María es un icono. Es la mujer cuya imagen simboliza el emprendimiento en España. La senior, quien abrazó este concepto antes de los 80, cuando las mujeres tenían que pedir permiso al marido para trabajar, cuando no podían abrir una cuenta corriente, cuando ni se les ofrecía heredar la empresa familiar y se apostaba antes por los yernísimos que por ellas.
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Tiene 68 años y de ellos presume en nuestra charla porque sabe que esa es su gran credencial, su bagaje en la vida profesional y personal, que en su caso siempre fueron de la mano. Estudió Geografía e Historia y de esa curiosidad nació su primer emprendimiento, allá por el año 80.
España bullía en una transición política de libertades, pero en las empresas los cambios estaban por llegar; aún no se hablaba de liderazgos humanistas, flexibilidad, adaptación, sostenibilidad y políticas ESG, todo lo que hoy cualquier empresa decente tiene por propósitos. Ella supo de todo ello antes, porque María es, en sí misma, innovación. Hace diez años fundó South Summit, la gran cita del emprendimiento en España con proyección y reconocimiento internacional.
Encontrarse con María no es sencillo porque tiene una agenda endiablada. Pero cuando fijamos momento, todo encaja, ¡y como no, con la ilusión que llega! La fuerza que tiene, la ilusión que transmite y la sonrisa que todo lo hace fácil. Así es como llegamos a La Nave, el grandioso espacio donde se hace el South Summit y donde hasta veinte mil personas se pueden llegar a cruzar por sus pasillos en los días en que se celebra.
Cualquiera que quiera contactos y ser alguien en ese mundo sabe que tiene que darse cita en este formidable ecosistema. “Me encanta ver La Nave a rebosar de 'startaperos' que no pierden un segundo en hacer negocio y generar buen rollo” – me confiesa María.
De cada South Summit, María hace un mapeo para generar nuevas y mejores oportunidades; lo preocupante es el dato que arroja sobre el emprendimiento femenino, en torno al 20%, año arriba, año abajo. Esta es otra de las vocaciones de María, la de animar a las chicas a creer en ellas mismas. Me encanta oírla porque yo pienso en las #ChicasImparables que hacemos en 50&50 GL con CEOE e IE. “Las niñas deben saber las oportunidades que tienen – me dice-, por eso debemos generar mensajes positivos a niñas y mujeres, la sociedad las necesita y las quiere”. ¡Qué gran charla!