Después del traslado de la estatua de Carlos III y del desplazamiento del Oso y el Madroño, la Puerta del Sol sigue colocando piezas para ultimar su última reforma. Este miércoles ha comenzado a instalarse la placa con el famoso Kilómetro Cero de la capital. Ahora, estará rodeada por una gran rosa de los vientos e incluirá los nombres de las capitales de provincia y las ciudades autónomas de Madrid.
Según informan fuentes del área de Obras y Equipamientos a Europa Press, la idea con la instalación del 'nuevo' kilómetro Cero es potenciar la visualización de la placa y su presencia en la plaza frente a la Casa de Correos, sede del Gobierno regional y que se ubica en el mismo eje de la puerta principal.
Para ello, se ha diseñado un círculo que envolverá la placa en forma de rosa de vientos y que representará de forma directa al km 0. Con la localización de todas las capitales de provincia y de las ciudades autónomas "se pretende que los visitantes que lleguen a Madrid sitúen su ciudad de origen en este lugar y se identifiquen con la capital como el lugar de todos".
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Para el nuevo km 0, se han utilizado los mismos materiales que en el resto del espacio: granito gris, las piezas de latón que marcan los radios de la plaza, y un granito negro especial para realizar el característico diseño bicolor de las rosas de los vientos.
El origen del km 0
Durante el reinado de Felipe V a principios del siglo XVIII, se construyeron seis carreteras que partían de Madrid. Poco después se nombraron las carreteras con números romanos que siguen a la letra N, de nacional. En la actualidad se siguen utilizando estas carreteras denominadas Nacionales seguidas del número original.
Algo después, con Carlos III, se construyó la Casa de Correos, y se fijó ese punto cero justo enfrente, ya que era la manera idónea de organizar el sistema postal de imperio.
En 1950 se colocó la Placa del Kilómetro Cero frente al edificio de la Casa de Correos, llamada en ese momento Casa de Gobernación. De este modo se indicaba el lugar exacto desde el que se miden las distancias en las seis carreteras nacionales.
La estatua de Carlos III y el Oso
Con la instalación de la famosa placa, el Ayuntamiento de Madrid sigue completando la reforma de la Puerta del Sol. El pasado viernes fue la estatua del Oso y el Madroño a la que le tocó hacer las maletas para mudarse otra vez, eso sí, sólo unos 10 metros de distancia de donde estaba hasta entonces.
El trabajo lo llevó a cabo el equipo de profesionales de la UTE Madrid Centro Azvi-Licuas, dirigido por el arqueólogo y conservador Miguel Ángel López Marcos, quien ya fue el encargado también de otra mudanza mucho más complicada en la Puerta del Sol: la de la estatua de Carlos III.