Dieciocho centros de salud de la Comunidad de Madrid necesitan un plan de rescate específico y "urgente" por su alto déficit de profesionales sanitarios. O lo que es lo mismo, por el gran número de plazas para médicos de Atención Primaria y Pediatría que están sin cubrir.
Así lo ha denunciado esta semana el sindicato médico tras la huelga celebrada el pasado año contra la Consejería de Sanidad, AMYTS, quiénes han revelado en un informe las "preocupantes" cifras de 18 centros sanitarios. Ninguno de ellos en el norte de la región.
Y es que, si se analiza detenidamente el documento remitido por el sindicato médico, se observa que ninguno de los casi veinte centros a los que el sindicato considera "críticos" están en la zona norte de la región.
Ni siquiera los que están en pleno Madrid rompen la tendencia: dos están en el barrio de Vallecas, uno en Villaverde y tres en Carabanchel. En concreto, en la capital los centros con mayor déficit de médicos de familia y pediatras son los de Abrantes, Carabanchel Alto, Nuestra Señora de Fátima, Los Rosales, Vicente Soldevilla y Campo de la Paloma.
Entre todos ellos, y sólo en la capital, suman un total de 33 plazas de médico de Familia sin cubrir y 11 de pediatría. Una situación "crítica", según ha denunciado AMYTS por la "grave" falta de médicos de familia y pediatras y por la que piden poner en marcha un plan.
Según las estimaciones del sindicato, 389.000 madrileños no tienen médico asignado en estos centros "caídos" y, en numerosos casos, desde hace demasiado tiempo.
Amyts subraya en un comunicado que la Consejería de Sanidad "no puede mirar para otro lado sin hacer nada" para cubrir las plazas del centro de salud Navalcarnero, donde faltan cuatro de nueve pediatras, el Parque Loranca, donde hay diez de dieciocho médicos de familia, el centro de salud Vicente Soldevilla donde faltan seis médicos de familia de dieciséis plazas, o el centro de salud Abrantes, donde hay ocho médicos de familia de los diecisiete que debería tener.
Tabla elaborada por AMYTS con centros en estado crítico.
Según el estudio elaborado por el sindicato, además de en estos tres barrios madrileños, los problemas de profesionales están en Alcalá de Henares (dos), Torrejón (uno), Alcorcón (dos), Fuenlabrada (cuatro), Pinto (uno), Valdemoro (uno) y Navalcarnero (uno). Todos ellos, municipios del sureste o del sur de la región.
¿Qué piden?
A juicio del sindicato médico, para hacer atractivos todos estos centros de salud hacen falta incentivos económicos y medidas que contribuyan a la conciliación. Al final es la 'pescadilla que se muerde la cola', si faltan muchos médicos, el resto sufren una sobrecarga de trabajo y piden un traslado y el déficit no para de aumentar.
Según el sindicato, el principal problema de estos centros de Atención Primaria está en las plazas de tarde. Consideran que si se pudiera 'premiar' a los sanitarios que cogen este turno con promoción en la carrera profesional, tal vez serían más atractivas para los médicos.
La propuesta es similar a la que llevaron para los centros de salud en la huelga de Primaria: que puedan optar a subir de nivel cada tres años trabajados en tardes puras. También plantea la posibilidad de adquirir mayor puntuación por mes trabajado en bolsa de trabajo en tardes puras.
El resto de propuestas son muy similares a las que obtuvieron de la Consejería de Enrique Ruiz Escudero en marzo de 2023, cuando desconvocaron la huelga de Atención Primaria que llevaba vigente desde el mes de noviembre.
Turnos deslizantes para facilitar conciliación, la remuneración de 500 euros mensuales durante un año para plazas de tarde de difícil cobertura, una mayor agilidad y transparencia en la asignación de módulos para atender las agendas de rebosamiento y la instauración del nuevo modelo de agendas de forma homogénea en todas las direcciones asistenciales.
Cuando desconvocaron la huelga obtuvieron remuneraciones, mejora en el número de pacientes a atender por día y otros derechos que, aun así, parecen no ser suficientes para hacer atractivas las plazas en determinados centros de salud.
Es por eso por lo que, desde AMYTS aprovechan la situación "crítica" de estos centros para insistir en que "la recuperación en esta docena y media de centros todavía no ha llegado".
Por ello, insisten en la necesidad de poner en marcha un plan de rescate y consideran que hay que poner fin a que se sigan forzando las agendas de los médicos y pediatras por encima de 34 y 24 pacientes, como marca el acuerdo de huelga, por lo que el sindicato insta a la Consejería de Sanidad a tomar medidas de triaje y control de la demanda, además de promover campañas informativas dirigidas a la población.