Antonio, desaparecido.
Hallan con vida a José Antonio, desaparecido desde agosto tras escapar de San Juan de Dios (Málaga)
- Sus familiares lo localizaron en el monte, a algo más de un kilómetro del psiquiátrico donde estaba ingresado.
- Más información: Hallan con vida a Yasmina, la mujer que estaba desaparecida en Churriana (Málaga)
Una familia de Málaga respira desde este lunes más tranquila después de localizar a José Antonio Torres, uno de sus seres queridos, que estaba desaparecido desde el pasado 28 de agosto tras escapar del centro San Juan de Dios de Málaga, donde se encontraba ingresado.
El hombre ha estado viviendo en el monte durante tres de las semanas en las que el centro psiquiátrico le perdió la pista. "También ha estado deambulando por la costa, estuvo en Fuengirola y ha pasado tres semanas en el monte, a un kilómetro 200 metros del centro en línea recta, en un monte que no esperábamos porque estaba cerca de la autovía", declara su hermano, Salvador, roto de dolor al ser él quien encontró a su hermano junto a sus tíos.
Al parecer, el hombre estaba "muy delirante, desorientado y muy delgado". Ha perdido mucho peso, porque solo bajaba del monte por la noche a buscar donde podía algo para comer.
Al parecer, José Antonio, que padece problemas de salud mental, tenía constancia de que lo estaban buscando, porque había visto carteles por la zona. De hecho, cuando se encontró con su hermano, trató de huir de inicio. Finalmente, ha podido volver al centro. "Ahora ya a descansar, espero que se recupere poco a poco y que vaya comiendo, porque creo que se ha quedado en 35 kilos", zanja.
Su caso
El 28 de agosto, antes de la cena, José Antonio Torres, que tiene 41 años y padece varias enfermedades mentales, escapó del centro a través de una valla. No es la primera vez que lo hacía. Ya había huido en seis ocasiones en menos de tres años. El pasado mes de mayo llegó hasta Torremolinos y en el mes de enero fue hallado por las autoridades durmiendo entre cartones en la zona de calle Larios.
Aunque sí es cierto que a Salva le da rabia la situación de las personas con problemas de salud mental como su hermano. Cree que hay que estar más pendientes de ellos e incrementar la seguridad desde las instituciones. "Yo tengo a mi hermano en este centro porque no hay nada más adaptado a sus necesidades. Esto es así", zanjaba.