El esfuerzo económico que hace Málaga para costear su servicio de limpieza y recogida de basura lejos de disminuir con el nuevo modelo cien por cien público, aumenta. Las cuentas diseñadas por el Ayuntamiento para 2023 elevan a unos 122 millones de euros los gastos vinculados a Limasam, una suma en la que se incluyen inversiones por unos 4 millones de euros que asume directamente el área de Servicios Operativos.
La cifra es la más elevada que se recuerda en la capital de la Costa del Sol y entra en conflicto con la tesis que llegó a manejarse en su día de que la transformación de la antigua Limasa, sociedad mixta con un 49% en manos municipales, a una sociedad enteramente municipal, iba a traer consigo un ahorro para las arcas del Consistorio.
La realidad, por el momento, es otra. Aunque a ello contribuye la importante labor que se viene realizando en los últimos ejercicios en la renovación de vehículos y resto de maquinaria de la empresa.
Los datos vienen a confirmar la subida del capítulo de gasto de unos 2 millones respecto al presupuesto de 2022, cuando ya ha subido sobre anualidades anteriores. Para medir adecuadamente el impacto económico que tiene Limasam sirva decir que representa el 22,6% de los 976,6 millones de gastos recogidos por el Consistorio para el año que viene.
La línea que dibujan los números de Limasa, antes, y más recientemente, de Limasam es claramente ascendente. En 2016 el presupuesto rozaba los 90 millones de euros; en 2017 ascendió a unos 96 millones; en 2018, a 97,5 millones. Y se alcanzaron los 102 millones en 2019. En 2020, fueron 109 millones.
Ese es justamente el año en que se produce el cambio de modelo en la limpieza de Málaga. Respecto a las últimas cuentas de la antigua Limasa, la subida del presupuesto es de unos 13 millones de euros.
Y en la misma medida en que crecen los números de Limasam, lo hace el coste que supone la plantilla. Para 2023, la reserva económica asignada roza los 90 millones de euros. En concreto, son 89,7 millones, 3,2 millones más que en 2022, lo que supone casi un 3,7%.
De este montante, según se indica en las cuentas previstas, 27,5 millones se destinan a la parte de la recogida de residuos; 10,2 millones al tratamiento de residuos, y otros 51,9 millones a la limpieza urbana. En apartado de inversiones destaca la inclusión de 7,1 millones de euros para avanzar en la modernización de la flota de vehículos.