La jornada del sábado 28 de septiembre en la capital francesa tuvo como protagonistas tres grandes casas de moda con espíritu y ADN propio. Uno de los desfiles más esperados era el de Vivienne Westwood que ha redefinido su rebeldía con toques de sensualidad y colores pastel. Andreas Kronthaler, al frente de la firma tras la muerte de su creadora e icono del punk, ha utilizado el lema "Recalibrarse" para su nueva propuesta.
"La moda es belleza y alegría; nos conecta entre nosotros, lo cual es importante para el mundo en el que vivimos. Las cosas tenían que ser aireadas, ligeras y menos coloridas. Sólo un destello de rojo y rosa. Sin estampados, tejidos muy finos, ropa preciosa, a veces lavada y gastada", ha dicho. Y, en efecto, así ha sido. Sudaderas en tonos empolvados, vestidos de gasa con ese patrón sexy y cañero que siempre ha estado presente en la firma y, por supuesto, toques de tartán aunque en colores más suaves.
Otro de los puntos fuertes del desfile de Westwood ha sido su unión a la marca Dyson. Sus auriculares estuvieron en cuatro de los looks de la pasarela primavera-verano 2025 que tuvo lugar en la plaza de la República de París, "escenario de protestas e historia".
"A Dyson siempre le ha apasionado el diseño y la ingeniería. Nuestra colaboración con Vivienne Westwood refleja perfectamente este espíritu.Trabajar con una casa visionaria como Vivienne Westwood, que comparte nuestra pasión, ha sido una oportunidad apasionante para demostrar cómo la tecnología puede integrarse perfectamente con la moda en el escenario global", ha dicho Jake Dyson, ingeniero jefe. Como invitada estelar, la modelo Irina Shayk, que desfiló con un traje de chaqueta mininal y oversize con bailarinas metalizadas. La opción más sencilla de Kronthaler.
De la rebeldía de la firma británica a la elegancia atemporal de Hermés, que ha destacado el carácter artesanal de la moda poniendo la piel como pieza fundamental de la colección. Tonalidades tierra y mucha transparencia en un viaje que nos hace soñar. "Luz y opacidad. La transparencia de una malla de seda que filtra la luz, una segunda piel sugerentemente sensual. Piezas que dejan entrever el cuerpo, un juego del escondite que destila una feminidad libre y atrevida", la definición que la casa francesa hace de las propuestas creadas por Nadège Vanhée habla por sí sola.
Y añaden: "Anclada en la herencia de los talleres, donde el cuero y los materiales se elaboran a mano, las formas y las funciones cambian. En un juego de sentidos y percepciones, las líneas y las curvas se perfilan como un dibujo. La sensualidad de la luz revela una feminidad polifacética".
El código oficina se transforma con tops y microshorts, también los vestidos de noche cuajados de lentejuelas y combinados con botas de montar. Un safari paradisiaco para disfrutar. En cuanto a los accesorios, pendientes geométricos hechos con las lengüetas de los bolsos y su mítico bolso Birkin colocado al revés en manos de las modelos. Un resultado impecable y evocador.
Terminamos con otra de las grandes casas, símbolo de elegancia, lujo y femineidad, Elie Saab que utiliza la expresión "el encanto de los silvestre" para presentar una colección llena de estampados florales y vegetales que traen la sabana africana a la pasarela con un extra de brillo.
"En cualquier día soleado de sabana bajo un cielo azul infinito, el encarto de lo silvestre late en el sofocante aire africano. La mujer Elie Saab abraza la aventura refinada que la colección pret-a-porter primavera-verano 2025 da vida, encarnando un espíritu elegante de libertad y descubrimiento indómitos", explican desde la firma.
Presentada en el Palacio de Tokio, los bordados, los detalles de animales salvajes en cinturones y broches, las lentejuelas y los colores camel, beis y teja revisitan en código safari. Sin olvidar sus maravillosos vestidos de fiesta, que son objeto de las celebrities más elegantes del mundo, y que vuelven a triunfar. Paillettes formando flores, pedrería en dibujos geométricos y capas de gasa enamorarán la próxima temporada.