La historia de España se extiende desde el inicio de los siglos, dejando un legado que a día de hoy se puede disfrutar de múltiples maneras. Si lo tuyo son los viajes por carretera, también encontrarás una aventura hecha a tu medida.
La famosa Ruta 66, uno de los tramos más famosos a nivel mundial de la Red de Carreteras Federales de Estados Unidos, tiene su réplica en España. Pero, ¿podría ser que la ruta española sirviera de inspiración a los estadounidenses? Es muy probable, ya que, comparando fechas, la carretera española resulta ser mucho más antigua.
La Ruta de la Plata, recorre el país majestuosamente desde Gijón hasta Sevilla a lo largo de 800 kilómetros. Una joya de la ingeniería que además de conectar el norte con el sur, ha jugado un papel crucial en la historia y desarrollo de las regiones que atraviesa.
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Esta histórica vía de comunicación sigue, en gran parte, el trazado de la antigua calzada romana denominada "Vía de la Plata". Esta, construida durante el Imperio romano, tenía como objetivo facilitar el transporte de mercantes y soldados, pero a día de hoy, aún se sigue disfrutando de su magnífica obra.
Del mismo modo que la Ruta 66 americana es todo un icono de libertad y aventura, la Ruta de la Plata invita a vivir una experiencia mágica, descubriendo la diversidad y riqueza de España de norte a sur.
Historia de la Vía de la Plata
Sin poder acotar una fecha exacta de la obra de la Vía de la Plata, sí se conoce que fue mandada construir en época del emperador romano Augusto (27 a. C. - 14 d. C.), en pleno proceso de expansión y consolidación del Imperio romano en la Península Ibérica.
El origen del nombre de esta magnánima obra realizada por los romanos abarca dos posibilidades. Mientras que existe la teoría de que es un derivado del término árabe "Bal'atta", que significa pavimentado, hay que quien afirma que procede del uso que se le daba a la ruta para transportar plata.
Sea como fuere, la Ruta de la Plata hace referencia tanto al histórico camino (Vía de La Plata), como a las actuales carreteras N-630 y A-66, dependiendo de los tramos.
Una de las más importantes calzadas de la Red Nacional de Carreteras de España, muy frecuentada por aquellos que buscan una ruta turística diferente.
Atractivos turísticos de la Vía de la Plata
A lo largo de los siglos, esta vía ha sido mejorada y mantenida, tanto por los diferentes gobiernos romanos como por los actuales. No es de extrañar que coches, moteros y ciclistas eligen la Ruta de la Plata por la belleza que abarca, pero también por los numerosos atractivos turísticos que ofrece.
Las históricas ciudades que la Vía de la Plata atraviesa y rodea son tantas, que las posibilidades de trazar tu propia ruta son múltiples. Dependerá de tu punto de partida y el de llegada, y lo mejor de todo, es que no tendrás opciones a equivocarte: ¡todos los caminos son increíbles!
Desde el norte podrás acceder a un tramo del Camino de Santiago, elegida también por muchos peregrinos que se dirigen hacia Santiago de Compostela desde el sur de España.
Descendiendo geográficamente, una de las capitales de provincia más bonitas a las que puedes acceder desde la Ruta de la Plata es Salamanca, aunque también León o Zamora. Son 384 kilómetros los que aproximadamente esta vía recorre de Castilla y León.
Extremadura es otra de las grandes beneficiadas de la histórica ruta. De esta comunidad te podrás encontrar diferentes pueblos de gran importancia histórica y cultura. De aquí no puedes perderte su capital, Mérida y su inmenso legado romano que aún mantiene vivo la ciudad.
De Andalucía, la Ruta de la Plata abarca 115 kilómetros. Conducir hasta esta preciosa región no te importará nada, especialmente en época estival, pudiendo acceder fácilmente hasta cualquiera de sus costas.
Sevilla y Carmona son las únicas localidades que abarca la ruta, siendo la capital andaluza el principal atractivo turístico.
Conducir por la Vía de la Plata es apostar seguro por una escapada única y diferente este verano. Planea la ruta que más se adapte a tus preferencias o, por qué no, recorre toda España a través de nuestra propia Ruta 66.