Llegan las 6:20 de la mañana y las familias de Juegaterapia esperan ansiosas en el mostrador 790 de Iberia en la Terminal 4 del Aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas. Ni tan siquiera ha dado tiempo a amanecer, pero la ilusión de estos niños no puede esperar más y, es que este no es un viaje común y corriente. Las miradas llenas de expectación y emoción se cruzan entre los pequeños, cada uno con su propia historia de lucha y esperanza.
A pesar del sueño que se refleja en algunos rostros, la energía contagiosa de la aventura que están a punto de emprender despierta sonrisas y chispas de alegría entre los que ya esperan embarcar en el avión.
Aunque todavía sin saber qué les deparará esta jornada, los 32 niños, junto a sus padres y hermanos, dan comienzo a un episodio inolvidable donde, si algo no va a faltar, es magia y, por supuesto, muchas sorpresas. Porque… ¿qué sería un viaje a Disneyland París sin un poco de polvo de hadas?
Dos aniversarios mágicos
Para ponernos en contexto debemos entender la peculiaridad de este día, porque no hablamos de una fecha normal. Iberia celebra 75 años desde su primer vuelo directo a París, un 1 de julio de 1949. En ese momento, la conectividad de la aerolínea era muy diferente a la que tiene hoy. Eran los comienzos de la aviación española.
Tan solo eran cuatro las líneas regulares entre España y el resto de Europa: Lisboa, Londres, Roma y General eran ya un habitual, pero a Iberia le sabía a poco. Faltaba la capital de la ilusión, de la magia y del amor.
Desde entonces, ha habido inmensos cambios, así como notables ampliaciones en su flota y en su variedad de destinos. Ya son 10 los vuelos que la compañía ofrece cada día a París, con posibilidad de partir desde las 7 de la mañana hasta las 10 de la noche, por lo que se hace de lo más sencillo adaptarlos a nuestro día a día.
Pero la particularidad de esta jornada no acaba aquí. Los 75 años del vuelo de Iberia se unen con el 32º aniversario desde la apertura del parque en Disneyland París. Un, seguramente nublado, 12 de abril de 1992, la magia llegó a Europa de la mano de los personajes de nuestras películas favoritas.
Aquel día marcó el comienzo de una historia por la que ya han pasado 375 millones de personas. Niños, adultos, parejas y familias han podido disfrutar juntos de una experiencia donde la ilusión se ha adueñado de sus corazones.
"Han sido 32 años de historias inolvidables, 32 años de ilusión, 32 años de innovación, 32 años en los que millones de sueños, de grandes y pequeños, se han hecho realidad", relatan desde el parque.
Un propósito común
Así que, con motivo de este doble aniversario, ambas compañías se han propuesto trabajar en equipo con un propósito muy claro: convertir el 12 de abril de 2024 en un día inolvidable para los niños de Juegaterapia.
En la primavera de 2010, Mónica Esteban, fundadora de la organización, le dio una Play Station a un niño que estaba recibiendo tratamiento de quimioterapia en el hospital. Aunque fue un paso pequeño, este gesto marcó el inicio de 14 años de historia, en los que el juego se convirtió en la clave para hacer que los más pequeños se animen y afronten la enfermedad con una sonrisa.
Desde entonces, la fundación dona todo tipo de dispositivos y juegos para que estos chicos y chicas puedan olvidarse, durante algún tiempo, del proceso que están atravesando. Además, han comenzado una iniciativa para hacer de las azoteas de los hospitales lugares para jugar. Un proyecto que ya han establecido en centros como el Hospital La Paz o el Hospital La Fe de Valencia.
Una jornada inolvidable
Con un objetivo claro y ganas de celebrar este doble aniversario, las organizaciones han creado un proyecto único. El día empezaba en el aeropuerto de la capital. Allí se reunieron las familias, emocionadas y deseosas por iniciar un día de lo más completo.
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A su llegada al avión se encontraron con la primera sorpresa del día. En cada asiento del vuelo IB3402 de Iberia les esperaba un peluche y las orejitas más famosas del Parque y, cuando el avión se situó a los 30.000 pies de altura, el piloto pronunciada la segunda sorpresa de la jornada.
"Buenos días, les habla el comandante. Quiero darles la bienvenida a este vuelo de Iberia con destino París. Como habrán podido observar, este es un vuelo especial y queremos que formen parte de este día tan mágico. Por eso hemos dejado en sus asientos un obsequio para que recuerden con cariño este viaje. Y, durante el vuelo, recibirán una sorpresa que estamos convencidos de que será inolvidable. Muchas gracias y disfruten del vuelo."
Pocos minutos después, los tripulantes de cabina comenzaron a repartir un sobre marrón a todos los pasajeros -sí, a todos a los 200 clientes de ese vuelo- quienes, curiosos y sorprendidos, lo abrían para encontrarse una entrada doble al destino más mágico de Europa.
A su llegada al Aeropuerto de Orly, los 32 niños de Juegaterapia fueron directos al encuentro con su personaje favorito frente al castillo de la Bella Durmiente. Allí se rieron y se emocionaron junto a Mickey Mouse y dieron comienzo a un día donde divertirse era el único requisito a cumplir.
Disfrutaron de todo tipo de atracciones y espectáculos durante una jornada de lo más especial. Y horas después, en el vuelo IB3441 de vuelta a Madrid, aunque ya cansados, a los chicos todavía les quedaban fuerzas para debatir cuál había sido su atracción favorita. "Me ha encantado este día, me quedo con todo, no puedo elegir solo una cosa", señalaba una de las pequeñas.