inés Rey.
Gema Igual comparte que "vivimos momentos convulsos, los valores y la base de nuestra democracia están en peligro; la igualdad de todos los españoles que consagra nuestra Constitución está en juego. Y en este escenario, la FEMP tiene que jugar un papel clave. Tenemos por delante una legislatura difícil porque el municipalismo debe dar la batalla para liderar la resistencia y la recuperación".
"Reforzar el papel de los ayuntamientos a nivel económico, de autonomía de gestión y para abordar el futuro de nuestro país desde el ámbito local es imprescindible ante la falta de apoyo de un Gobierno central que anda ocupado en asuntos que no hacen bien a nadie".
La desidia política juvenil
Una pieza clave y que preocupa a las instituciones es la desidia de las generaciones más jóvenes en torno a la política. Como claves para atraerlos a la administración local proponen: "Ser ejemplo de responsabilidad y de trabajo bien hecho. En medio de tanto ruido, cuando la clase política es percibida por los ciudadanos como un 'problema', es el momento de restablecer la sensatez, mostrar que el trabajo de los responsables políticos tiene como objetivo el bien público y el beneficio colectivo; que la gestión exige responsabilidad y que cualquiera que se encuentre al frente de un Gobierno ha de estar comprometido con quienes, con su voto, le han puesto allí".
"La visibilidad de ese compromiso es mucho mayor en la política local y, por eso, si se trata de animar a los más jóvenes a comprometerse con su pueblo, con su ciudad o con su barrio es necesario que nosotros les hagamos entender que la recompensa a su esfuerzo es la satisfacción de haber servido a la ciudadanía. Hay pocas sensaciones mejores que esa", responde la presidenta de FEMP.
"Creo que los jóvenes necesitan ejemplos que se fundamenten en valores positivos y es una lástima el nivel de polarización que vivimos actualmente a nivel político. El respeto, el esfuerzo, el trabajo, la empatía, son claves en política local, como lo son en la vida. De ahí tienen que partir las futuras vocaciones políticas a nivel local y a todos los niveles", asegura Gema Igual.
Y añade: "Por otro lado, creo que es primordial facilitar su participación en la vida de sus pueblos y ciudades desde edades tempranas para que tomen conciencia de la importancia de involucrarse en la mejora de sus comunidades. Porque todos podemos hacer algo para que nuestros vecinos se sientan mejor, todos podemos aportar nuestro granito de arena para que nuestra ciudad o nuestro barrio avance y sea cada vez un lugar más acogedor y amable".
"En Santander son muchos los programas y actividades que desarrollamos con los más pequeños o con los jóvenes y es tremendamente enriquecedor comprobar la cantidad de ideas que tienen. Me gustaría destacar aquí el Pleno de Niños y Niñas de Santander, un órgano de participación que nació en 2011 para visibilizar las demandas de los niños y adolescentes de la ciudad y que hemos renovado el pasado otoño con motivo del inicio de la legislatura", concluye.
Inés Rey señala: "Ofrecerles soluciones a sus problemas y alternativas para su desarrollo personal. Es cierto que la política nacional, más que la autonómica, tiene una gran visibilidad. Pedro Sánchez anuncia la gratuidad del pase interrail para los 18 años o un aumento en las becas universitarias y es viral en X o TikTok en cuestión de segundos. Pero no lo es sólo porque sea el presidente del Gobierno, sino porque era una demanda colectiva que muchos jóvenes estaban esperando. En A Coruña, por ejemplo, este mandato centramos nuestra acción en materia juvenil en vivienda, salud mental y formación, especialmente en idiomas. Tres asuntos fundamentales".
Les preguntamos a las tres cómo gestionan los responsables locales la cercanía y la proximidad con los vecinos.
"Calle y más calle, salir, estar con los vecinos y las vecinas y escucharlos, pensar cómo actuar para resolver su problema y para hacer su vida mejor. Sea en una ciudad grande o en un municipio medio -en los pequeños los alcaldes y alcaldesas son un vecino más- es importante estar en la calle, hablar con la gente. Puede parecer simple pero, con frecuencia, cuestiones que alteran gravemente el bienestar de una o varias personas tienen soluciones sencillas, que no exigen grandes desembolsos y que se pueden llevar a cabo sin dificultad. A veces, basta con saber que algo está ocurriendo para analizarlo y resolverlo", asegura la presidenta de FEMP.
