El edificio más castizo de todo Madrid se encuentra a escasos metros de la Gran Vía. Cada calle emblemática, cada objeto o cada tradición que represente Madrid tiene una habitación en el Hotel Mayorazgo.
Detalles que van desde que el personal luce uniformes tradicionales de chulapos y chulapas a que el hotel huele a Madrid con su fragancia 'Aire de Madrid' que impregna las 200 habitaciones temáticas inspiradas en la capital con aromas a violeta y otros olores que caracterizan a la capital.
Pero todo empieza en su fachada, revestida con su característico mantón de Manila que hace que miles de personas que pasean por la Gran Vía posen sus ojos en el número 3 de la calle Flor Baja. Allí, haciendo esquina entre dos edificios, resalta este establecimiento de cuatro estrellas que simplemente desde su exterior ya exhibe su personalidad inspirada cien por cien en Madrid.
Un hotel de lujo que está en venta por 60 millones de euros, según ha avanzado esta semana El Confidencial. Sus propietarios, los hermanos Salazar Gordon, han encargado a Bankinter Investment la venta del inmueble, que de momento está obteniendo resultados óptimos, ya que cuentan con un potencial comprador y la venta se encuentra en un proceso bastante avanzado.
A su vez, el establecimiento de ocho plantas ha llevado a cabo la renovación integral de algunas de sus habitaciones y espacios. La reforma ha empezado por el característico mantón de chulapa de la entrada que ahora luce un color más avivado y rosetones 3D.
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Cada habitación tematizada está valorada en 300.000 euros y recientemente han inaugurado nuevas habitaciones que se suman a la lista del casticismo madrileño del Mayorazgo. La habitación de Bocadillo de Calamares, Moncloa, Metro de Madrid, Las Chatitas, Parque Warner, Cortylandia, San Isidro, Templo de Debod, Crico Price, Retiro, Madrid Río, Doña Manolita, la de Pontejos, la de Chueca, La del Arco de Cuchilleros, La del más chulo que un 8, La de Agua, azucarillos y aguardiente, La Paloma, Las Vistillas, etc. y su suite de Madrid al Cielo, son solo algunas de ellas.
Hay unas más demandadas que otras, pero sobre todo, depende de la época. Recientemente, la de Chueca estuvo semanas reservada por las fiestas del Orgullo, y la de la Paloma lo estará cuando sucedan en agosto en La Latina, así como pasó con la de San Isidro el pasado mes de mayo.
¿Cómo se les ocurren estos nombres tan madrileños? "Lluvia de ideas a pulmón", dice Jesús Jerez, director de Marketing, que lleva toda la vida en el hotel y es de los pocos 'gatos' que tiene Madrid. Mientras Jerez muestra algunas de las habitaciones a Madrid Total, calcula que pasar una noche en el Hotel Mayorazgo puede rondar entre los 150 euros la noche hasta los 390 en temporada alta.
Habitaciones nuevas
Entre las habitaciones recientemente inauguradas están La del Arco de Cuchilleros, recreación artística de ese famoso pasaje que da acceso a la Plaza Mayor; La de Patones, un homenaje a ese encantador pueblo de la región; La del más chulo que un 8, una expresión que se hizo popular por el gran número de chulapas y chulapos que esa línea de los antiguos tranvías trasladaban hasta la zona de La Pradera el día de la festividad de San Isidro; La del Tranvía, medio de transporte popular que permaneció en activo durante cien años; La de Lavapiés, barrio multicultural y fiel exponente del carácter abierto y cosmopolita que distingue a la ciudad o La de Agua, azucarillos y aguardiente, la conocida obra del género chico ambientada en el Madrid de los últimos años del siglo XIX.
Los niños mandan
El Mayorazgo es también un hotel para familias en el que los detalles infantiles no faltan. Las principales habitaciones para padres con niños son la de Cortylandia, el Parque Warner, el Ratón Pérez y la Casa de las Fieras —recreación de aquel zoológico que se construyó en Retiro—.
Cuando hay varias habitaciones libres y llega una familia para hospedarse, visitan las diferentes habitaciones para que los niños elijan la que más le gusta. "Es un regalo ver cómo se sorprenden cuando les enseñas cada habitación. Lo mejor es ver su cara de sorpresa y emoción al ver la decoración de cada habitación. Y luego... aquí los niños mandan", explica Jesús Jerez, que asegura que la favorita entre los pequeños es la del Ratoncito Pérez. "Tiene el cojín de un diente y les encanta. Llevamos más de 300 encargados porque se los suelen llevar".
Las habitaciones del verano
Para este verano hay 52 habitaciones con terraza que el hotel incluido en su colección Summer in the City. En ella, destacan La de Madrid Río, que evoca a esos paseos al atardecer en la ribera del Manzanares; La del Retiro, recordando esos pícnics y travesías en barca en este popular parque madrileño; La del Pantano de San Juan, rememorando las escapadas a este famoso pantano en el que los madrileños se refrescan cada verano; La del Templo de Debod, para vivir esos atardeceres imborrables en la retina desde este rincón de la ciudad; sin olvidarse de La de Guadarrama, en plena sierra madrileña, lugar ideal para alejarse de las altas temperaturas de la ciudad; La de la Casa de Campo, auténtico pulmón verde de la ciudad con un lago donde resulta posible navegar en barca y una numerosa oferta de restauración. Esta selección se completa con un amplio abanico de habitaciones que cuentan con espaciosas terrazas, auténticos oasis privados, con bañera de hidromasaje en algunos casos.
Su restaurante
En su restaurante Gastrovía 61, por estar el hotel a la altura de Gran Vía 61, te recibirán sus camareros vestidos de chulapos y te sentarán en una mesa llamada como una de las plazas más famosas de la ciudad, acorde con las imágenes del Madrid de época que presiden las paredes. El precio medio por comensal es de 30 euros por persona.
En la carta, de cocina de proximidad con un toque internacional, cada plato tiene un nombre típico madrileño y por ello se acompaña de un 'Glosario de Términos Castizos' que explica los nombres que solo el más 'gato' podría conocer al completo.
En definitiva, cada rincón y cada detalle es 'muy Madrid' en el Hotel Mayorazgo.