Málaga CF vs. Castellón: baño de realidad (0-1)
Los blanquiazules caen contra el líder y se queda a catorce puntos del ascenso directo en el mes de enero.
21 enero, 2024 22:12Noticias relacionadas
Al Málaga CF, con lo que tiene, no le da para ascender a Segunda División de manera directa. El Castellón se fue este domingo de La Rosaleda sin un rasguño y con tres puntos que alejan a los blanquiazules a catorce (tres más el goalaverage), y la imagen de un equipo local inofensivo, al que sin nada le robaron la cartera en la noche de más relumbrón del curso. Manu Sánchez, sólo para rematar una segunda jugada posterior a un córner, puso la puntilla al conjunto de Sergio Pellicer, incapaz de encontrar un plan para hincarle el diente al líder incontestable de la categoría, que sin despeinarse se ha quitado de encima a un rival directo, o eso al menos se esperaba, para el ascenso.
El público se fue de La Rosaleda sin una ocasión clara que echarse a la boca, sin un arrebato de su equipo en los noventa minutos para intentar imponer al menos el escudo en una noche de tronío, con unas gradas nuevamente llenas para empujar a los suyos. Ahora, empieza una nueva liga para el Málaga, en la que tendrá que afilar en ataque para encontrar los caminos del gol y pelear por entrar en el playoff en los puestos más altos posibles que den derecho al factor campo y lo lleven, en teoría, a cruzarse con rivales de algo menos de nivel.
Pellicer innovó con el sistema por primera vez este curso en el once y le puso un espejo al Castellón con tres centrales. Pero más novedosa fue la elección de las piezas. Delante del Alfonso Herrero colocó a Einar, Moussa central derecho y Juande en la izquierda. Gabilondo y Dani Sánchez fueron los carrileros con dos hombres en el centro, Manu Molina y Sangalli para descolgarse. Por delante esta Dani Lorenzo como aguador de Dioni y Roberto.
Lo primero fue un disparo peligrosísimo de Raúl Sánchez desde el borde del área. Cogió a los blanquiazules descolocados en el campo. Pero corrigieron rápido. Dos llegadas peligrosas consecutivas, por las bandas, sirvieron para decirle al líder aquí estoy yo, soy el Málaga. Un Málaga, como se fue demostrando, inofensivo.
Un contra bien llevada por Dani Lorenzo y Dani Sánchez acabó yéndose desviada por Roberto. El Málaga tenía claro lo que hacer con la pelota. El Castellón, un equipo que juega, prefería el intercambio.
El Málaga fue encontrando huecos a la espalda de la defensa visitante, pero le faltaba tino a la hora de dar el último pase. Salían bien los de Pellicer de los enredos en el centro del campo. Entre Molina, Sangalli, Lorenzo y Dioni en la ayuda, se manejaba bien el Málaga, que en las bandas tenía vuelo con Gabilondo y Dani Sánchez.
Atrás destacó el descaro de Moussa cada vez que tenía la pelota. En la defensa era agresivo y rápido, con el balón arriesgaba siendo vertical siempre. Tiene ganas el Mali por lo que muestra en el césped.
En el minuto 36 llegó una mala noticia. Sangalli se tiraba al suelo echándose las manos a la cabeza y se tenía que ir del campo lesionado. Izan ocupaba su sitio.
Lo intentó el Málaga hasta el descanso, empujó, pero sin terminar de generar el peligro que le metiera el miedo en el cuerpo al Castellón.
Nada más arrancar la segunda mitad Gabilondo arrancó la moto por la derecha y el remate forzado de Roberto se fue alto. Poco después Einar entró con todo para rematar un córner y el balón se le fue desviado. El Málaga había salido a mandar, pero no le da. La réplica del Castellón una falta lateral con veneno de Moyita. Herrero la mandó a córner con un paradón. En el córner sólo pudo seguir con la mirada el remate de Manu Sánchez, que había entrado en el descanso, que se fue para dentro en forma de mazazo. Sin nada, el líder mandaba en La Rosaleda. La cruda realidad.
El partido se enredó a raíz del gol igual que Roberto a la hora de rematar en el área pequeña. El Málaga tendría que resetear lo que estaba haciendo si quería darle la vuelta al partido y seguir pensando en el ascenso directo.
En el 63' Pellicer retiró a Moussa y Juande para darle sitio a Larrubia y Kevin. Izan bajó al centro de una defensa de cuatro ahora. Se abrieron los espacios y el Castellón empezó entonces pisar los terrenos prohibidos, mientras que el Málaga se precipitaba arriba. A Dioni siempre le faltaba lo último. Dani Lorenzo y Manu Molina siempre tocaban la pelota muy lejos de la zona de peligro. El Málaga solo cargaba el ataque por la zona derecha. Pero sin capacidad de sorprender con Gabilondo.
Pellicer quemó las naves retirando a Molina por Juan Hernández y dejando un centro del campo con Larrubia y Dani Lorenzo. Víctor García también entraba por Dani Sánchez. Faltaba un cuarto de hora.
El Málaga continuaba con su quiero y no puedo, sin contagiarse del empuje de la grada, y el Castellón vivía tranquilo. En el 84' Kastaneer fallaba lo inexplicable para sentenciar la noche. El público enfilaba las escaleras de Martiricos viendo la impotencia del equipo, incapaz de levantar un ¡uy! Era un baño crudo de realidad para el Málaga. Que se queda a trece puntos más el goalaverage del ascenso directo, en el mes de enero, con toda la segunda vuelta por delante.