Existen muchas maneras de canalizar y soltar las emociones reprimidas: escribir, practicar ejercicio físico, la meditación… a estas formas ya conocidas se les suma una nueva tendencia: los rage rituals o rituales de ira, que tienen cada vez más auge entre el género femenino.
¿En qué consisten?
Esta práctica se ha viralizado rápidamente en TikTok, y pretende ayudar a las participantes a soltar emociones reprimidas de una forma muy curiosa: estas mujeres pagan grandes cantidades de dinero para gritar y golpear el suelo y los árboles con palos en medio del bosque.
Mia Banducci (@miamagik) es una de las impulsoras de esta nueva tendencia, que promete ser muy efectiva a la hora de liberar emociones reprimidas. Según cuenta, en el desarrollo del ritual los participantes cogen palos y golpean el suelo mientras piensan en aquellas personas o situaciones que les han hecho daño.
Según USA Today, esta novedosa terapia tiene un coste que va desde los 2.000 hasta los 4.000 dólares, es decir, unos 3.740 euros.
¿Realmente son efectivos?
Margarita Coca Viñas, terapeuta y coach en psicología positiva, explica que esta clase de terapias pueden tener un impacto muy positivo y otorgar algunos beneficios psicológicos.
"La screaming teraphy o terapia de gritos puede proporcionar una liberación catártica temporal al permitir que la persona exprese su ira de manera física y vocal. Es importante señalar que, aunque provoque un alivio momentáneo, no aborda las causas subyacentes de la ira y, por tanto, no debe ser considerado como un tratamiento único o completo", indica.
El acto de gritar permite una gran expresión física de las emociones reprimidas, lo que nos puede llevar a una sensación de alivio inmediato. La liberación de tensiones físicas y emocionales a través del grito puede reducir de manera temporal los niveles de estrés y la sensación de ira, pero este alivio es temporal y no sirve para resolver directamente aquellos problemas que causan esta emoción.
Margarita Coca.
Los efectos
La efectividad de esta terapia puede variar entre diferentes personas, explica la psicóloga. "Algunas pueden encontrarla muy útil y liberadora, mientras que otras pueden no sentirse cómodas o beneficiadas por este método. Factores como la personalidad, la intensidad de la ira y la disposición a participar en una actividad que puede parecer inusual o embarazosa, influyen en su eficacia".
Además, las personas con ciertos trastornos de salud mental podrían no encontrar alivio en este tipo de técnicas y necesitar una atención más estructurada, personalizada y profesional.
Enfocada a las mujeres
Es posible que esta terapia se dirija principalmente a las mujeres por motivos y normas socioculturales. "A menudo, las mujeres son desalentadas a expresar su ira abiertamente. En muchas culturas se espera que la mujer sea más contenida y tenga un mayor control emocional que el hombre, lo que puede llevar a una gran acumulación de ira y frustración", señala la experta.
De esta forma, esta clase de terapias pueden proporcionar un espacio seguro y aceptable para que las mujeres expresen sus emociones sin miedo a ser juzgadas o criticadas por la sociedad.
Liberarse de la ira acumulada es crucial para la salud mental y física, ya que la ira no expresada puede llevar a graves problemas de salud. "La hipertensión, los trastornos del sueño, los problemas digestivos y las enfermedades cardiovasculares pueden ser consecuencia de emociones reprimidas, así como un declive de nuestras relaciones interpersonales y nuestra calidad de vida".
Liberarnos de las emociones negativas nos trae salud y bienestar.
Otras alternativas
Existen otras muchas alternativas que podemos usar para liberar la ira y otras emociones, entre las que destacan:
- Ejercicio físico y yoga: actividades como correr o practicar yoga pueden ayudar a liberar la tensión acumulada.
- Terapia psicológica: hablar con un terapeuta puede ayudar a identificar y abordar las causas subyacentes de la ira.
- Meditación y técnicas de relajación: practicar la meditación, la respiración profunda y el mindfulness puede ayudar a calmar la mente y calmar las emociones.
- Escritura terapéutica: escribir sobre lo que nos duele puede ser una forma muy efectiva de procesar y liberar la emoción.
- Terapia de arte: expresar emociones a través del arte también puede ser una manera creativa de manejar la ira y otras emociones que generan malestar.