Melania apuesta por la sencillez en la jornada de investidura de Donald Trump: las claves de su look

Este lunes 20 de enero tuvo lugar la toma de posesión de Donald Trump como presidente de Estados Unidos. El ex magnate, quien ya estuvo en el cargo de 2017 a 2021, regresó formalmente a la Casa Blanca junto a su esposa, Melania Trump. 

La jornada de investidura incluyó varios actos, entre ellos, un servicio religioso celebrado en la iglesia episcopal de St. John. La expectación sobre la aparición de la pareja era total y no defraudó. Ambos apostaron por la sencillez y la sofisticación, con looks en tono azul marino, un color que plasma compromiso, elegancia y seriedad.

Melania, concretamente, destacó con un conjunto hecho a medida: un abrigo largo, de corte ceñido y doble botonadura, una blusa de crepé de seda color marfil y una falda tubo, firmados por Adam Lippes. Completó el conjunto con un sombrero con ribete, de Eric Javits. 

Melania Trump, a su llegada a la capilla St. John's antes de la toma de posesión. Getty Images

"El atuendo de la señora Trump fue creado por algunos de los mejores artesanos de Estados Unidos, y me enorgullece mostrar ese trabajo al mundo. Doy las gracias a la señora Trump por su confianza y colaboración", declaró el diseñador, según recoge la plataforma WWD.

No es la primera vez que el modisto estadounidense viste a una primera dama: es el autor del estilismo de Jill Biden, esposa de Joe Biden, para su audiencia privada con el Papa Francisco en Roma, en 2021.

Esta elección rompió con las últimas apuestas de Melania Trump, cuyo estilo se encuentra en manos del estilista Hervé Pierre. En efecto, la primera dama suele elegir modelos de casas europeas, como Dior, Dolce & Gabbana y Saint Laurent.

Por ello, Melania Trump reafirmó su compromiso con diseñadores estadounidenses, sobre todo emergentes, como otras primeras damas lo hicieron anteriormente. Cabe recordar, por ejemplo, que Michelle Obama eligió vestidos de Isabel Toledo y Jason Wu para la investidura de su esposo, Barack Obama, en 2009.

Melania Trump, en la primera investidura de Donald Trump. EFE

Este look hizo eco al elegido por la primera dama en 2017, para la primera investidura de su esposo. Entonces, en su estreno en la Casa Blanca, emuló a Jackie Kennedy con un impecable traje con falda azul celeste, firmado por Ralph Lauren, que completó con guantes blancos largos y salones a juego.

Jill Biden y Melania Trump, durante el acto de investidura. Gtres

En su jornada de despedida, Jill Biden optó, por su parte, por un total look morado, firmado por el ya mencionado Ralph Lauren. Una elección cromática que podría remitir a un deseo de neutralidad, al fusionar el azul demócrata y el rojo republicano. Reflejaría el deseo de unidad en el país, más allá de la división política. Un adiós poderoso que marca el inicio de una nueva etapa política (y estilística).

El look de gala

Tras la toma de posesión, la pareja protagonizó el tradicional primer baile presidencial, al ritmo de Battle Hymn of the Republic, una canción patriótica de Julia Ward Howe de 1861. Para la ocasión, mientras Donald Trump apostó por el clásico esmoquin, Melania se decantó por un vestido bicolor, blanco y negro, firmado por Hervé Pierre.

Donald y Melania Trump, durante su primer baile. Gtres

Se trata de un modelo arquitectónico, de escote off-shoulder y corte recto, con un detalle de bandas a contraste y una apertura discreta. Un diseño más atrevido que el elegido para la propia investidura, que la primera dama completó con un accesorio llamativo: un choker negro.

El diseñador es uno de los fetiches de Melania. De hecho, firmó el vestido que ya lució en la primera investidura de Trump, en 2017. Ante esta nueva colaboración, el modisto expresó su agradecimiento a través de Instagram. Publicó un post con un boceto del diseño y un mensaje inequívoco: "Fue un gran honor crear el vestido para la Primera Dama Melania Trump esta noche. No puedo agradecerle lo suficiente… fue un proyecto maravilloso, una gran colaboración… ¡Como siempre!".

Estas elecciones confirman que Melania Trump vuelve a estar bajo el foco del mundo de la moda.