El último estudio de la SEME (Sociedad Española de Medicina Estética) desvela que el target más joven está impulsando los procedimientos de medicina estética a una edad cada vez más temprana.
Si hace unos años el debut era a los 35, ahora chicas de 20 piden, sobre todo, rellenos de ácido hialurónico en labios y toxina botulínica.
Desde magasIN hablamos con la doctora Mar Lázaro, experta en medicina estética, y a la doctora Conchita Pinilla, especialista en cirugía plástica.
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“La edad ha bajado a los 25 años de media; en buena parte este público más joven llega influido por redes sociales como Instagram y sus filtros. Suelen pedirte un baby bótox, es decir, una toxina botulínica más suave para iniciarse, sobre todo, en patas de gallo para que se amplíe un poco la mirada, con elevación sutil de la ceja”, asegura la doctora Mar Lázaro.
Y continúa: “En cuanto a los labios, más que volumen, suelen demandarme perfilado e hidratación. Y algo a destacar es que a los 20 empiezan a desear una piel más bonita y saludable". Para ello, los tratamientos de elección son "los peeling, la bioestimulación con vitaminas, minerales, oligoelementos y ácido hialurónico para hidratar”, concluye Lázaro.
La especialista en medicina estética señala la importancia de frenar en ocasiones a un público aún en desarrollo emocional: “Ocurre cuando están excesivamente influidos por lo que ven en las redes que llegan con el móvil en la mano y un post de Instagram con rostros y cuerpos perfectos y piensan que es la realidad. Nuestra labor es que vean que pueden mejorar su aspecto, pero no cambiarlo. No podemos vender estética, de ninguna manera: es un auténtico peligro para estos jóvenes”.
No a las rebajas en estética
En ese sentido, Mar Lázaro alerta sobre las ofertas, tan habituales hoy en el sector. “Estoy muy en contra a las rebajas en estética. Abogo por calidad asistencial, por mejorar el producto y por la profesionalidad del médico especialista”.
La experta señala un target diferente, pero que también va en aumento: la mujer que se ha dedicado de pleno al rol de madre, sin tiempo para nada y que un día se mira al espejo y se ve cansada y estresada.
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“En este caso llegan en busca de técnicas de resultados rápidos y se centran mucho más en la cara que en el cuerpo”. Lipo, otoplastia y reducción de mamas: estética y funcionalidad.
“Siempre ha existido un acceso a la cirugía plástica en pacientes jóvenes, sea por alteraciones como la forma de las orejas o la hipertrofia de mamas o por el deseo de reducir grasa, entre otras intervenciones, pero últimamente se ha generalizado en estos pacientes primerizos”, explica la experta en cirugía plástica Conchita Pinilla.
Se operan antes de los 18
Al menos el 20% de su consulta tienen en torno a 20 años y según la SECPRE, el 1,9% de las intervenciones se realizan antes de los 18, en su mayoría por motivos clínicofuncionales. A los 20 no es habitual, explica, solicitar una de las técnicas en cirugía plástica más demandadas en la treintena, según el último informe de la SECPRE (Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética).
En cambio, sí lo es la reducción de mamas cuando existe una causa funcional, así como la liposucción cuando hay cartucheras muy marcadas o existe lipedema, la otoplastia en orejas muy grandes o separadas (el 60% de las cirugías plásticas antes de los 18 según la SECPRE) y la rinoplastia cuando se asocian problemas respiratorios.
“Aunque a la joven le suele interesar más la parte estética y a los padres la funcional. De hecho, habitualmente son decisiones muy meditadas y respaldadas por los progenitores”.
Instagram distorsiona la realidad
Las curvas en mujeres que vemos en Instagram y en algunas tiendas de moda, así como en redes como Instagram, distorsionan a menudo la imagen de unas medidas reales, mostrando cuerpos imposibles con cinturas ultradelgadas y pecho, glúteos y caderas desmesurados.
Pinilla cree que este prototipo físico es más carne de cañón de franquicias, donde los pacientes se dejan influir por reclamos publicitarios, que de clínicas serias y con garantías.
Por otro lado, cuerpos como los mencionados en general no son naturales. ¿Es posible tener un cuerpo así sin bisturí?
“Sí, pero en casos aislados. Normalmente, para tener un cuerpo así de poco natural son necesarias técnicas muy agresivas de liposucción y lipofilling, pero en la mayoría de las personas no sería posible porque habría que extirpar la última costilla, y por suerte no es una técnica habitual en España”, asegura.
“¿Cómo envejecerán esos cuerpos?”, se pregunta la doctora y añade que “el tratamiento de la gente muy joven en cirugía plástica debe hacerse de manera muy consciente y meditada, con plena participación de los progenitores y huyendo de modas y orientaciones comerciales. Hablamos de defectos físicos evidentes donde el procedimiento puede contribuir a su bienestar emocional, más allá del objetivo estético” concluye la experta.