Los malagueños sabían que el Carpena iba a ser una fiesta este domingo, cuando el Unicaja de Málaga ofreció el trofeo de la Basketball Champions League (BCL) a la marea verde. Es por ello por lo que ni el propio Antonio Banderas quiso perderse semejante jornada.
El actor malagueño se ha dejado ver por el Palacio de los Deportes Martín Carpena en la tarde de este domingo junto a su pareja Nicole Kimpel. Ambos han estado sentados en un palco ubicado justo detrás de la grada de prensa. Eso sí, ninguno de los dos vestía la camiseta de los cajistas, una tarea pendiente para su próxima visita.
"Este equipo es un orgullo para Málaga. Es muy bonito tener esto aquí, tener esto en el estadio, en el público y jugadores. Se está asentando muy bien el equipo, los títulos están llegando... Y la liga está muy abierta", ha dicho Banderas ante los micrófonos de Movistar Deportes.
Sobre el futuro, Banderas dice que es "un optimista patológico" para todo en la vida, algo que a veces le ha acarreado problemas en ocasiones, pero se ha mostrado positivo con que en junio los cajistas vuelvan a salir a celebrar otro título.
Banderas ha aplaudido y celebrado cada canasta de los verdimorados y se ha llevado las manos a la cabeza con determinadas acciones arbitrales. De igual forma, se le ha visto comer y beber tranquilamente en, probablemente, uno de los pocos huecos libres que tiene en su siempre apretada agenda profesional.
El actor ha estado acompañado, además, por dos grandes embajadores del Unicaja, Berni Rodríguez y Carlos Cabezas. Cabe recordar que el artista ha sido una de las pocas personalidades públicas malagueñas que dejó un mensaje a los campeones tras la victoria en Serbia sobre el Lenovo Tenerife.