Hace algunos años la instalación de un sistema domótico en casa implicaba una gran inversión. Hoy su coste ha disminuido considerablemente y la demanda ha crecido.
Las smart home permiten que sus habitantes se comuniquen con un sistema de objetos conectados mediante internet, es decir, el conocido como Internet de las cosas (IoT), capaz de automatizar una serie de acciones preestablecidas por los usuarios, lo que permite mayor comodidad y también una mayor eficiencia en el consumo energético.
La domótica facilita entre otras cosas, la apertura y cierre de persianas, ventanas, puertas y cerraduras de forma automatizada, así como también los sistemas de climatización, riego, y suministro de agua y gas.
Además, también es posible controlar el sistema de iluminación, de alarmas, los electrodomésticos y el resto de dispositivos desde un sólo mando e incluso desde una aplicación instalada en el teléfono móvil.
¿Qué es?
Dentro del concepto de casa domótica, la smart lighting gana adeptos. Se trata de un conjunto de bombillas inteligentes, que se pueden manejar con la voz y gestionarlas también a distancia desde el móvil o desde un mando.
Estas bombillas facilitan manejar la intensidad de la luz y el color sin tener que tocar ningún interruptor de pared. De esta manera, y de cara a las vacaciones es posible encender la luz de casa desde la playa o lugar de descanso. Permite crear rutinas que encenderán y apagarán la luz de forma automática para que parezca que la familia sigue en casa y evitar posibles robos.
¿Cómo instalar el sistema?
Los expertos aseguran que la clave está en la conectividad. Los dispositivos se pueden controlar a través del móvil o mediante un altavoz inteligente conectados a través de Wi-Fi o Bluetooth. Y en algunos casos, se utiliza un hub, un pequeño aparato que hace de intermediario entre el router y los dispositivos inteligentes.
Las bombillas, en función del modelo y la marca elegidos se deben configurar a través de la aplicación y conectarlas al Wi-FI o mediante bluetooth, o bien configurando el hub correspondiente.
Las bombillas de ahorro
Las bombillas inteligentes son LED, es decir, bombillas de ahorro energético que consumen menos electricidad y pueden tener una duración de hasta veinte años. La mayoría de los modelos permiten ajustar su intensidad, y otras muchas ofrecen iluminación RGB para crear diferentes ambientes según los colores que emitan.
En este sentido, el sistema de Philips Hue, por ejemplo, permite ir incorporando elementos de luz y electrodomésticos para automatizar poco a poco toda la casa.
Estas bombillas además, son compatibles con los asistentes de voz más conocidos como Amazon Alexa, Google Assistant o el de Apple y podemos elegirlas con luz blanca y de color.
Osram, la conocida marca de bombillas, también tiene una gama inteligente para el hogar compatible con los altavoces de Alexa y Google Assistant.
Es parte de la decoración
Philips ha presentado recientemente su sistema de iluminación inteligente Philips Hue, capaz de adaptarse a los ritmos y estados de ánimo de las personas.
Este sistema de iluminación conectada transforma el modo en el que se disfruta de las distintas estancias del hogar y los diferentes momentos. Desde como ver tu película favorita o escuchar la canción que más te gusta, hasta disfrutar de una cena con tus seres queridos o haciendo deporte o simplemente mientras te relajas leyendo un libro.
El sistema permite controlar las luces para que acompañen en cada momento de la mejor manera.
«No solo contamos con un gran ecosistema de iluminación con la gama más amplia de productos del mercado. Además, la compatibilidad con asistentes de voz, cerraduras y sistemas de seguridad inteligentes, dispositivos como Fitbit o periféricos, completan una experiencia donde los límites los pone el consumidor», afirma Jordi Manrique de Signify en la presentación de Phillips Hue.
Los productos de Philips incluyen desde bombillas inteligentes hasta tiras LED o lámparas gradient, que muestran patrones de luz para decorar las habitaciones con un degradado de luz totalmente configurable.
Pueden ofrecer una gama de más de 16 millones de colores, que se modifican y adaptan en tiempo real, dependiendo de lo que detectan en el entorno.
Todo está centralizado en el Hue Bridge, que es el ‘cerebro’ que permite integrar hasta 50 luces y dispositivos inteligentes en una red controlada por la app de Hue, compatible con iOS y Android.
Desde esta aplicación se puede configurar cada luz de manera independiente, dividirlas por estancias o controlarlas como un conjunto único, para poder utilizar todas las funcionalidades de automatización.
También permite elegir el color de las luz y es compatible con los asistentes de voz de Alexa, Google Home y Apple Homekit.