Y añade: "Los Gobiernos Locales debemos escuchar, desde la calle o desde los canales de participación que nos traen las nuevas tecnologías, y hay que estar dispuestos a abrir canales nuevos, recoger quejas, demandas, conocer el pulso del municipio en el que estamos. Debemos estar abiertos a la participación de los vecinos en las decisiones que más les afectan. Con todas las opciones que nos ofrecen los buzones ciudadanos, físicos o telemáticos, o las mismas Redes sociales, no hay excusa para no conocer la realidad de los territorios", dice la presidenta.
"En mi caso, Santander es un municipio de tamaño medio, pero no por ello debemos descuidar la cercanía con los vecinos. Justo lo contrario. Nos debemos a los vecinos y tenemos la responsabilidad de gobernar para ellos, para todos. Escucharlos, recibirlos, tener las puertas de nuestros despachos abiertas, acompañarlos, es fundamental para garantizar una labor de gobierno que se amolde a lo que verdaderamente necesitan. La participación ciudadana es primordial y en Santander mantenemos un contacto estrecho con las asociaciones vecinales, con las organizaciones sociales, económicas, culturales, deportivas... Nos debemos a nuestros vecinos y únicamente contando con ellos avanzaremos hacia la ciudad que espera la mayoría", enfatiza Gema Igual.
"Los principales problemas son siempre comunes. Farolas, bancos y papeleras se piden en todos los ayuntamientos y el asfaltado o rebacheo de una calle, también. A ello se suma la gestión de los servicios sociales para familias sin recursos, personas en riesgo de exclusión… y también la planificación urbanística y la movilidad. Seguramente ese sea el punto más diferencial en cuanto al tamaño de población, porque no es igual planificar la movilidad diaria y el desarrollo urbanístico de una ciudad con más de 250.000 habitantes que con menos de 50.000. Se necesitan más recursos y una mayor implicación de otras administraciones. Sin embargo, creo que todos los municipios compartimos como reto avanzar hacia la sostenibilidad y la calidad de vida y en ese sentido los fondos Next Generation han sido un gran impulso", añade Inés.
Petición al Gobierno central
¿Qué le piden los Ayuntamientos españoles a las demás Administraciones (Autonómica, General del Estado y Europea) hoy?
La presidenta de FEMP les pide "reconocimiento de nuestra condición como Administración Pública y capacidad para actuar en nuestros territorios. Ambas cuestiones exigen que los Gobiernos Locales, Autonómicos, Nacional y Europeo se sienten en la misma mesa, se escuchen y tengan en cuenta que cada decisión o cada política que se adopte y que deba ser aplicada en el espacio del municipio, tiene que contar con la participación de la Administración que va a aplicarla, implementarla o hacerla comprensible a la ciudadanía: la Administración Local".
Por su parte, Gema Igual dice que "nunca dudo en reivindicar lo que considero que es de justicia para los santanderinos y lo seguiré haciendo mientras siga al frente de la alcaldía. Ahora en Cantabria tenemos una relación cordial y productiva con el Gobierno de Cantabria, presidido por María José Sáenz de Buruaga, pero han sido muchos años en los que no han atendido ni una sola de las demandas que les trasladaba. Ya en la primera reunión que mantuve con ella, al inicio de la legislatura, sentí que se nos escuchaba. Y en los presupuestos de 2024 hemos visto que las palabras se han convertido en realidad con apoyo presupuestario, institucional también, para muchos proyectos de ciudad".
"No puedo decir lo mismo del Gobierno central, que tiene abandonados a los santanderinos y ha olvidado hacerse cargo de los espacios, instalaciones, edificios e infraestructuras que son de su competencia. Respecto a Europa, espero que continúe articulando fondos de ayuda a los municipios como los que estamos gestionando en nuestra ciudad, cerca de 30 millones de euros que nos están sirviendo para impulsar importantes proyectos en el ámbito de la movilidad sostenible, el comercio y turismo, el empleo, la innovación, el medioambiente o los servicios sociales", afirma Gema Igual.
"Un papel más relevante en la toma de decisiones. Al final los alcaldes y alcaldesas somos los que gestionamos los municipios día a día. Sabemos lo que necesitan y lo que es mejor para nuestros vecinos y vecinas, porque además de ser regidores y regidoras, somos parte de ella como ciudadanos que hacemos vida en nuestras ciudades y compartimos necesidades. Está bien tener grandes ideas globales, pero hay que aplicarlas en el terreno. Y los ayuntamientos tenemos un máster en ello. Además, creo que las grandes transformaciones han empezado siempre por una iniciativa municipal que se va replicando. Los ayuntamientos somos grandes exportadores de ideas, convirtiéndonos en modelos de referencia", concluye Inés.