La Policía Nacional ha detenido en Málaga a un hombre español por su presunta relación con el contrabando de diamantes de sangre, es decir, todos aquellos procedentes de países inmersos en conflictos bélicos que se utilizan para financiar costes de guerra. En concreto, obtenía estos diamantes en milicias paramilitares que que esclavizaban a civiles, que servían como mano de obra en minas de Sierra Leona.
Así lo ha comunicado este sábado la Policía Nacional en un comunicado. La investigación ha sido larga y complicada. Todo comenzó en 2020, cuando se presentó una querella por parte de una víctima civil que había trabajado como esclavo en una de estas minas dirigidas por el Frente Revolucionario Unido.
Tras las oportunas pesquisas policiales, en las que la policía asegura haber contado con un "amplio apoyo" de la comunidad internacional a nivel policial y judicial, se constató que el ahora detenido fue empleado de una mercantil que se habría lucrado con la actividad ilegal relacionada con los diamantes de sangre.
Diseñador del entramado
El arrestado contaba con una amplia experiencia en el sector. Fue diseñador y coordinador de una trama empresarial que habría permitido el blanqueo y circulación ilegal de los diamantes de sangre por toda Europa.
Según los investigadores, el detenido con su actividad habría financiado directamente al Frente Revolucionado Unificado (RUF), sustentando así su lucha en la Guerra Civil de Sierra Leona.
Así, durante la década de los 90 diseñó y supervisó las acciones de todo un entramado empresarial con sedes en distintos lugares como Liberia dedicadas, supuestamente, a la extracción, comercialización y exportación de diamantes.
Su modus operandi se basaba en blanquear los diamantes de sangre obtenidos en Sierra Leona bajo este entramado como supuestos diamantes obtenidos de manera legal en su país vecino, Liberia.
Una vez conseguían de manera ilegal estas piedras, extraídas, en concreto, de las minas de Boedu y Kono, de las que tenían el control niños soldados del Frente Revolucionario Unificado, estos diamantes viajaban hasta una de las filiales del entramado empresarial en Liberia.
La entrega era realizada por militares de la milicia, la cual encontraba con esta venta su forma de financiación de la guerra. Según los investigadores, el arrestado habría participado directamente en la compra presencial de estos diamantes, coincidiendo así con militares del RUF quienes le hacían directamente la entrega.
Una vez ocultado el origen real de la extracción y ya blanqueados los diamantes como piedras extraídas de forma legal en Liberia, estos eran vendidos principalmente a una empresa belga quien los introducía finalmente en el mercado europeo.
Detención en el aeropuerto
Como la Comisaría General de Información de la Policía Nacional tiene entre sus funciones la investigación de delitos de lesa humanidad, crímenes de guerra y genocidio, y tras investigar y constatar que la persona había llegado a España, en la noche del pasado martes procedieron su detención en el aeropuerto de Málaga, el detenido viajaba desde Brasil donde residía desde 2007.
Precisamente, la colaboración con la Policía Federal brasileña ha sido fundamental para avanzar en la investigación. Desde la Policía Nacional califican de “indispensable” el trabajo que han hecho junto a ellos.
Tras el oportuno dispositivo de seguridad que finalizó con la detención de este ciudadano español, se procedió al registro de una amplia finca en Málaga, residencia de verano del detenido. Fruto de este registro los agentes incautaron documentación y dispositivos electrónicos de interés para la investigación que están siendo ahora analizados.
El arrestado fue puesto a disposición del Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional este pasado viernes, cuyo titular decretó su ingreso en prisión.
La operación que ha sido realizada por la Comisaría General de Información ha contado con la colaboración de las Brigada Provincial de Información de Málaga, coordinada por la Fiscalía de la Audiencia Nacional y dirigida por el Juzgado Central de Instrucción número Uno. Además la investigación ha contado con un amplio apoyo y colaboración de la comunidad internacional.
Historia
Cabe recordar que, entre los años 1991 y 2002 tuvo lugar en Sierra Leona una cruenta guerra civil entre el Gobierno legítimo y los opositores armados.
La guerra dejó más de 70.000 personas fallecidas y 2,6 millones de desplazados. El Tribunal Especial para Sierra Leona (TESL) condenó a penas de cárcel a algunos de los responsables de cometer delitos de Lesa Humanidad y Crímenes de Guerra, constatando en sentencia que una de las principales fuentes de financiación de la guerra civil fue el comercio de diamantes extraídos en minas abiertas de ese país, en condiciones de esclavitud y utilizando mano de obra secuestrada por las fuerzas opositoras.
El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) declaró ilegal el comercio de diamantes obtenidos en estas circunstancias.