Las cejas son una de las mayores preocupaciones de cualquier experto en belleza. Unas cejas bien cuidadas y adaptadas al rostro de cada una pueden cambiarlo todo. Por esta misma razón, los tratamientos de belleza se centran cada vez más en técnicas que cambien el estilo y la forma de la ceja.
[Alisado o laminado de cejas: ¿en qué se diferencian?]
El microblading, el microshading y el alisado de cejas cobran cada vez mayor importancia entre los tratamientos estéticos. Sin embargo, ha surgido una nueva técnica de cejas, el brow up o cejas laminadas y ha venido para quedarse.
Desde la famosa aparición de Cara Delevigne en las pasarelas, el amor por las cejas gruesas y tupidas ha ido en aumento. Se han convertido en una de las mayores tendencias de belleza y en el objetivo de muchas famosas.
Lo mejor de muchos de estos tratamientos es que no requieren preocuparse por las cejas a diario, gracias a su efecto semipermanente, tendrás unas cejas perfectas y muy favorecedoras sin necesidad de estar pendiente de ellas a diario.
No obstante, muchas de las técnicas más utilizadas como el microblading no suelen estar al alcance de cualquier bolsillo, ya que su precio oscila entre los 250 a los 500 euros. Este tratamiento consigue una ceja definida, aunque muy natural.
En el caso de que quieras ese mismo resultado, pero con un precio más económico, el brow up puede ser tu solución. Esta técnica ronda entre los 80 y 90 euros y es utilizada por personajes públicos como Cristina Pedroche o Emilia Clarke.
Las cejas de Cristina Pedroche han sido siempre una de sus mayores señas de identidad, que han originado desde comentarios negativos en su perfil de Instagram, hasta adoración por parte de sus fans.
La presentadora se peina sus cejas pobladas hacia arriba y las fija con producto para que estén intactas durante todo el día; un efecto que se consigue con el laminado de cejas.
Este tratamiento alisa, fija y peina la ceja, con un resultado que asemeja la utilización de un gel o máscara fijadora. El tipo de proceso recuerda mucho al lifting de pestañas: Después de decidir qué diseño quieres dar a tus cejas, se limpiara la zona para eliminar cualquier resto que pueda interferir en el proceso.
A continuación, con un producto fijador, se dará forma a las cejas y, pasado el tiempo necesario se suavizará la zona con un gel. Para completar el tratamiento, se retirará el exceso de producto y se peinarán los pelos de la ceja y...¡voilá!
Este tratamiento ronda los 40 minutos de aplicación, aunque sus efectos varían entre las cuatro y las ocho semanas. Una de sus muchas ventajas es que puedes decidir en qué dirección se peinan los pelos y la forma final de la ceja.
El brow up es ideal para las personas que tienen las cejas finas, ya que consigue darles mucho más volumen y densidad, avivando la expresión del rostro. Por otro lado, el resultado parece totalmente natural y el hecho de que se vaya difuminando con el paso de los meses lo hace perfecto para las indecisas.