Lobato saca partido del caso del novio de Ayuso: el PP ni siquiera puede atacarle por la 'trama Koldo'
La semana política en Madrid ha estado marcada por la denuncia de la Fiscalía contra Alberto González por defraudar más de 350.000 euros.
15 marzo, 2024 01:54La semana política en la Comunidad de Madrid ha estado marcada por la denuncia de la Fiscalía contra el novio de la presidenta Isabel Díaz Ayuso, Alberto González Amador, por, supuestamente, defraudar más de 350.000 euros a Hacienda entre los años 2020 y 2021, y por un delito de falsedad documental.
Una situación muy bien aprovechada por la oposición regional que, este jueves en la Asamblea, se paseaba con la cabeza más alta y las intervenciones más irónicas. Tras los erráticos cambios en el discurso de la presidenta, la oposición ha aprovechado la situación que, a posteriori, se comentaba en los pasillos.
Y es que, ha sido el propio Gobierno regional el que, durante sus intervenciones, ha convertido a Alberto González Amador en un tema de debate político. Defendiendo ellos mismos a una persona anónima en una Cámara autonómica, la oposición se sentía "validada" para sacar el tema.
"¿Y Begoña?", le preguntábamos los periodistas en relación con los supuestos beneficios o tratos de favor vinculados a la mujer del presidente. "Él no ha hablado de ello", respondían. O lo que es lo mismo, si el Gobierno (o Ayuso) le defienden, podemos atacar.
El Partido Popular ha querido cambiar el discurso. Aseguraba que toda la persecución hacia la pareja de la presidenta era para tapar la ley de la Amnistía y hacía comparaciones con el 'caso Koldo' o el piso de lujo en el que vive la exportavoz de Más Madrid, Mónica García. ¿El problema? Nada de eso toca a Juan Lobato.
Con su opositor más templado y alejado de la 'trama Koldo' —puesto que no se le ha relacionado de ninguna manera con la investigación que sacude al PSOE—, Ayuso pinchaba en hueso.
La presidenta no le podía recriminar tratos de favor, ni la ley de la Amnistía —que ha criticado en alguna ocasión (aunque con la boca pequeña)—. Lobato está siendo uno de los más independientes de Ferraz y eso, evidentemente, le ha beneficiado.
De hecho, la acusación más dura que ha lanzado la líder de los madrileños sobre el socialista ha sido que su partido le quería quitar el puesto. Una declaración que, según fuentes consultadas, le beneficia más que le perjudica.
Mientras que en Más Madrid aseguraban que hay "mucho más por salir", la defensa de Manuela Bergerot se diluía. La presidenta hablaba del piso de la vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, de 400 metros cuadrados y pagado por el Ejecutivo central, sin decir que es del Ministerio y todos los ministros de Trabajo lo han usado. O de la propiedad del Retiro en la que vive la ministra Mónica García. El debate inmobiliario en el que se había convertido la Asamblea les afecta a ambas.
Además, el PSOE de Madrid se ha mantenido al margen de las supuestas filtraciones por parte del Ministerio de Hacienda. Y, en el inicio de su intervención, Lobato ha entonado un "mea culpa" criticando el 'caso Koldo'.
Cambio de discurso
Ni siquiera los miembros del Partido Popular eran capaces de defender en la Asamblea de Madrid el cambio de estrategia de comunicación por parte de su líder. Si nos remontamos al origen de los hechos, lo primero que hizo la presidenta, tras conocerse la noticia, fue alegar que era "una investigación de Hacienda". "Primero investiga y luego se ve qué pasa".
Pero, conforme fue avanzando la jornada del martes, el Gobierno nacional empezó a usar esto en contra de la figura de la líder de los populares madrileños y el discurso se empezó a embarrar. La vicepresidenta, María Jesús Montero, habló de una información antes de que lo publicaran los medios. Y eso dinamitó todo. "Son datos privados", repetían una y otra vez este jueves miembros del Partido Popular en los pasillos.
A la pregunta de por qué Ayuso peca de lo que ella misma reprocha y trata este tema (personal) bajo las siglas de "Comunidad de Madrid" en el Consejo de Gobierno, nadie ha sabido responder. Defienden la necesidad de aclarar la situación. Sin más.
Ahora bien, ese miércoles Ayuso hablaba de que es Hacienda la que debe a su pareja 600.000 euros y, aunque nunca dice que no exista delito, señalaba una "cacería" contra su pareja desde los poderes del Estado. "Una persona anónima" repite una y otra vez.
De ahí, a la tarde. Momento en el que desde su equipo se lanza la noticia de que la Fiscalía del Estado había intentado llegar a un pacto con su pareja por el delito fiscal que, supuestamente, ha cometido. Él pagó los 350.000 euros, aunque eso no lo exima de ir a juicio, y, tal y como afirmaban esas fuentes, ahora todo parecía más claro.
El problema surgió el jueves cuando es la propia Fiscalía la que se comunica con los medios para negar la mayor. Aseguran que el pacto no lo ofrecen ellos, sino el acusado. Con cruce de fechas incluido (dan la noticia al implicado a la vez que a los medios), el discurso de Ayuso cambia.
Y es que, en la Asamblea regional, la presidenta ya no ha hecho una defensa a ultranza de su pareja y ha preferido evitar las continuas acusaciones de la oposición. Sí ha seguido una línea marcada desde el miércoles: la de la ley de Amnistía. "Quieren tapar la ley", repetía una y otra vez la líder de los populares madrileños.
PSOE y Más Madrid
Este viernes, la oposición pretende seguir "exprimiendo" el asunto, aunque todo parece indicar que la línea del Gobierno de la presidenta es dejarlo pasar. Ya ha sido esquiva con el tema este jueves y, como repetían sus compañeros de grupo municipal "y amigos", quieren dejar "la vida privada de un ciudadano, en la intimidad".
PSOE y Más Madrid acudirán este viernes juntos a la presentación del Informe de la Comisión Ciudadana por la Verdad en las residencias de Madrid durante la Covid-19. El acto lo tiene todo.
Tratarán un tema que lleva persiguiendo a Ayuso desde la pandemia (la gestión de las residencias) y lo harán, además, en el Ateneo. Una institución cultural de la ciudad de Madrid a la que le han quitado la subvención, con la correspondiente polémica que esto acarreó.
Habrá que esperar para saber si en este acto también sale a relucir el novio de Ayuso. La presidenta, por su parte, no hará declaraciones. Su agenda ha sido despejada y no tiene actos públicos.