No hay lugar a dudas de que Mercadona es uno de los supermercados favoritos para la mayoría de españoles para llenar la despensa con sus productos de alimentación y limpieza. La cadena nos sorprende día tras día con novedades que prometen una calidad increíble a precios competitivos.
La superficie de origen valenciano cuenta en sus establecimientos con una completísima gama en artículos de limpieza en la que podrás encontrar todo lo necesario para dejar cualquier rincón como los chorros del oro. No obstante, su sección de limpieza no se limita al hogar, y es que la cadena tiene un producto infalible para mantener el coche impecable.
Concretamente estamos hablando del limpiacristales con mango, un artículo que promete dejar los cristales del coche impolutos. Es, sin lugar a dudas, uno de los productos más económicos del mercado y a su vez, que mejores resultados obtienen.
Seguro que a todos nos ha pasado estar horas y horas dándole a los cristales del coche con diferentes productos, sin resultado alguno. Bien, pues gracias a Mercadona, por menos de 3 euros, conseguirás ese resultado tan deseado. Este maravilloso invento de la cadena no dejará marcas ni gotas de agua sucia gracias a la ventosa que viene integrada.
Además, gracias a su mango y su ligero peso se podrá usar en todo tipo de superficies lisas como azulejos, ventanas, espejos o cabinas de ducha, sin ningún tipo de incomodidad ni excesivos esfuerzos.
Lo mejor de todo es su sencillo uso y es que tan solo hay que rociar producto para los cristales y a continuación pasar el utensilio sobre la zona a limpiar para retirar todo el líquido sobrante.
Además, se puede usar a una mano y en cualquier dirección, incluyendo posiciones inclinadas, horizontales e incluso por encima de la cabeza.
Remedios caseros
Sin embargo, esta no es la única solución para mantener los cristales del coche limpios. Si eres de los ahorradores que prefiere no gastar dinero en productos nuevos, existe un remedio casero que promete el mismo resultado que accesorio de limpieza.
Para llevar a cabo este facilísimo truco simplemente tendrás que asegurarte de tener a mano los dos materiales imprescindibles que seguro que tenemos todo el mundo en casa: un limón partido a la mitad y un trapo.
Para ponerlo a prueba lo primero de todo es quitar el polvo y la suciedad con un trapo mojado. A continuación, y una vez esté seca la zona, debemos partir la mitad del limón y frotar por los cristales y dejar que el ácido de este repose al menos unos 5 minutos.
Por último, limpia el exceso con un trapo seco. Los cristales del coche quedarán como nuevos y cuando llueva o se mojen no volverán a aparecer esas típicas marcas de agua.